Pereruela-Abelon

Lugar de salida: Pereruela (Zamora).
Lugar de llegada: Abelón (Zamora).
Ruta: Pereruela, Abelón, Mirador sobre el Duero y Abelón.
Distancia a recorrer: 24 kilómetros (aprox).
Desnivel de subida: 223,72 metros (aprox).
Desnivel de bajada: 259,03 metros (aprox).
Duración: 7 horas (aprox), incluyendo paradas.
Camino: senderos y pistas.
Dificultad: baja, exceptuando la visita al molino, donde encontramos el desnivel antes señalado.

DESCRIPCIÓN
La totalidad del recorrido se hace por lo que fue la calzada romana de Miranda, o mirandesa, que unía Zamora con Miranda do Douro (55 kms.) a lo largo de la comarca sayaguesa.
Veremos el típico paisaje de esta zona, poblado de encinas centenarias, fresnos, prados y cortinas, con estupendos pastizales que son aprovechados por la ganadería vacuna.
Los afloramientos rocosos graníticos y las paredes de piedra son otros de los componente que nos acompañarán durante toda la etapa.
A la salida de la localidad de Pereruela se cruza el regato de los Pozarones y, entre fincas dedicadas a la agricultura de secano y pastizales, se comienza a hacer el camino, dando vista -al frente- a las dehesas de encina que en breve dominarán el paisaje.
A la altura del Puente de las Urrietas, fabricado en piedra sobre el Arroyo o ribera de Sobradillo, cambia el paisaje y aparecen la dehesas de encina, los afloramientos rocosos y la orografía del terreno es más acusada.


El recorrido pasa cerca de la población de Arcillo, una claro ejemplo de aldea de la comarca de Sayago, muy integrado dentro del bosque de encina.
Tras subir una pequeña loma se llega al bonito puente medieval de la Albañeza, y en el descenso se pasa junto a una zona donde las encinas han sido olivadas, buscando una mayor producción tanto de pasto como de fruto. A continuación atravesaremos por un verdadero túnel vegetal formado por encinas centenarias, ofreciendo un agradable paseo hasta las Casas de Albañeza, una granja que cuenta con su propia ermita.
El camino continúa por la dehesa de Albañeza hasta encontrarnos con una llamativa cruz que nos indica que hemos llegado a Abelón.
Nos desviaremos, antes de entrar en el pueblo, para visitar las ruinas de un singular molino el cual utilizaba las aguas del Arroyo de la Cunca que se acumulaban en un gran pozo. Desde aquí disfrutaremos de una hermosa panorámica del Río Duero; y, si ha llovido en abundancia, veremos la cascada por donde caen las aguas del Río Cunca al todopoderoso Duero.

realizada con Anda ya Salamanca el 8 de noviembre de 2015