Pasarelas de la Hoz Mala de Aliaga (sendero fluvial)

La ruta que os presentamos transcurre por la Hoz Mala Aliaga.



La ruta no presenta dificultades técnicas ni físicas ni mucho menos importantes pero para realizarla te aconsejamos que al menos estés algo habituado a andar por la montaña y sendear.
Durante el camino tendremos que superar algunos fuertes desniveles, algún que otro escalón de piedra y atravesar algunas pasarelas metálicas colgadas de la roca, pero como os decimos no presenta grandes dificultades aunque si tienes vértigo quizá en algún tramo te lo tengas que tomar con más calma.

El recorrido se puede hacer bastante más largo iniciando la ruta desde la propia población de Aliaga, pero para no alargarla tanto hemos decidido ir directamente al tramo más abrupto y espectacular de la ruta.


LA RUTA

La ruta se inicia junto a la carretera, donde como os decíamos ya veremos una serie de indicadores.

Nosotros seguiremos el PR-TE 10 a la Hoz Mala.

Comenzamos bajando en dirección al rio por un sendero que va bordeando la valla de los terrenos de la Central y tras serpentear un poco al final nos deja junto al Embalse de Aliaga.

Desde aquí frente a nosotros vemos el puente de la presa y como unos indicadores nos muestran dos senderos, uno que pasa sobre el puente en dirección a Aliaga y otro que sigue recto en dirección NE que se dirige al interior de la Hoz Mala. Este será el nuestro.

Comenzamos a caminar por un sencillo sendero que primero nos conducirá por la margen izquierda del Guadalope mientras vamos dejando la Central Térmica atrás y el sendero se va tornando cada vez más bonito y a través de diferentes tramos de “sube-baja” nos lleva hasta el propio rio, donde un puentecito o pasarela metálico nos ayuda a cruzar a la otra orilla y comenzar a ascender de nuevo por el sendero.

Esta será la parte más “aérea” de la ruta y a medida que vamos ganando altura nos ofrece unas bonitas panorámicas de la hoz.

Es realmente espectacular ver como el rio ha ido excavando la profunda hoz durante años y años configurando un impresionante cañón en el que las altas paredes de roca apenas nos dejan ver el rio en su fondo salvo en algún punto aislado.

Tras caminar por la parte más alta de la ruta un pequeño tramo llaneando por el sendero llegamos a las primeras pasarelas metálicas de la hoz mala.

Estos tramos siempre son disfrutones (excepto si sufres de vértigo como la chica 3enruta jajaja, en ese caso el suelo perforado de las pasarelas te provocará cierto “mareo”).

Para acceder a la pasarela bajaremos unos escalones metálicos que ya forman parte de ella y comenzaremos a caminar sobre la pasarela, bien protegida por una barandilla de cable, sin ninguna dificultad.

Tras atravesar la primera pasarela seguiremos por un pequeño tramo de sendero colgado en la pared pero bien equipado con un cable para agarrarnos que da mucha seguridad y permite atravesarlo sin ningún tipo de problema.

Tras este pequeño tramo llegamos a una segunda pasarela metálica también bastante larga en cuya parte final tenemos unos escalones que nos ayudaran a bajar a suelo firme superando un buen desnivel.

Una vez en suelo firme continuamos caminando y comenzamos a descender ligeramente.
Hay un punto en que a la derecha del sendero principal vemos otro sendero que nos lleva hacia el Barranco de Villarosario (no hay indicación y solo son unas decenas de metros). Vale la pena acercarse ya que la confluencia de los dos barrancos conforma una zona espectacular en la que te sientes minúsculo en medio de esos colosos de piedra a modo de cueva gigantesca.

Retrocedemos unos metros y volvemos a la senda principal para comenzar a descender esta vez de forma mucho más pronunciada, primero por unos tramos serpenteantes en los que encontramos una larga sucesión de escaloncitos que nos hacen perder desnivel rápidamente hasta llegar al mismo rio.

Durante el trayecto encontraremos algunos pasos sobre grandes rocas en los que nos podremos ayudar de grapas y algún escaloncito metálico para superarlos más fácilmente pero nada complicados si estamos acostumbrados a salir al monte.

Al llegar al rio parece que cambiemos de ruta.

Dejamos de ver la hoz desde la altura del sendero inicial para comenzar a caminar por su interior, pegados al rio, cruzándolo en varias ocasiones.

La verdad es que si el anterior tramo era fantástico este es incluso más bonito.

Comenzaremos a caminar por el sendero que utilizando puentes metálicos nos hará cruzar sobre el rio en varias ocasiones, pasaremos sobre grandes piedras siempre ayudándonos de alguna grapa puesta para tal efecto y sobre todo disfrutaremos de una estampa fantástica del rio que en unas ocasiones forma bonita pozas y en otras se escurre como puede entre grandes bloques de piedra procedentes sin duda de antiguos desprendimientos de las paredes que nos rodean.

Finalmente llegamos a una pasarela preciosa a la que accedemos por unos escalones y que nos permitirá avanzar sobre el rio a nuestra derecha y junto a una pequeña acequia excavada en la roca por nuestra izquierda, la verdad es que es un rincón digno de postal.

Finalmente llegamos al final de la pasarela y al bajar vemos como se abre el barranco y justo frente a nosotros aparece el Molino de La Tosca, que será el punto final de nuestra ruta.

Ahora tan solo nos queda regresar por donde hemos venido y volver a disfrutar del precioso recorrido.

Una ruta algo corta pero que se disfruta muchísimo y os recomendamos al 100%

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INFORMACIÓN DETALLADA DE LA RUTA EN NUESTRA WEB
Tenéis una descripción detallada, vídeos de la ruta y una completa galería de fotos en nuestra web --> https://3enruta.com/pasarelas-hoz-mala-aliaga-sendero-fluvial/

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