Peña Aguilera y Peña Coberteras, 909m. Ventas con Peña Aguilera, Toledo. 12/03/2022

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Sábado, 12 de Marzo de 2022
Peña Aguilera y Peña Coberteras, 909m. Ventas con Peña Aguilera, Toledo

Y aprovechando que en esta zona sur de la provincia de Toledo las predicciones no daban lluvia –a uno de los templarios no le gusta mojarse- el grupo decidió dar un paseo por este bello paraje de Ventas con Peña Aguilera cuya Carta Puebla de 1423, otorgada por Juan II, impulsa la unión de dos núcleos de población: Las Ventillas y la más antigua de Peña Aguilera.

Y hablando de las predicciones del tiempo es obligado recordar aquí al primer “hombre del tiempo” en España, el célebre Mariano Medina nacido precisamente en esta localidad en 1922. Ignoro si es hijo predilecto de su pueblo. Si aún no lo es, vaya desde aquí mi propuesta al consistorio para que el bueno de Mariano Medina tenga calle y homenaje. Un “hombre del tiempo” -aún insuperado- que para dar cada día los pronósticos del tiempo en TVE sólo necesitaba estudiar el clima con rigor y unos trozos de fieltro con un sol radiante.

El paseo se configura en torno al cerro Lirio, en el que se encuentra un molino restaurado con maquinaria similar a las del s.XV, con molienda de grano el día 26 de marzo de libre asistencia, y también la ermita en honor de Nuestra Señora del Águila cuya talla, de la Virgen del Águila, de tan sólo 7 cm de altura es la segunda más pequeña de España.
En el molino el grupo templario tuvo la suerte de encontrar a Vicente, su “molinero” actual, buen conocedor del pasado y presente de este enclave y que con especial generosidad y animada charla tuvo a bien contarnos estas y otras interesantísimas historias. Charla a la que se incorporó también Azucena, concejala de cultura de Ventas con Peña Aguilera, que en sus preparativos de la molienda del día 26 venía portando un par horcas de madera, pala, medio celemín, … utensilios propios de las tareas en torno a la molienda del grano.

Y como siempre que el grupo visita los Montes de Toledo también en esta ocasión tuvo la suerte de contemplar el vuelo de una pareja de águilas reales, ¡cómo no estando en Peña Aguilera!, además de numerosos ejemplares de buitres leonados y de milanos reales.
También en el camino pinos, encinas, almendros silvestres -ahora delicadamente en flor-, y distintos matorrales propios de esta vegetación mediterránea. Y como no, entre la riqueza de esta zona, los distintos yacimientos del granito del que en su día sirvió para construir, entre otras inmortales construcciones, El Alcázar de Toledo o la misma catedral que, junto a las de Burgos y León, conforma lo mejor del gótico español.

Paseo muy agradable, sin dificultad alguna y apto para toda la familia, que no necesita preparativos especiales, tan sólo buen ánimo para recrear la vista que, en un día claro, nos alcanzará a docenas de kilómetros: Montes de Toledo, Pico Noez, Cerro Cuerva, Pico de Mazarambroz, entre otros, así como numerosas poblaciones, Las Navillas, San Pablo de los Montes, Menasalvas, Galvez, Cuerva, Navahermosa, Pulgar, … y tantos otros.

Y como la caminata les despertó el apetito el grupo montó su mantel en la mesa del área recreativa en la que se echó en falta alguna mesa más y una fuente.


"Mire vuestra merced -respondió Sancho- que aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino molinos de viento, y lo que en ellos parecen brazos son las aspas, que, volteadas del viento, hacen andar la piedra del molino".
Don Quijote de la Mancha, Cervantes.