Por la antigua vereda de Carchel a Jaén en busca de la cueva del Maqui 'el Berenjeno'

Nos volvemos a subir a la sierra de Carchel, esta vez buscando 2 vestigios del pasado, la antigua vereda del camino de Jaén a Granada a su paso por esta zona -y que todavía los mas antiguos del lugar recuerdan en uso- y el refugio que en las estribaciones de esta sierra y Grajales tuvo un maqui denominado "el Berenjeno".
El primer objetivo, que discurre en la base de la cuesta el acebuche y paralelo al barranco los moros, era fácil, a priori, porque me acompañaban dos vecinos de Carchel -Andrés y Juan- que conocen perfectamente el trayecto de la misma. Luego, no lo fue tanto, pues el descuido de esta vía, de más de 40 años, con una exuberante vegetación de todo tipo, incluso arbórea -cornicabras y chaparros principalmente- han puesto su puntito de aventura. No obstante, conseguimos andarla casi en su totalidad pudiendo observar como aún persiste un buen refuerzo de piedra en su lado mas débil en gran parte de su recorrido, como buen camino de herradura que se precie, el cual debería ser recuperado.
El segundo objetivo ha resultado mucho mas complicado, hasta el punto que lo hemos conseguido "a medias". Me explico. Llevábamos varias referencias y alguna ayuda. Por un lado el conocimiento de la sierra de Juan -que trabajó de cabrero hace muchos años- y los de Andrés -amante de esta sierra que ha recorrido en múltiples ocasiones de un extremo a otro-, y por otro referencias de algún otro vecino del pueblo que conocía su ubicación -aunque ya sabemos lo que pasa con las referencias en el campo, que por muy buenas que sean, solo son eso, referencias- y por otro lado, las fotos del entorno y entrada de la cueva, cedidas por Agustín, amigo y miembro de la peña senderista peña de los Buitres -al que también le debo gran parte de la información que he conseguido de este personaje del siglo pasado-. Con todo ello, abandonamos la Primitiva vereda del camino de Jaén y tras un poquito de campo a través enlazamos con la vereda que, en épocas mejores para la ganadería, era la vereda real de Úbeda a Granada a través del barranco del Puerto de la Hiruela -y que en algún foro senderista también he visto que se llama barranco Víboras-. Siguiendo las referencias descrita, a mitad de barranco vemos claramente la misma cueva que teníamos en una de nuestras fotos-ayuda, y allá que encaminamos nuestros esfuerzos en el margen derecho del barranco, encima de una pedrera que salvamos con calma y cuidado. Una vez allí vemos que la altura a la que está la cueva -unos 2 metros- y la falta de apoyos para su escalada nos hace dudar -sobretodo a Juan- de que esta sea una cueva utilizada durante varios años por un grupo de personas -por muy maquis que fueran-. Un poco desilusionados salimos de allí por un camino un poquito "infernal" por el desnivel, la piedra suelta y la vegetación, aprovechando para hacer unas fotos en y de los lugares mas vistosos. Una vez en el puerto de la Plata, tras un refrigerio en esta preciosa explanada empezamos a planificar la forma de, en otra visita, acceder a la dichosa cueva. Tras bajar por la vereda de la Plata decidimos quitarnos el regusto amargo de la consecución parcial del objetivo con el ascenso a las cuevezuelas de Bodegones -Fogones en el pueblo, aunque me advierte Andrés que es posible que sea un error de pronunciación, por transformación de b en f y simplificación de la palaba resultante, mas que dos términos para nombrar un mismo lugar-, Este ascenso no es recomendable si no se tiene bastante experiencia en terrenos pedregosos, ya que el desnivel y la piedra muy gastada pueden poner en aprietos al mas pintado. Una vez acabada la ruta, y tras enviar varias de las fotografías que había realizado a Agustín, nos comenta que donde hemos estado no era la cueva buscada, sin embargo, de forma casual en varias fotografías que había realizado al paisaje, si aparece, sin haberlo pretendido. En el mapa indico la ubicación aproximada de la misma y en la fotografía donde aparece la indicación correspondiente.
Cuevas las Guardias, barranco las Majaillas y Puntal del Càrabo son topónimos fruto del conocimiento popular que Juan atesora.

El Maqui "Berenjeno"
."La Guerra Civil ha terminado. Los primeros soldados nacionales llegan a
Huelma el 29 de marzo de 1939. Para este día ya debieron de huir a la sierra un grupo
de vecinos que intentan escapar de la dura represión que se avecina. Serán conocidos
popularmente como “los desertados”, por “no haberse entregado al régimen”. No se
lanzan al monte para seguir luchando por la República, sino para poder seguir
sobreviviendo. En la sierra, sus intereses no irán más allá que la pura subsistencia. Para
ello no dudarán en extorsionar a cortijeros y pastores que habitan estos parajes para
conseguir alimentos, dinero y ropa, generando un clima de gran temor"
.Francisco Ruiz Sánchez. www.huelma.org
Este texto, aunque se refiere a los maquis que estuvieron por la zona de Huelma, creo que es perfectamente extensible a cualquier zona del territorio nacional, y, por supuesto al personaje que nos ocupa en la búsqueda de su refugio. Manuel Rodríguez Navas era un campesino que cuando acabó la guerra tuvo que huir a la sierra de Carchel donde permaneció escondido hasta el 24 de Diciembre de 1943, en que, tras información obtenida en su pueblo natal, Pegalajar, la guardia civil efectuó una "redada" multitudinaria siendo apresado él y su grupo, y trasladado a Jaén, donde permaneció encarcelado hasta su ejecución, 3 meses después a los 37 años de edad -18 de marzo de 1944-http://www.todoslosnombres.org/content/personas/manuel-rodriguez-navas