PLAYA DE BUJAREN -GARAFIA- ISLA DE LA PALMA - CANARIAS

Llegue a La Palma en busca de rincones escondidos. Busque aquí y allá, y mi curiosidad me llevo a este lugar sin mayor expectativa……. pero cuando me asome al Mirador de El Serradero ………..
uuuuaaaauuuuhh. ………. Mi respiración se ralentizó y no podía dejar de mirar esta maravilla de la naturaleza, por un momento pensé que estaba en Australia, en las Islas Griegas o en un destino exótico de Asía, pero lo tenemos aquí cerquita…. en la Isla Bonita de La Palma.
El sendero solo es recomendable para expertos, porque durante el estrecho y peligroso trayecto tu sombra es un enorme precipicio….. , cuando miras de reojo hacia arriba sabes que si logras pasar, es porque el acantilado te ha dado permiso y también su bendición, allí los desprendimientos son frecuentes debido a lo inestable del enorme risco.
Ya iniciado el camino sinuoso, el tono tricolor : rojizo, amarillo y negro, de las paredes verticales existentes junto al sendero, te hacen olvidar el peligro que navega junto a tus zapatos , quieres acercar tu mano para acariciar estos brotes pétreos de colores , esta tierra teńida en capas lineales a modo de bandera y comprobar que son reales y no un espectro emocional.
Al llegar abajo , tus pies piden lanzar al aire las zapatillas de inmediato, quieres sentir en tu piel la arena negra recién lavada por la marea.
Nada más descalzarte, al instante una enorme mole de piedra, plantada a pocos metros de la playa absorbe de inmediato tu mirada, allí está el majestuoso Roque de Las Tabaibas, guardando la playa y enamorando al visitante con su gran cueva a modo de túnel en su base, donde los surfistas esperan esa “ola de izquierda”.
Más al exterior una segunda extravagancia hace más peculiar a este Roque, pues la erosión ha labrado un alto y hermoso arco de piedra en perfecto equilibrio.
Tienes la impresión de que la naturaleza ha creado este exótico lugar para navegar por las acuarelas de Moises Manrique…..

Sobre nuestras pisadas el mar viene a nuestro encuentro, dejando en su retirada un perfecto espejo donde se refleja el guardián de la playa, ahí, ya no te puedes resistir a sacar la mejor foto de la ruta.
Al caer la tarde y sobrecogido por este extraordinario paraje, y ya pensando en volver, nos retiene de nuevo el lugar……quiere hacer un último regalo a nuestras pupilas……, !una inolvidable puesta de sol ! ………. con la silueta del Roque de Santo Domingo que forma un vaso imaginativo que el sol píncela de color naranja intenso, como si quisiera celebrar el ultimo brindis de la tarde con el vino cercano de Garafia.
Si bajamos un poco la vista , a ras de mar, observamos como las crestas de las olas se vuelven color naranja participando también el Atlántico en el decorado de este atardecer. Tanta belleza, nos va dibujando una perenne sonrisa al dormirse la tarde.
Al marchar damos gracias a este rincón palmero por tocarnos tantas emociones.