Paredes de Escalona (Piedraescrita)

RUTA YACIMIENTO ARQUEOLÓGICO DE PIEDRA ESCRITA (PAREDES DE ESCALONA-TOLEDO).

DISTANCIA: 13,720 kms.

Comenzamos la ruta desde el paraje denominado Cerro Pelado, el lugar elegido es la confluencia de varios caminos por lo que es conveniente aparcar dejando paso a todos ellos. Bajamos la senda por la ladera de La Sierra para ir a buscar el camino de los Enebrales en el termino de Almorox. Pasamos por encima de unas piedras, por debajo se oye la corriente de agua aunque no se ve.

Seguimos por el camino de los Enebrales, desde donde tenenemos una vista parcial de Almorox; este camino es una ligera pendiente, nada exigente, que al llegar arriba nos permite tener bonitas vistas de Cadalso de los Vidrios, la Peña de Cadalso y la peña de Cenicientos.

Al llegar a la carretera de Almorox a Cenicientos tenemos que discurrir un tramo por la misma en direccion a Cenicientos hasta que encontramos un camino a la izquierda que nos llevará hasta el lugar donde se encuentra la Piedra escrita. La finca donde se encuentra es particular y está vallada, hay que bordearla, cruzar el arroyo dos veces, por un paso y un puente, y entrar en la finca por la parte de atrás donde abrimos una verja, entramos y volvemos a cerrar (deja todo como lo encontraste).

La Piedra escrita se piensa que es un momumento pre-romano y que posteriormente fue modificado en la epoca romana, la piedra que esta frente a la Piedra escrita se cree que es un berraco (jabali o cerdo) tumbado. Se trata de un monumento esculpido en piedra granítica, datada en el S.II d. C. Se trata de una edícula u oratorio rural, es decir, un santuario rupestre, esculpido como exvoto u obsequio, aprovechando una formación granítica natural, para consagrarla, junto con el sacrificio de dos animales a Diana, la diosa greco-romana de la caza y los bosques. Presenta inscripción romana en un lado, retocada y transformada en época cristiana.

Salimos de la finca realizando la misma operación dejando la puerta cerrada y, tras pasar por varias fincas privadas y cruzar un par de veces el arroyo, conseguimos enlazar con el camino. Un poquito de orientación y aventura.

Un poco mas adelante llego al mismo arroyo que cruzó por una pasarela y sin más sobresaltos llegamos al coche.

Seguimos caminando, ¿te vienes?