Por los balcones del Júcar. De Las Mariquillas a Valdeganga (Albacete)

Ruta circular por las inmediaciones de la localidad albaceteña de Valdeganga.
Llegamos a la aldea conocido como "las Mariquillas" donde estacionamos en su amplio parking, GPS: 39.136614, -1.746835.
Empezamos la ruta siguiendo una senda en las huertas que nos lleva a una estación de aforo que cruza el río Júcar. Por aquí cruzaremos el río a pesar del indicador de prohibido.
Una vez cruzado el río toca seguir río abajo a nuestra derecha por caminos anchos de tierra.
Llegaremos hasta el paraje conocido como "Charco Azul" en las inmediaciones de la antigua central hidroeléctrica de "Bolinches".
Antes de llegar a la central deberemos tomar una senda que sale a la izquierda y que es la que nos sube a la parte alta de los cañones del río por donde seguiremos así hasta Valdeganga.
No tiene pérdida ya que, a pesar de no estar señalizada, la senda es única y no tiene pérdida.
Desde la parte alta de los cañones veremos las huertas, el río y los bosques de pinos de las montañas de enfrente.
Una vez en la carretera tendremos que cruzar el puente viejo sobre el río y cruzar de nuevo el Júcar tomando a continuación el camino de "Bolinches y dejando el río a nuestra derecha.
A unos 2 kilómetros encontraremos una senda a nuestra izquierda que deberemos tomar para subir de nuevo a la parte alta de los cañones.
Dicha senda transita entre pinos de no mucha altura. Si tenemos suerte podremos ver algún grupo de cabras montesas que saldrán huyendo a nuestro paso.
La senda desemboca en un camino ancho de tierra que viene de Valdeganga y llega a "Bolinches", en las inmediaciones de una gran antena.
En este tramo se sigue por medio del monte llegando a una cota de altura desde donde hay unas bonitas vistas de la ribera del río.
En este tramo no hay senda ni nada por el estilo, de ahí lo de moderado ya que este tramo hay que hacerlo con algo de precaución ya que hay que atravesar una rambla y hay que tener algo de cuidado por lo abrupto que es.
Saldremos a otra senda que nos baja al amplio camino que va paralelo al río y que nos deja definitivamente en el parking de "Las Mariquillas" donde podremos comer si nos apetece en su afamado pero sencillo restaurante.