PARQUE DE UBIÑAS: Intento prematuro de Peña Ubiña (abril)

Ruta un poco agridulce con Alberto, Amelia y Blanca, ya que no pudimos cumplir el objetivo… pese a lo cual echamos un estupendo día de montaña.

Pensábamos hacer la clásica ruta desde Casa Mieres, pero había un nevero algo antes de llegar a La Cubilla y tuvimos que dejar el coche un poco más abajo. En vez de seguir a pata hasta Casa Mieres decidimos subir directos por la ladera y atajar un poco con ayuda del GPS ya que había una niebla espesa que no dejaba ver nada.

Después de esa subida seguimos el camino habitual hacia Peña Ubiña, bonito paseo en el que sólo tuvimos que superar una pequeña grieta rocosa con ayuda de las manos porque había un neverín feo en el camino. Llegando a la falda de la Ubiña Pequeña se disipó la niebla y nos quedó el típico día de cielo azul con mar de nubes impresionante.

Empezamos a subir Peña Ubiña por la vía habitual, bien marcada, y cuando habíamos pasado lo peor para alguien con mi vértigo, nos encontramos un nevero feo en medio del camino, con nieve blanda y mucho hueco escondido; como para joder una pierna, vaya. Decidimos ser prudentes y dar la vuelta.

Para reconducir el día nos pusimos a rodear la Ubiña Pequeña en sentido antihorario. Hay sendero pero por no perder metros de altitud nos metimos en un pedrero de peñas inmensas bastante entretenido, aunque de ir con cuidado y seguro que hubiese sido más fácil bajar a buscar el sendero. Por fin terminamos de rodear la pequeña Ubiña y se nos volvió a meter la nube, con lo que sólo quedaba ir pendientes del GPS para volver sobre nuestros pasos de la mañana.

Ruta guapísima pese a no haber logrado el premio gordo. Punto de prudencia para nosotros, hay que verlo así. Habrá que hacerla de nuevo sin niebla y sin neveros!
Aunque técnicamente Peña Ubiña puede ser moderada, la dejo difícil porque hay que trepar/gatear un poco y porque, pese a haberla subido varias veces, siempre supone un pequeño desafío para mi vértigo.