PLAYA DE LA CANAL - CUEVA CUCABRERA - ERMITA DE SAN PANTALEÓN - LASTRAS DE LAS CUEVAS (GALIZANO - Cantabria). 13 JUL 2020
near Galizano, Cantabria (España)
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Itinerary description
Comenzamos la ruta desde el aparcamiento de la Playa de Galizano o de la Canal, llamada así porque el río Herrera forma aquí al desembocar una especie de canal.
Tomamos de momento dirección SE siguiendo un camino que rápidamente gira 360° introduciéndose por unas pasarelas de madera que finalizan en la arena del cauce del río Herrera.
Sí la marea está alta recomendamos realizar la ruta en sentido contrario.
Caminamos por la arena por la margen izquierda del río, hasta alcanzar la playa propiamente dicha.
Aquí vadeamos el río por las zonas donde menos agua encontramos (no hay ningún puente), y comenzamos a ascender por una senda que nos lleva hasta los acantilados.
Aquí arriba tenemos una estupenda panorámica de la playa de Galizano, de las de Langre, de la Bahía de Santander, del Cabo Mayor, de la Isla del Mouro, de Peña Cabarga...
Ahora seguimos por las trochas existentes al lado de los acantilados hasta llegar a la cueva Cucabrera. Justo en la bifurcación hacia las cuevas hay unas mesas de madera por si hiciera falta un avituallamiento.
Bajamos hasta las dos bocas de la cueva, que como su nombre indica nos ofrece un importante olor a cabra (por eso es mejor el avituallamiento en las mesas de madera de un poco más arriba). Dentro de la cueva nos encontramos unas mesas alargadas construidas con bloques de cemento y un azulejo de la virgen del Carmen. Debajo de una de las mesas está escrito, "Peña de Cucabrera al servicio de ¡todos! 1962".
Volvemos al camino donde seguimos por los acantilados en dirección NE.
Pronto encontramos un desvío. Tomamos el de la derecha (SSW) introduciéndonos por un espeso bosque de eucaliptos.
En la siguiente bifurcación tomamos la pista de la izquierda (NE) siguiendo por el interior del bosque de eucaliptos.
Casi en lo alto alcanzamos unas praderías con alambradas, con ganado vacuno.
Seguimos ascendiendo y así llegamos a los restos de la ermita de San Pantaleón. Los primeros documentos que aparecen de esta ermita datan de 1642. Actualmente solo permanecen en pié tres muros. En la fachada encontramos una portada adintelada decorada con motivos geométricos.
Continuamos camino, pasamos junto a unas casas.
Ahora seguimos por una carretera asfaltada. En la bifurcación tomamos dirección Norte (a nuestra izquierda) comenzando a descender hasta llegar a un mirador en los acantilados.
Aquí comenzamos un fuerte descenso por una pista de tierra que hace poco han repasado con alguna máquina, que nos lleva hasta la zona denominada las Lastras de las Cuevas.
Quizá el esfuerzo de descender hasta aquí desde el mirador no merece mucho la pena, pero por curiosidad decidimos descender hasta la orilla del mar.
Tras disfrutar un buen rato de este lugar, tomamos el camino de regreso.
Toca ascender hasta la ermita de San Pantaleón.
Seguimos por el bosque de eucaliptos hasta llegar prácticamente a la playa de Galizano.
Se puede descender a la playa por la estrecha vereda por la que antes ascendimos, pero preferimos seguir por la carrera asfaltada.
Bordeamos la canal por la margen derecha del río, hasta que alcanzamos un puente en un recóndito lugar cubierto de sauces. Pasamos el puente para más adelante salir a la carretera que une el pueblo con el aparcamiento de la playa.
Ahora ya solo es seguir brevemente la carretera hasta el parking donde iniciamos y ahora finalizamos esta ruta.
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Quienquiera que haga uso y seguimiento total o parcial de este track y de su información adicional, asume la plena responsabilidad ante los riesgos propios de la práctica de la actividad, ya que esta información tiene únicamente carácter orientativo.
Tomamos de momento dirección SE siguiendo un camino que rápidamente gira 360° introduciéndose por unas pasarelas de madera que finalizan en la arena del cauce del río Herrera.
Sí la marea está alta recomendamos realizar la ruta en sentido contrario.
Caminamos por la arena por la margen izquierda del río, hasta alcanzar la playa propiamente dicha.
Aquí vadeamos el río por las zonas donde menos agua encontramos (no hay ningún puente), y comenzamos a ascender por una senda que nos lleva hasta los acantilados.
Aquí arriba tenemos una estupenda panorámica de la playa de Galizano, de las de Langre, de la Bahía de Santander, del Cabo Mayor, de la Isla del Mouro, de Peña Cabarga...
Ahora seguimos por las trochas existentes al lado de los acantilados hasta llegar a la cueva Cucabrera. Justo en la bifurcación hacia las cuevas hay unas mesas de madera por si hiciera falta un avituallamiento.
Bajamos hasta las dos bocas de la cueva, que como su nombre indica nos ofrece un importante olor a cabra (por eso es mejor el avituallamiento en las mesas de madera de un poco más arriba). Dentro de la cueva nos encontramos unas mesas alargadas construidas con bloques de cemento y un azulejo de la virgen del Carmen. Debajo de una de las mesas está escrito, "Peña de Cucabrera al servicio de ¡todos! 1962".
Volvemos al camino donde seguimos por los acantilados en dirección NE.
Pronto encontramos un desvío. Tomamos el de la derecha (SSW) introduciéndonos por un espeso bosque de eucaliptos.
En la siguiente bifurcación tomamos la pista de la izquierda (NE) siguiendo por el interior del bosque de eucaliptos.
Casi en lo alto alcanzamos unas praderías con alambradas, con ganado vacuno.
Seguimos ascendiendo y así llegamos a los restos de la ermita de San Pantaleón. Los primeros documentos que aparecen de esta ermita datan de 1642. Actualmente solo permanecen en pié tres muros. En la fachada encontramos una portada adintelada decorada con motivos geométricos.
Continuamos camino, pasamos junto a unas casas.
Ahora seguimos por una carretera asfaltada. En la bifurcación tomamos dirección Norte (a nuestra izquierda) comenzando a descender hasta llegar a un mirador en los acantilados.
Aquí comenzamos un fuerte descenso por una pista de tierra que hace poco han repasado con alguna máquina, que nos lleva hasta la zona denominada las Lastras de las Cuevas.
Quizá el esfuerzo de descender hasta aquí desde el mirador no merece mucho la pena, pero por curiosidad decidimos descender hasta la orilla del mar.
Tras disfrutar un buen rato de este lugar, tomamos el camino de regreso.
Toca ascender hasta la ermita de San Pantaleón.
Seguimos por el bosque de eucaliptos hasta llegar prácticamente a la playa de Galizano.
Se puede descender a la playa por la estrecha vereda por la que antes ascendimos, pero preferimos seguir por la carrera asfaltada.
Bordeamos la canal por la margen derecha del río, hasta que alcanzamos un puente en un recóndito lugar cubierto de sauces. Pasamos el puente para más adelante salir a la carretera que une el pueblo con el aparcamiento de la playa.
Ahora ya solo es seguir brevemente la carretera hasta el parking donde iniciamos y ahora finalizamos esta ruta.
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Quienquiera que haga uso y seguimiento total o parcial de este track y de su información adicional, asume la plena responsabilidad ante los riesgos propios de la práctica de la actividad, ya que esta información tiene únicamente carácter orientativo.
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