Panderrueda - Gildar - Panderrueda

Bonita actividad realizada por las tierras leonesas de Valdeón, desde la que, partiendo del puerto de Panderrueda, ascendí al Pico Gildar, para volver de nuevo al Puerto.

La ruta no presenta ninguna dificultad técnica, los primeros dos kilómetros más o menos iremos por un bello camino que nos adentrará en un bosque de hayas, una vez sobrepasado el mismo, crestearemos durante otro par de kilómetros hasta llegar a la falda del sector del Pico Cebolleda y el Pico Gildar, aquí aprovecharemos las mejores trochas para ir acercándonos hasta el objetivo del día, el Gildar.

Una vez que lleguemos a los pies del Gildar iremos remontando el curso del Arroyo que más adelante se convertirá en el mítico río Cares, llegaremos a un pequeño altozano donde veremos más claramente una especie de turbera que es donde nace el Cares, iremos siempre por la parte izquierda de la misma y en la parte superior de la montaña observaremos una especie de cartel, que es hacia donde deberemos de orientar nuestros pasos aprovechando las diversas trochas que observaremos.

Una vez en el cartel ya solo tendremos que seguir el evidente camino que veremos para alcanzar la cumbre de este impresionante pico.

Las vistas son impresionantes, es difícilmente encontrar otra cumbre en el entorno con unas vistas parecidas, observando cumbres como las Pintas, Peña Ten, Pileñes, el Pico Jario, Peña Beza, todos los Picos de Europa (al menos una gran parte de sus cumbres, como Torre Santa, Torre Bermeja, Torre de la Palanca, LLambrión, Fierro, Torre Salinas...), también veremos el Espigüete, Peña Prieta, Pico Pandián... vamos... en un día despejado es un goce para los sentidos...

Tras haber descansado un rato descendí en un principio por el mismo lado por el que ascendí, pero al llegar de nuevo a las faldas del pico seguí el cauce seco del arroyo para llegar hasta la altura de una majada que hay un par de kilómetros más abajo y desde ahí, empalmar con una pista amplia y que cuatro kilómetros más adelante me volverá a dejar de nuevo en el Puerto.

Destacar que se trata de una de las actividades más sencillas que se pueden hacer por la zona y con unas vistas impresionantes.

En invernal la cosa se complica exponencialmente, hace unos años intentamos realizarla y nos tuvimos que dar la vuelta solo a falta de un kilómetro de alcanzar la cumbre porque el material de montaña que llevabamos era muy escaso y la prudencia nos dijo que deberíamos dar la vuelta... y eso que llevábamos raquetas, por lo que aconsejo que si se hace en invernal se realice también la misma con crampones.

Un saludo y hasta la próxima actividad.