Piedra de Los Valientes (El Bueno-Arico)

Iniciamos nuestra ruta en las cercanías de la Finca el Helecho.

Esta finca está situada en el caserío de El Bueno, dentro del pinar de Arico. Es propiedad del Cabildo Insular de Tenerife y los distintos equipamientos que presenta están construidos respetando el entorno, desarrollando actividades dirigidas fundamentalmente a la recuperación de especies ganaderas autóctonas como el cochino negro y la cabra canaria entre otras, y una zona reservada a la agricultura característica de la isla, en la que es posible conocer cultivos tradicionales como la viña y de las distintas variedades de papas.

Comenzamos ascendiendo por la pista y a algo más de un km. pasamos junto a un horno de cal, el Horno El Buey.

En él se trataban las piedras de carbonato cálcico, que se formaban del agua que corría por las tarjeas proveniente de las galerías de la zona, para obtener la cal.

Continuamos por la pista, pasamos por las Huertas del Arco y la abandonamos para acercarnos a la Galería La Sorpresa en el Barranco de Ifonse.

Regresamos a la pista para más adelante seguir por un sendero poco claro entre el pinar, que se pierde con facilidad, teniendo algún que otro mojón como referencia. A poco más de 500 m. encontramos La Piedra de los Valientes, se dice que de unos 150 kg. de peso.

El levantamiento de piedra era una prueba de fuerza con la que se medían nuestros antepasados y se realizaba con la piedra tal y como se encontraba en la naturaleza.

Fray Alonso de Espinosa en 1594 hizo esta referencia:

«Eran hombres de tanta ligereza que se cuentan algunas cosas de ellos casi increíbles. Una piedra guijarro está en esta isla, en el término de Arico, maciza, mayor que una grande perulera, la cual vide yo y es común plática entre los naturales que con aquella piedra iban sus antepasados a probar sus fuerzas, y que la levantaban con las manos y la echaban sobre la cabeza a las espaldas con facilidad; y ahora no hay hombre, por membruno que sea, que la pueda levantar ni dar viento».

Para la vuelta seguimos un sendero tampoco muy claro, que terminamos perdiendo, descendiendo entonces hasta la pista por un barranquillo sin mayor dificultad.

Ya solo nos queda seguir la pista hasta nuestro punto de partida.