Pico Bodón (1958 m.) desde Llamazares

Punto de partida: Llamazares.
Espacio protegido: Reserva de la Biosfera Los Argüellos.
Época recomendada: Todo el año excepto con nieve.
Elementos de interés: Hayedo y vistas desde la cima.
Tipo de camino: Pista de tierra y campo a través.
Servicios: Llamazares cuenta con un bar.

Descripción del itinerario.

La ascensión comienza en el caño de la localidad de Llamazares, la cual estaba en fiestas y presentaba un gran aspecto. Cruzando el río Labias encontraremos una senda ascendente que se dirige hacia Redilluera, último pueblo del valle del río Labias (figura 1).

Los primeros 800 metros de la pista forestal serán bastante duros (figura 2) siempre ascendiendo hasta llegar a una bifurcación donde deberemos elegir el camino de la izquierda. Poco a poco nos iremos perfilando en dirección al pico Bodón, el cual veremos cada vez más de cerca (figura 3).

La pista forestal finaliza en el momento en que dan comienzo su aparición las hayas. La entrada al hayedo no está señalizada por lo que se tiene que realizar por donde buenamente se pueda (figura 4). Yo recomiendo seguir el trayecto que hice de ida ya que fue mejor que el de la vuelta. Este tramo es el más tedioso debido a la cantidad de hojas que había en el suelo donde era prácticamente imposible no resbalarse.

Tras salir del hayedo y ver algo de nuevo, da comienzo una parte diferente, la ascensión más pura por así decirlo. Tendremos que perfilarnos hacia la izquierda por la canal (figuras 5 y 6). Esta parte será la de mayor dureza de la ruta pues subiremos poco pero acumulando mucho desnivel (figura 7). Lo mejor que podemos hacer en este tramo es ascender haciendo "eses" por donde indican los mojones.

En la parte izquierda del macizo calizo nos sorprende una amplia cavidad, la llamada "Cueva de las Luces". Este nombre no es casual, pues indica las horas del día en los que los rayos solares se cuelan por un agujero que existe en su interior (figuras 8 y 9).

Dejamos atrás la cueva para ascender los últimos 150 metros por la cara sur del pico (figura 10). Aunque desde la cara norte parezca una subida casi imposible, por la cara sur es muy sencilla sin tener que usar las manos.

Desde sus 1958 metros (figuras 11 y 12) se pueden contemplar sus dominios más cercanos, mostrados en las figuras 13, 14 y 15. El descenso lo efectuaremos por el mismo camino teniendo una perfecta panorámica de su cordal donde destaca el Cueto Cabañas (figura 16). En el mismo cordal en un recodo comimos (figura 17).

La bajada se realiza por el mismo camino, dejándonos unas vistas excepcionales de la Cuevona y el pico Bodón (figura 18). La internada por el hayedo la decidimos realizar por donde finaliza un pequeño canchal donde parecía que estaba señalizado el descenso a través de él por unas pinturas rojas pero era falsa alarma (figura 19). El descenso por este lado fue aún peor que el de la ida. Encontrar el camino final de vuelta que nos enlaza con la pista forestal es todo un alivio, evitando brezos, escobas y ortigas (figura 20).

Impresiones.

La cima del pico Bodón es una de las más conocidas del valle de Lugueros si no la que más. Aunque no llegue a los 2000 metros, su elevada posición, por encima de otras cimas vecinas, le otorga una vista 360º fabulosa para conocer desde las alturas el curso alto del Curueño.