Pico Ahíllos

Fácil ascenso al Ahíllos que realizamos en familia. La ruta es apta para todos los públicos hasta el collado de la antecima. El ataque a la cumbre es sencillo, pero hay que tener precaución en un par de pasos donde hay que estar pendientes de los niños, guiándolos un poco o dándoles la mano si fuera necesario.

Empezamos a los pies de la carretera, por una pista ancha donde puede dejarse el coche sin problema. La pista es de buen piso y va ascendiendo con desnivel asequible. Pronto llegamos a un pinar que nos da algo de sombra y cuyo nombre te hace imaginar que en invierno tiene que ser bastante frío: las Umbrías del Ahíllos. Empiezan a aparecer recortes a la pista, algunos de los cuales seguimos, aunque no sería necesario. De hecho, no es necesario abandonar la pista hasta la torre del Infoca y aquí se enlazaría con el sendero semipavimentado hasta el collado de la antecima. Durante el ascenso hay preciosas vistas a Sierra Nevada, Mágina, Sierra Sur, entre otras.

No obstante, a media subida nosotros elegimos un sendero más montañero, de un piso más irregular, con el objetivo de darle un poco de gracia a la ruta y de ir acostumbrando a los pequeños a la montaña. El sendero, que está señalizado y es de difícil pérdida, enlaza después de poco más de un km con el semipavimentado antes mencionado. Digo semipavimentado porque lo estuvo, pero está muy deteriorado y las piedras que se usaron estorban más que ayudan. En la antecima, aparece en el horizonte sur la Sierra Horconera.

Dejamos las mochilas y los bastones para atacar la cumbre más ligeros y con las manos libres por si fuera necesario, pero resultó más sencillo de lo esperado. Después de las fotos de rigor en el vértice, volvemos a la antecima donde comemos resguardados del molesto viento del sur que había y emprendemos el regreso, en la que casi no abandonamos la pista hasta llegar al punto de inicio y final de esta entretenida y fácil ruta de ascenso al Ahíllos, que tiene el honor de ser la 100ª cima peninsular en cuanto a prominencia.