Pequeño Ciudad Encantada de Tamajon. Cuevas y Ermita de los Enebrales.

La Ciudad Encantada de Tamajón es un paraje natural de formaciones rocosas kársticas, de calcáreas y calizas, formadas a lo largo de miles de años. Se localiza en el término municipal de Tamajón (Guadalajara, España), en una amplia zona de sabinares de la parte meridional de la sierra del Ocejón. Al norte del paraje se erige la ermita de los Enebrales.




La ruta es circular. La he serrado un poco tarde en coche pasando unos metros.

En algunos sitios no es fácil de seguir porque pasa por senderos mal visibles y entre rocas y cuevas .
Pero con GPS nunca se pierde.

Comenzamos la ruta serca de iglesia de Nuestra Señora de la Asuncion

Salimos por su parte izquierda junto a carretera.
Unimos al sendero GR 60.
Cruzamos carretera.
Y ahora nos toca ir un tramo campo a traves.
Pasamos serca de colmenas de abejas y continuamos dentro de un bosque.

Luego tomamos un sendero que nos lleva a Ciudad Encantada.

Pasamos por diferentes formaciónes rocosas . Entramos dentro de pequeñas cuevas y seguimos.

Al poco pasar ya estamos ante la ermita de Enebrales.

Fue construido en el siglo XVI en estilo románico y reformado en el siglo XVIII siguiendo el estilo renacentista.

En su interior se venera la imagen de la Virgen de Nuestra Señora de los Enebrales, conocida como La Serrana, de gran devoción en toda la comarca.

Según la leyenda:

En una ocasión en que el cura de Tamajón iba con su mula al pueblo vecino de El Vado a decir misa, le atacó una gran serpiente, y al encomendarse a la Virgen, esta se le apareció sobre un enebro apaciguándola con su resplandor.

La leyenda fue representada en un fresco del s XVIII en el lado del evangelio de la nave del templo, frente a la puerta de entrada; actualmente está muy deteriorada. Una buena descripción del entorno del templo y de la leyenda la ha realizado Jesús García Perdices, en su Reina de los Poetas dedicado a la Virgen de los Enebrales.


Abierta pero sin ninguna persona. Dejamos dinero y ponemos una vela.

Observamos la ermita alrededor y salimos detrás de ella para bajar a Arroyo de Valdelapuerta.

Seguimos por cause del arroyo. Estaba seco. No buscamos sendero.

En un momento subimos a la izquierda para ver la Cueva del Arroyo. Merece la pena visitar la.
Es una belleza escondida dentro de encinar.
Regresamos y seguimos.
Nos chocamos con una charca de agua. En verano se puede cruzar la y seguir. Pero ahora con cuidado subimos arriba para pasar la a la izquierda.

Pasando unos metros dejamos arroyo a lado derecha subiendo hasta una pista ancha y a la derecha hasta un cruce de los caminos y otra vez a la derecha.

Llegamos de nuevo hasta ermita y cruzamos carretera.

Vamos por un camino que nos lleva a otra parte de Ciudad Encantada.
Por allí descansamos.
Pasamos por varias cuevas y disfrutamos mucho de este sitio.
Luego regresamos para seguir nuestro camino.

Ahora un poco de bajada campo a través.
Cruzamos Arroyo de las Damas.

Y volvemos a seguir GR 60.

Desde allí regresamos a Tamajon y luego a inicio de la ruta.