PARATAS DE CHORRERAS NEGRAS (SENDERO DEL AVION) Y PUERTA DEL ALHORI DESDE EL POSTERO ALTO

Preciosa ruta en pleno deshielo preestival de Sierra Nevada en la que hemos podido disfrutar de la grandiosidad de la Cara Norte del Picón de Jerez sintiendo la valentía de las personas que arriesgaron su vida de forma desinteresada en plena tormenta invernal para conseguir socorrer a los accidentados de un accidente aéreo a gran altura en la agreste ladera de este coloso nevadense. La espectacularidad del Barranco del Alhorí con la alegría de sus innumerables saltos de agua, las sobrecogedoras Chorreras Negras, el capricho natural de varias formaciones gélidas en forma de sucesión de túneles, cascadas y enormes orificios de belleza efímera que nos han brindado finalmente un trayecto inolvidable.
Iniciamos la ruta desde el Refugio Postero Alto, tomando dirección sur por el cortafuegos durante unos 300 m donde apreciaremos a nuestra derecha balizas indicativas del Sendero Sulayr (GR-240), puesto que por aquí discurre su etapa 17 y que se adentra en un frondoso pinar iniciando un descenso en busca del Río Alhorí a través de un precioso y sombreado sendero . Llegaremos a la Casa del Guarda y a unos llamativos muros de pizarra de un antiguo canal hidroeléctrico y un poco más abajo encontraremos un amplio aprisco ganadero, los Corrales del Toril, para inmediatamente llegar al Río Alhorí que cruzamos por un puente de madera. Iniciamos ahora el ascenso en dirección nororeste. Coincidiremos ahora con el Sendero del Avión (PR –A 344), proveniente de Jerez del Marquesado y que durante un tramo comparten trazado ambos senderos. Pasaremos junto a las ruinas del Cortijo Rosetas y a su antigua balsa de agua. Seguimos ascendiendo alternando prados y pinar de repoblación por la Cañada de Mahoma hasta llegar a unos prados más abiertos donde se ubica Corral Nuevo y su aprisco. En este cruce de caminos seguimos el sendero a nuestra izquierda que asciende hacia el este. Un poco más adelante encontraremos una bifurcación perfectamente señalizada por un poste donde se separan el Sulayr del Sendero del Avión. Nosotros tomamos el sendero de la izquierda en dirección a Chorreras Negras, dejando el Sulayr que continúe rumbo a Peña Partida. Seguimos ascendiendo por el pinar ahora con una pendiente más acusada, saliendo del mismo en las proximidades de Prado Hondo, donde justo antes de llegar a unas antiguas corralizas vira el sendero hacia el este prosiguiendo el ascenso ya entre piornal y con unas vistas fantásticas sobre el Picón de Jerez así como toda su arista norte mostrándonos como claras referencias sobre nosotros la Piedra del Sombrero, el Cerro de Mirador Alto y el del Mirador Bajo. El sendero sigue ganando altura pasando por encima de las Piedras de los Lobos con unas vistas superlativas del Barranco del Alhorí, la Loma de En medio, el Postero Alto, el Picón de Jerez y los Tajos de Chorreras Negras, amén de todo lo que se queda más abajo como la Hoya de Guadix, el Marquesado del Zenete y la Sierra de Baza, y más al fondo la Sagra y la Sierra de Cazorla, la Sierra del Pozo, la Sierra de Castril,….Fantástico escenario de fondo de nuestro avance. Tras pasar bajo los Tajillos de la Meseta del Tesoro nos introducimos en el Barranco del Tesoro y tras atravesar un bello prado donde los hitos de pizarra embellecen aún más el difuminado sendero llegamos a la Acequia del Corazón, perfecta muestra de acequia de careo tan características en esta sierra y que constituye un magnífico vestigio cultural a proteger. Seguimos esta bella acequia aguas arriba y que nos conduce en un suave ascenso en dirección suroeste, bajo los Prados del tesoro, pasando por el Barranco de la Piedra Ventana o del Picón, en un bello avance hasta llegar a su punto de carga en el Barranco de Carboneras, bellísimo enclave en pleno deshielo donde subiendo unos metros por el arroyo tuvimos la suerte de disfrutar sumergiéndonos en un túnel de hielo formado por varias cascadas y que engrandecía aún más este camino. Tras pasar el barranco que desciende vertiginosamente en busca del Río Alhorí, seguimos ascendiendo por los Casinos hasta llegar a las Paratas de Chorreras Negras, lugar donde el 8 de Marzo de 1960 a causa de un temporal que azotaba ese día Sierra Nevada cayó un avión de transporte de las fuerzas navales norteamericanas que cubría el trayecto Nápoles-Rota con 24 ocupantes. Dos tripulantes lograron bajar hasta el pueblo de Jerez del Marquesado para pedir ayuda. Sin esperar a que llegaran los grupos de rescate, en plena noche y enfrentándose a la violenta ventisca de nieve que azotaba la montaña, un grupo de jóvenes del pueblo consiguió llegar hasta el avión, que se encontraba en este lugar, a casi 2500 metros de altitud, y prestaron los primeros auxilios a los 24 marines norteamericanos que ocupaban el avión y que, milagrosamente habían sobrevivido al accidente (la gran acumulación de nieve que suele haber en esta zona amortiguó mucho el impacto), salvándose todos ellos resultando 13 ilesos y 11 heridos de diversa consideración. El Gobierno norteamericano premió aquél acto de solidaridad enviando ropa y comida al pueblo durante varios años y regalando al pueblo los restos del avión siniestrado de cuya venta se obtuvo 1.400.000 pesetas de las de entonces que se utilizaron para arreglar el campanario y llevar el agua corriente al pueblo. Un panel explicativo nos ilustra in situ del lugar exacto del impacto. El paraje es realmente impresionante, a los pies de los Tajos de Chorreras Negras, bajo el Ventisquero de la Vaca, entre lo agreste de un lugar que debe ser muy hostil en pleno invierno, lo que nos hace sentir la valentía, el coraje y el conocimiento de la sierra de aquellas gentes que en un acto de solidaridad desinteresada obraron una auténtica gesta.
Tras cruzar las Paratas de Chorreras Negras bajo unos considerables y tardíos ventisqueros en dirección sureste comenzamos a descender el Pie de Enmedio a través de un sinuoso sendero que pasa bajo el Tajo de la Cebolla y que encara el Barranco del Alhorí, conduciéndonos a su cauce justo en una espetacular cascada que a causa del deshielo nos la encontramos con gran caudal y nos regaló una estampa incomparable, con el Río Alhorí despeñándose con la fuerza que le aportaba el gran desnivel de la zona. Desde este punto comenzamos a subir río arriba por el lado derecho de la cascada siguiendo un sendero muy pendiente. Tras esta primera subida cruzamos el río y seguimos subiendo ahora por el margen contrario entre diversos saltos de agua y un ruido ensordecedor hasta llegar a otra gran cascada con enormes trozos de hielo fragmentados en sus márgenes en una bellísima imagen glacial más propia de otras latitudes. Desde este punto nos separamos del río y afrontamos la subida de lleno en línea recta hacia el sur para llegar a un sendero que ya en dirección este nos lleva a un collado junto a unos farrallones rocosos que constituyen un espléndido mirador natural sobre la parte alta del Barranco del Alhorí, el Picón de Jerez y el Ventisquero del Carbón. Iniciamos ahora el descenso siguiendo el sendero que nos conduce cómodamente hacia el este hasta coincidir con la Cañada Real de Trevélez, que desciende desde el Puerto de Trevélez y que siguiendo la Loma de Enmedio y con la clara referencia del Refugio de Postero Alto frente a nosotros nos conduce al punto inicial de la ruta tras avanzar por el cortafuegos completando así esta bella ruta circular.