Pisándole los Talones a San Beturian

El Monasterio de San Victorián o Beturian es todo un referente en la historia de la comarca de Sobrarbe. Según algunos expertos, está considerado como el más antiguo de España ya que su origen lo situan en la época visigoda, en el siglo VI.
La mayor parte de las construcciones conservadas datan del siglo XVI. Recientemente ha sido objeto de diferentes restauraciones.
Además de este monasterio hay una serie de ermitas en diferentes lugares a la sombra de la Peña Montañesa que visitaremos en este recorrido.
Partimos junto al panel de Los Molinos y tomamos la Colada a la Fueva entre muros de piedra.
Alcanzamos el PR HU 43 que viene de Ainsa y nos guiará hasta la Espelunga.
Poco después de cruzar la carretera visitamos el restaurado Molino de Casa Ferrero junto al Barranco del Trucho.
Tras atravesar un tramo de las altamente deleznables margas el sendero se introduce en un bosque de robles en una húmeda vaguada.
Así sin darnos cuenta llegamos al pequeño núcleo de la Muera.
Ahora toca remontar un tramo por las acarcavadas margas en fuerte pendiente hasta salir al camino por donde discirre el PR HU 139 ya cerca del monasterio.
Si nuestro resuello lo permite podremos apreciar en esta subida algunos enebros de cierto porte.
A partir de San Victorián haremos un recorrido de ida y vuelta hasta la enriscada ermita de la Espelunga.
La senda va rodeando el Tozal del Castellar hasta la ermita de San Antón.
Seguimos en suave pendiente alternando algunas zonas despejadas con el espeso carrascal.
Cruzamos un barranco antes de pasar junto a la emblemática piedra del Santo.
El sendero empieza a serpentear entre las centenarias carrascas hasta el paredón del Corral de los Caballos.
El último tramo antes de la Espelunga es por un sendero sobre la roca con bastante pendiente pero las vistas y el entorno dulcifican cualquier dificultad.
Tras unos minutos de reposo en tan mágico lugar empezamos a bajar hacia el Monasterio.
Vamos especulando si el gran tamaño de las carrascas de este rincón se debe a que nunca se han carboneado.
De vuelta en San Vitorian seguimos el PR HU 139 hacia Oncins. Vamos por la tranquila carretera, pasamos por la Ermita de Nuestra Señora del Pilar y dejamos junto a un parking la senda de subida a la Peña Montañesa.
También desde este punto está la bajada a los Molinos por la ruta 7,pasando por El Plano.
En Oncins visitamos su modesta ermita, sin ningún tipo de señal o información.
Atravesamos la pequeña aldea por una calleja empedrada que recorta la carretera, y una vez atravesada esta, tomamos un camino que empieza a bajar por el carrascal hacia una granja.
El camino se introduce en la explotación ganadera y aunque se puede entrar no se puede salir por el otro lado. Hay que rodear monte a través el cercado para retomar el camino.
Más tarde el camino parece acabarse en un campo también vallado. Aunque no sea evidente junto a la valla se inicia una tenue senda con algunos hitos.
Nosotros hemos tardado en encontrarla y hemos divagado un poco por las cárcavas.
La senda baja por un bosque adehesado de robles llevando el barranco a la izquierda.
Los hitos nos llevan al fondo del barranco que cruzamos por un endeble puente y seguimos la senda hasta salir a la carretera a la entrada a los Molinos.
El recorrido se ha hecho por caminos y sendas salvo el pequeño tramo monte a través para rodear la granja bajo Oncins.
Además de las verticales paredes de la Peña otro aspecto de la zona que impresiona bastante es el efecto erosivo del agua sobre las margas que deja zonas de profundas cárcavas, torrenteras o "bad lands".
Tras cerrar el track nos acercamos a la iglesia de los Molinos o ermita de San Pablo.