Pasarelas río Genal desde Benarrabá (Málaga)

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Esta ruta la iniciamos en el pueblo malagueño de Benarrabá, situado en el Valle del Genal.
Dista de Málaga capital unos 140 kms. aproximadamente y podemos acceder por la A-7/AP-7 hasta San Luis de Sabinillas o por la A-367 y la A-366 hasta Ronda, siguiendo por la A-397 y la A-369 hasta llegar al pueblo.

Una vez llegamos a Benarrabá mejor dejaremos el coche a las afueras pues tiene unas calles tan estrechas que yo creí que el coche se quedaría encajonado en una de ellas.

La ruta en sí comienza en el Mirador del Chorruelo, una pequeña plazita con vistas al Valle del Genal. Desde aquí tomaremos hacia la izquierda un camino de tierra que nos conducirá al sendero SL-A-215 Llanos del Rey dirección Jubrique.
Este sendero nos adentra en un bosque de alcornoques que se entremezclan con olivos, algarrobos y castaños. A su vez disfrutaremos durante el paseo de unas preciosas vistas del Valle del Genal y de algunos de los pueblos que cuelgan de sus laderas, como por ejemplo Algatocín, Jubrique, Genalguacil...

A 4’5 km. del comienzo de ruta nos adentramos en un bonito pinar por el cual caminaremos durante 1’5 km. aproximadamente. A continuación entramos en una propiedad privada que según decía el cartel prohibía el paso a cualquier vehículo no autorizado pero no decía nada de los senderistas (desde este punto nos quedaría 1 km. +/- para salir a la MA-8305 donde comienza el término municipal de Jubrique y donde nosotros haríamos el camino de vuelta por el río Genal).

Este último tramo del camino como digo es propiedad privada y el dueño, que estaba por allí recogiendo castañas, no fue de lo más amable y nos invitó a que diéramos la vuelta o que buscáramos un camino alternativo, pero bueno, con un poco de mano izquierda (o derecha, no sé) pudimos seguir adelante.

Por fin salimos a la MA-8305 y tomando a la derecha nos encontramos el restaurante Venta San Juan. Justo detrás de él comienza la ruta que nos hará volver a Benarrabá. Este camino siempre paralelo al río Genal, nos hará pasar por 3 o 4 pasarelas pegadas a la ladera del monte que nos evitará meternos en el río si no queremos mojarnos y por antiguas acequias en desuso adaptadas con cables para mayor seguridad.

Debo decir que esta segunda parte no me ha gustado nada porque casi toda la ribera del río está sucia de cañas, matorrales secos, árboles caídos, en fin….. para mi gusto muy abandonado y sí… muchas pasarelas pero todo el recorrido muy desangelado, y para colmo un casetón-jaula hecho de madera a modo de mirador que más feo no lo han podido hacer (el que lo haya diseñado se ha quedado descansando).

Bueno después de este, mi punto de vista, llegamos al Prado de la Escribana y pasaremos al lado contrario del río y desde aquí giraremos a la derecha y luego a la izquierda para tomar el sendero SL-A-216, un sendero ornitológico ideal para aquellas personas que quieran disfrutar del avistamiento de aves, con casetas para sentarse un rato y disfrutar del entorno.

Este sendero es el punto final de la ruta y nos quedaría unos 2’5 km. para llegar al pueblo pero tengo que decir que es la parte más dura del recorrido ya que tiene un gran desnivel, una buena cuesta que nos hará sudar de lo lindo.

El final de nuestro recorrido coincide con el fin del sendero SL-A-175 El Concoste-La Portá, donde se encuentra un antiguo molino que utilizaban para transformar las aceitunas en aceite (hay un gran panel informativo donde detallan el procedimiento utilizado para tal fin).

Solo nos queda atravesar el pueblo para llegar al punto de inicio de la ruta donde se encuentra nuestro coche aparcado pero vuelvo a recordar que es mejor dejar el coche a las afueras del pueblo ya que las calles son sumamente estrechas.
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