Picu L’Oubiu y Picu Peláu (Sierra de Gradura)

Recorrido circular por la Sierra de Gradura, partiendo de la ermita de Santa Ana en los puertos de Marabio, ascendiendo a las cumbres del Picu L’Oubiu y Pico Peláu, para descender luego por las lagunas de Foslayegua y Tambaisna, a enlazar con el Camín Real Francés hasta la carretera, a la altura de la antigua Casa Don Pablo. Luego restan 2 kms para volver en suave ascenso, hasta el emplazamiento de la ermita.

Ermita de Santa Ana (998 metros) - Collado Cantu Pandiella (1.102 metros) - Collado Caduru (1.105 metros) - Picu L'Oubiu (1.363 metros) - Collado Grandizu (1.216 metros) - Picu Peláu (1.355 metros) - Laguna Foslayegua (1.293 metros) - Vega Tórzanu (1.275 metros) - Laguna Tambaisna (1.171 metros) - Collado Tambaisna (1.226 metros) - Casa Don Pablo (970 metros) - Ermita de Santa Ana (998 metros).

Desde Oviedo y por la A-63, salir hacia Trubia para continuar por la AS-228 en dirección al concejo de Teverga. A la entrada de San Martín, en Entrago, seguir un desvío a la derecha que nos lleva a los Puertos de Marabio. Al culminar la subida y en el collado del puerto se encuentra la ermia de Santa Ana, idílico emplazamiento entre los pastizales del puerto y los valles de Teverga.

Desde el entorno del collado, comienza nuestro recorrido siguiendo una pista que a la derecha, desciende ligeramente hacia el Sureste. A unos 400 metros la abandonamos, para tomar un sendero que por la izquierda comienza a a ascender hacia el collado Cantu Pandiella o collado La Sala. La senda pronto se abre a un trazado camino, que por terreno calizo se eleva al bonito collado que da paso a la vega y laguna de Pandiella, puerto natural de Bustiellu.

Dejamos a nuestra espalda la cónica figura de Peña La Sala (1.228 metros), para bordear el Picu Cuervu (1.181 metros) hasta el cercano collado Caduru o Cunquín por un sendero jitado, en el que se mantiene la altura que llevamos. Desde el collado, debemos salvar 260 metros de desnivel para alcanzar nuestra primera cumbre, el Pico L'Oubiu. La sostenida ascensión está muy señalizada, con constantes jitos que nos dejan en la cumbre, de lo que es la cota mas elevada de la Sierra de Gradura.

Un montículo de piedras, preside esta alargada montaña emplazada en el centro de la Sierra. Un bote plástico sirve de alojamiento para dejar la tarjeta de cumbre, donde existía una cruz con buzón ya desaparecido, como es tradicional por la "campaña" anticruces ya muy extendida en nuestras montañas. Es balcón espectacular sobre los Puertos de Marabio, también de Peña Rueda, de la cercana Sierra de Sobia, de Los Fontanes y de la Ubiña, de las cumbres de Somiedo, de la Sierra de Peña Manteca y del Aramo.

Siguiendo la línea cimera descendemos hacia el Norte, bordeando la Peña Atambu (1.337 metros) para llegar al collado Grandizu, punto de inflexión para ascender al Picu Peláu. Es también collado de paso hacia los Fondiles de Teixeira, bonita majada en la que abundan los tejos, abedules, acebos y espineras. Antes de alcanzar el collado, vamos viendo como una traza verde entre la caliza, muy marcada y en diagonal, es el mejor camino de ascenso hacia la cumbre, son 140 metros de desnivel que se salvan sin dificultad.

Un jito señaliza la amplia cimera del Picu Peláu, también llamado Cualmayor por las gentes de Bandujo. Como muchas de las cumbres de la Sierra, su altitud supera los 1.300 metros, lo que es una constante desde el Caldoveiro hasta el L'Oubiu. Desde la cumbre vemos hacia el norte la Laguna Foslayegua; es nuestro siguiente objetivo y hacia èl vamos, descendiendo por un pequeño tramo de bosque para bordear luego por trochas de ganado, la parte superior de los Fondiles Negros.

Encontramos la pequeña Laguna de Foslayegua o Fresdeyegua después de un bonito bosque de acebos y tejos. Se encuentra a los pies del Pico Tórzanu (1.356 metros) rodeada de un tapizado y verde pastizal. Seguimos descendiendo luego hacia el Noroeste para alcanzar otra bonita postal en la Majada de Tórzanu, sus numerosas cabañas ya en ruinas reflejan el esplendor de antaño, sobre las que destaca el singular Corro La Señora, lo que fue un circular teito de piedra, se mantiene aún intacto aunque sin techumbre. La foto con su muro de piedra y los tres acebos que lo escoltan es tan ineludible como mágica.

Al oeste de la majada, una brecha entre ruinas de cabañas, nos conduce a la vaguada por la que descendemos hacia la Majada de Tambaisna con su laguna. Antes de entrar en ella, enlazamos con el GR-109 que procedente de Villanueva de Santo Adriano por Cueva Llagar, llega hasta Villamayor en la vertiente del río Taja. Es su etapa 16 y cruza también los Puertos de Marabio, por lo que se conoce como el Camín Francés del Camino Real de la Mesa.

La Majada de Tambaisna, con el cono calizo del Pico Caldoveiro (1.354 metros) por encima, es otro de los regalos visuales de la ruta. Pasamos junto a la laguna, cercada y rodeada de arboleda, siguiendo las marcas del GR para ascender al collado, mientras dejamos a nuestra izquierda los pozos kársticos por donde se filtran las nieves invernales.

Desde el Collado Tambaisna, damos vista a los Puertos de Marabio hacia donde nos dirigimos, siguiendo la muy bonita traza del Camino Real que cruza por las cabañas de Cubielles o Cubriellos (1.066 metros), antes de enlazar con la carretera que hacia el Norte se dirige al concejo de Yernes y Tameza. Nuestro recorrido es al contrario mientras dejamos a nuestra derecha la Casa Don Pablo (Casaompablo), enorme caserón ya en ruinas y que fue antaño una venta.

Después de unos 600 metros de asfalto, nos desviamos a la derecha a la altura de las cuadras del Cabríu y final del largo valle de Cuacartel. El camino va bordeando todo el fondo de los puertos, mientras vamos observando los pozos y cuevas, en los que se sumergen las numerosas riegas y valles ciegos, de los amplios pastizales de estos Puertos de Marabio, declarado Monumento Natural el 19 de Abril de 2.002 y que está incluido dentro del Parque Natural de Las Ubiñas-La Mesa. Aunque existen miles de cavidades, es de destacar el llamado Sistema Vegalonga que tiene 5.900 metros de longitud.

Cuando alcanzamos las cabañas de Piedralonga, nos incorporamos de nuevo a la carretera para recorrer 1 km por ella. Es lo que resta para volver junto a la ermita de Santa Ana, principio y final de una recomendable ruta de media montaña.



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