Peña Santullán (pequeño coloso herido de muerte), por el Castro Prerronano y la Peña de Samano. Circular desde Santullán

Iniciamos la ruta en el parking público a la salida de la localidad de Santullán.
Salimos de la localidad y vamos hacia Samano, hacia el polígono industrial de Vallegon, rodeando la Peña por la derecha, tomamos una pista a la izquierda, junto al arroyo Tabernillas, que fue canalizado al crear el citado polígono.
Enseguida nos desviamos a nuestra izquierda por una pista que sube hacia la peña, en un rellano dejamos el camino y nos dirigimos hacia arriba para observar la parte más ancha de la muralla que protegía el castro.
Este castro prerromano parece que estaba amurallado y tenia varias puertas de acceso, destacando dos de ellas, la de Vallegon y la del Norte. Nos acercamos a las puertas pero sin llegar a ellas, el terreno no está sencillo y no aportan mucho al recorrido, sacamos foto y continuamos.
El recorrido trascurre por un paisaje kárstico, un poco complicado, por lo que no es conveniente hacerlo con lluvia. Hoy por momentos nos han amenazado cuatro gotas, pero ahí se ha quedado.
Empezamos a tomar altura por donde mejor nos parece, intentando pisar las zonas verdes que aparecen entre este inmenso pedregal. Llegamos al cordal cimero, sin camino claro, pero con cientos de trazas del ganado, progresamos hacia la cima.
Aunque no es difícil, conviene tener cuidado por lo afilado de algunas rocas.
Primero llegamos a la cima de la Peña de Samano, complicado llegar a la cima, que por otra parte no tiene ningún sello de identidad, retrocedemos un poco para bordearla y poder seguir el cordal cimero entre piedras, rocas y larga hierba que a trozos puede ser falsa. A ratos tenemos que echar mano para asegurarnos.
Enseguida nos situamos en el collado de acceso a la cima y observamos el avance de la cantera, casi llega ya hasta arriba, literalmente se están comiendo el monte, lo están devorando. Una pena!!
Para llegar a la cima seguimos alguno de los hitos y las flechas y marcas rojas y blancas muy despintadas ya, que nos señalan el camino.
Bordeamos por la izquierda y pasamos al lado norte, hay que trepar un poco y apoyar un poco las manos, y ahí tenemos la cima sin más problemas. En la cima un buzón metálico roñoso y envejecido, a destacar sus magnificas vistas 360°, el Cantábrico, Castro Urdiales, Santullán, Samano, y todos los montes de alrededor: Allen, Ventoso, Pico la Cruz, Peña Ontañes, ....
La vuelta la hacemos por la pista que baja por la trasera de la cantera, hoy sin problema por ser domingo y no trabajar. Enseguida salimos al collado que separa a la Peña de Santullan de la Peña Otañes y por la pista de la izquierda hacia abajo. Vamos por la pista de las instalaciones de la cantera un buen tramo. Esa pista nos llevaría hasta la cementera y demás instalaciones de la cantera, así que en un punto salimos de ella por un hueco en la alambrada y seguimos por la pista de bajada de las peñas Ontañes y Pico de la Cruz. Llegamos al pueblo, y continuamos hasta llegar al punto de inicio.

Información de Mendikat sobre la PEÑA DE SANTULLÁN, (476 m):

Esta escarpada montaña atacada por las canteras se sitúa al W de Otañes (100 m), por lo que lleva el sobrenombre de Peña de Otañes, bien visible desde la bahía de Castro Urdiales. Sin embargo, es Santullán (82 m) el pueblo que domina su escarpada cara N,…, escarpada a fuerza bruta. Ambas poblaciones son bañadas por el río Mioño que desciende del Alto de las Muñecas (372 m) para desembocar en el mar Cantábrico en Mioño (18 m). Señalar que en la cima de la Peña de Santullán (470 m) se sitúa un gran castro rodeado por una muralla de la Edad de Hierro.
La cantera de Santullán lleva desde los años 60 del pasado siglo extrayendo diferentes tipos de áridos: gravas, gravillas y arenas muy ricas en carbonato cálcico, dado que el sustrato rocoso explotado es caliza. Las vertientes afectadas son la cara N, cuya fachada mira al N, siendo bien visible desde la autovía del Cantábrico, así como la E y SE. Las facetas NW y SW son , por tanto, las destinadas a las rutas de montaña. Evidentemente que la explotación industrial resta interés y aliciente a esta modesta altura, que por su proximidad a Bizkaia se ha incluido tradicionalmente en los catálogos de cumbres para los concursos de ascensiones desde sus inicios. Hay que indicar que hasta que se iniciaron los trabajos de extracción, no había impacto en la montaña. Así en 1967, las dimensiones del área afectada era muy pequeña en comparación con la actual.
El valle de Sámano toma su nombre del pueblo que se cobija, también, bajo esta peña. Administrativamente se encuadra, hoy en día, en el término municipal de Castro Urdiales. Son varias las cumbres que lo jalonan. Por el W el Cerredo (646 m) impone su supremacía a corta distancia de la línea de costa. Por el S es la Peña Santullán o de Otañes (470 m) la que domina el paisaje, si bien esta es un promontorio destacable de la sierra que se sitúa más al S y que alcanza su punto máximo en el Ventoso (726 m), máxima elevación del término. Finalmente, por levante cierra el panorama el monte Campoezquerra (388 m), quebrantado por las antiguas minas, y a corta distancia también de la costa. Además entre Castro Urdiales y Mioño encontramos El Cueto (196 m). Muy cerca de Samano se hallan las Cuevas de Hoz o de Juan Gómez, así denominadas en honor a su descubridor (1960). Cuenta con grabados de cabezas humanas. En la misma zona se halla la cueva de Lastrilla.

Información complementaria sobre el Castro de la Peña de Sámano (INFORMACION DE REGIO CANTABRORUM):

Descubierto por Félix González Cuadra en 1972, el castro de la Peña de Sámano (Castro Urdiales) es uno de los poblamientos prerromanos más imponentes de la costa oriental cántabra. Esta increíble atalaya natural albergo hace siglos un recinto castreño de aproximadamente 10 hectáreas, el cual se cree que fue poblado por el pueblo de los autrigones. Esta tribu prerromana fue situada por Ptolomeo entre los ríos Asón (Cantabria) y Nervión (País Vasco), indicando que su territorio limitaba con el de los caristos por el este y los cántabros por el oeste. Otros historiadores como Plinio el viejo citaba "entre las diez ciudades de los autrigones" Tritum (Monasterio de Rodilla) y Virovesca (Briviesca), ambas en Burgos, lo que nos da a entender el amplio territorio que ocupaba esta tribu de norte a sur entre los territorios de cántabros y caristos.
Volviendo al castro en sí, combina a la perfección la fortificación mediante grandes murallas de más de 2 metros de alto con el aprovechamiento de los accidentes naturales de la peña. En lo alto del mismo han podido distinguirse vestigios de una pequeña organización urbana, observándose resto de edificaciones de planta rectangular (con las esquinas redondeadas eso sí) y pequeñas estructuras de planta ovalada. Destacar que justo en el centro del área de hábitat del poblado se ubica la conocida como Cueva de Ziguste. En las excavaciones y posteriores investigaciones realizadas por el equipo de R. Bohigas y por M. Unzueta se menciona también la posible existencia de una organización estructural del poblado, atisbándose cierto "urbanismo" en la ejecución y construcción del mismo por parte de sus moradores. Presenta dos accesos principales. Uno denominado la "Puerta de Sangaza" (al norte) y otro denominado como "Puerta del Vallegón" (al oeste), ambas combinando ensanchamientos de muralla y pasillos estrechos para regular y controlar el paso al interior del recinto.
Respecto a su cronología, gracias a las investigaciones realizadas por el equipo de R. Bohigas y por M. Unzueta, se cree que pudo abarcar un abanico temporal de existencia continuada de alrededor de 800 años. Esto quiere decir que la ocupación del castro de la Peña de Sámano se extiende desde finales de la Edad del Bronce, toda la Edad del Hierro y una pequeña convivencia en la época romana. Todas estas conclusiones se apoyan firmemente en los materiales allí encontrados: puntas de lanza, un hacha, cerámicas a mano, dardos, una fíbula y una fusayola. Este objeto es posiblemente el objeto relacionado con la actividad textil que mayor visibilidad tiene en los registros arqueológicos de todas las épocas. Aparece desde la Prehistoria Reciente hasta la Edad Media, pudiendo estar fabricada de piedra, hueso, metal, arcilla, etc. Nadie mejor que la gente del Proyecto Mauranus para daros una visión mucho más profesional de la definición de fusayola.
Atendiendo a todos los aspectos relacionados con el yacimiento, bien sea en cuanto a su ubicación o bien en cuanto a los materiales allí encontrados, se ha propuesto identificar el lugar con el Oppidum (S)Amanorum que correspondería a partir de la mención de Plinio (Naturalis Historia IV,1,10) con la gentilidad de los (S)amani, ligados estos a Portus Amanum. No olvidemos el nexo de este antiguo puerto prerromano con el origen de la colonia de Flaviobriga (Castro Urdiales) a escasos kilómetros del centro del castro.