Parque Natural del Hayedo de Tejera Negra: Senda de las Carretas (extendida)

Ruta realizada el 18 de octubre de 2022
Aunque todavía es, quizás, un poco pronto para pillar el otoño en todo su esplendor me decido hoy a hacer una ruta por el Hayedo de la Tejera Negra, que seguro que algunos paisajes bonitos se podrán ver. Dicho hayedo se ubica al norte de la provincia de Guadalajara y es un auténtico tesoro. Se trata, junto con el de Montejo, del hayedo más meridional del Europa. Al ser una zona protegido su acceso está limitado y hay que reservar y pagar 5€ si se quiere meter el coche hasta el aparcamiento (no para ir al centro de visitantes).

En lo que es el espacio protegido hay establecidas dos rutas. La primera, denominada El Robledal, parte del propio centro de visitantes y es de unos 18 km de longitud. La segunda es la Ruta de las Carretas, de 6 km empezando en el propio aparcamiento y es la que se interna en el hayedo propiamente. Esta segunda será la que hagamos hoy, aunque la alargaremos un poco hasta los 10 km.

Salimos, por tanto, del aparcamiento del hayedo y empezamos la ruta en el punto donde hay varios paneles informativos. Tenemos un primer tramo en el que avanzamos paralelo al río Lilas por zona de pradera, se introduce en bosque de pinar, y después de cruzar un par de puentes ya nos internamos en el hayedo propiamente. El paisaje hasta entonces muy bonito con imagen del Pico La Buitrera y demás montes de la Sierra de Ayllón. Predominan los robles ya en tono marrón propio del periodo otoñal.

Al poco de internarnos en el hayedo llegamos a la carbonera e iniciamos una subida de unos 130 m de desnivel hasta el Mirador de Mata Redonda, donde tenemos una preciosa panorámica del hayedo y cimas aledañas (siendo la más alta la Buitrera). En el hayedo, aunque no predominan, ya se ven tonos amarillentos y ocres que mezclados con el verde y la combinación con pinos resulta muy bonito.

Después del mirador seguimos por la senda, perfectamente balizada y señalizada periódicamente, internándonos por el hayedo. ¡Qué maravilla!. Continuamos por el hayedo hasta llegar al desvío señalizado con Waypoint, en lugar de retornar al aparcamiento por la ruta (que sería ir por la izquierda) decidimos alargar un poco más, por la derecha, para pasar por el Collado del Hornillo. De ahí bajamos por ancha pista forestal, trazado común a la senda del Robledal, hasta el desvío marcado donde bajaremos unos metros hasta enlazar con la vía de acceso al parking. Todo por anchas pistas forestales sin posibilidad de pérdida. Con este alargamiento se extiende la longitud de la ruta hasta los 10 km.

Llegamos al parking y hacemos una larga parada para comer. Hay fuente y en la pradera, al lado del río Lilas, es una delicia. Lástima la tremenda sequía que hace que el río baje con un caudal muy disminuido. Acabamos de comer y a casa, muy contentos de haber conocido este precioso paraje del Hayedo de la Tejera Negra, que por cierto toma su nombre por un tejo que en la propia ruta podemos ver.