Peña Blanca (Sierra del Cuera)

Ascensión a Peña Blanca en la Sierra del Cuera, partiendo desde el pueblo llanisco del Mazucu.

El Mazucu (363 metros) - Grandiella (638 metros) - El Reburdiallu (862 metros) - Bola L'Escar (1.056 metros) - Peña Blanca ( 1.183 metros) - Para el descenso el mismo itinerario.

Por la autovía del Cantábrico (A-8) y después de la ensenada de San Antolín, salir hacia Posada de Llanes, para continuar hacia el sur por la AS-115 durante 7 kms. Luego por la izquierda tomar la pequeña carretera local LLN-7 que tras otros 6 kms nos lleva al collado del Mazucu. En la misma carretera y junto a la ermita del Santo ángel, existen algunas zonas de aparcamiento.

Desde la ermita que tiene una curiosa campana formada con los restos de un obús, recuerdo sin duda de las cruentas fechas de septiembre de 1.937, cruzamos El Mazucu en toda su extensión, para enlazar en dirección sur con el camino Concha Llau, que se dirige a los pastizales de Las Llanas.

Un par de cruces primero a la derecha y luego a la izquierda, nos llevan por buen camino a enlazar con un sendero en ocasiones empedrado, que asciende ya sin tregua por las cabañas de La Batuda y Las Llastrias hasta el "cantu" del Jou del Sabieyu.

Alcanzamos luego los muros de piedra de Grandiella, (los cierres de fincas tenían en su época que ser de piedra) y sin entrar en sus pastos, seguimos por la izquierda para acometer la dura pendiente de la vaguada del Jortigosu. Sin sendero definido, vamos ascendiendo con tendencia a la derecha para llegar a las cabañas del Cotayu. A su izquierda el abrevadero con su fuente, preceden a la braña del Reburdiellu que a modo de balcón hacia el norte, refleja el esplendor que antaño tuvo, en las ruinas de sus numerosas cabañas de robustos muros de piedra, ya carentes de techo.

Por la parte superior de las últimas edificaciones, un sendero nos lleva hacia la derecha a cruzar por el "cantu" de las Embías. A partir de él un sendero muy señalizado con jitos, nos dirige en linea recta hacia la Bola L'Escar divisoria de concejos (Llanes y Cabrales), siendo paso previo al caótico paisaje calizo creado por la erosión y que separa a nuestro objetivo la Peña Blanca, de las cumbres sureñas del Pico Tiedu (1.187 metros) y Cabeza Ubena (1.188 metros).

Sin entrar por ese intransitable terreno, seguimos a nuestra izquierda para acometer el ascenso final a la cumbre. Tenemos a la vista tres canalizos herbosos, el primero nos elevaría directo a la peña, nosotros tomamos el tercero que con menos pendiente, nos lleva en horizontal a unos 50 metros de la cima, alcanzándola luego sin dificultad salvando unos bloques calizos.

Una vieja cruz metálica con buzón señalizan esta cumbre, de triste recuerdo por haber sido testigo de la defensa por parte de un batallón de infantería de marina republicana que finalizó el 22 de septiembre de 1937 y con ello la caída del frente del Cuera. El ejército golpista apoyado por los aviones de la Legión Cóndor, acabó con esa heroica resistencia y con ello la esperanza del mando gubernamental, de poder mantener la linea del frente con la llegada del invierno.

Estamos en la zona occidental de la Sierra del Cuera, sus 30 kms de longitud alineados de este a oeste, son un mar de caliza kárstica por encima de los 1.000 metros sobre el nivel del mar. A unos 6 kms de la franja costera, su plataforma superior es un mosaico de lapiaces, dolinas, poljés, valles ciegos, simas y un sinfín de zonas kársticas en ocasiones imposibles de transitar. Su influencia sobre el oriente asturiano, es tan indiscutible como determinante, abarcando los concejos de Ribadesella, Llanes, Cabrales, Ribadedeva y las dos Peñamelleras. Su espacio geográfico, histórico y social, caminó durante los últimos tiempos por una economía de supervivencia basada en la ganadería, a un turismo emergente que llega atraído por la belleza de sus montañas, valles, playas y rica gastronomía.

Requiere esfuerzo llegar a las cumbres del Cuera, pero la recompensa es generosa. Vemos hacia el sur la majestuosidad alpina de los Picos de Europa, con los tres macizos a la vista, mientras al norte la verde franja costera asoma a los bravíos acantilados cantábricos. Como definieron Luis Aurelio González Prieto y Loli Palomares en su libro sobre la Sierra del Cuera: es el primer eslabón de los "Picos", la mejor definición se puede dar a esta bellísima sierra costera.

Por nuestros pasos de la ascensión, retornamos al pueblo del Mazucu dejando atrás la bonita y exigente cumbre de Peña Blanca.