Peñaparda - Finca Perosín - Baldio de Peñaparda
near Peñaparda, Castilla y León (España)
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Trail photos
Itinerary description
Iniciamos nuestro recorrido en la Plaza Mayor de Peñaparda, encaminándonos hacia la fuente romana y siguiendo por el camino de Pañaparda a la Finca Perosín que atraviesa un magnífico robledal que nos estuvo protegiendo del sol durante los primeros cinco kilómetros.
En dicho camino, tuvimos que abrir/cerrar un par de porteras, encontrándonos a la llegada a la Finca Perosín con un gran rebaño de vacas.
Luego, tuvimos que tomar la CL 526 durante un kilómetros, hasta la entrada al Baldío de Peñaparda, donde el camino volvió a zigzaguear entre robles. En el machón derecho de la portera, aún se puede adivinar las marcas de una antigua ruta, hoy día abandonada: no volvimos a ver ninguna más.
El camino nos llevó hasta un cortafuegos, o, al menos, eso nos pareció, que circunvala el Baldío de Peñaparda por terrenos despejados de vegetación pero de piedra suelta que nos dificultaba el avance, sin mencionar las cuestas y bajadas pronunciadas obedeciendo a la altimetría del terreno. Total, 2 kilómetros de terreno abrupto.
Dejando el cortafuegos, seguimos por el camino del Canchal de las Cruces para volver al cortafuegos después de 500 metros. Nos esperan otros 2,5 km de cortafuego hasta llegar al Camino de Peñaparda a Gata y volver a cruzar la CL 526 para adentrarnos en M.U.P 123, como tal monte de utilidad pública ganado vacuno suelto por lo que hay que ser prudentes.
Este último tramo, una vez vadeado el río de Perosín por un pontón que en épocas de lluvia es imposible atravesar, nos lleva a nuestro punto de salida.
Los que lleguen a Peñaparda y aún tengan ganas de subir hasta el teso de la Cruz podrán disfrutar de una buena panorámica de la Sierra de Gata.
En dicho camino, tuvimos que abrir/cerrar un par de porteras, encontrándonos a la llegada a la Finca Perosín con un gran rebaño de vacas.
Luego, tuvimos que tomar la CL 526 durante un kilómetros, hasta la entrada al Baldío de Peñaparda, donde el camino volvió a zigzaguear entre robles. En el machón derecho de la portera, aún se puede adivinar las marcas de una antigua ruta, hoy día abandonada: no volvimos a ver ninguna más.
El camino nos llevó hasta un cortafuegos, o, al menos, eso nos pareció, que circunvala el Baldío de Peñaparda por terrenos despejados de vegetación pero de piedra suelta que nos dificultaba el avance, sin mencionar las cuestas y bajadas pronunciadas obedeciendo a la altimetría del terreno. Total, 2 kilómetros de terreno abrupto.
Dejando el cortafuegos, seguimos por el camino del Canchal de las Cruces para volver al cortafuegos después de 500 metros. Nos esperan otros 2,5 km de cortafuego hasta llegar al Camino de Peñaparda a Gata y volver a cruzar la CL 526 para adentrarnos en M.U.P 123, como tal monte de utilidad pública ganado vacuno suelto por lo que hay que ser prudentes.
Este último tramo, una vez vadeado el río de Perosín por un pontón que en épocas de lluvia es imposible atravesar, nos lleva a nuestro punto de salida.
Los que lleguen a Peñaparda y aún tengan ganas de subir hasta el teso de la Cruz podrán disfrutar de una buena panorámica de la Sierra de Gata.
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