96. Portillo del Infierno, Peña Ulaña y Peña Castillo
near Ordejón de Arriba, Castilla y León (España)
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Trail photos
Itinerary description
INDICE IBP de Dificultad de la Ruta
Para Criterios y Tabla de Interpretación, Ir a:
https://www.ibpindex.com/index.php/es/
El resultado del análisis IBP es de 71 (para Senderismo): dificultad 'Media' para una preparación física 'Media'.
El cómputo del desnivel acumulado de la ruta por parte de IBP es de 679 metros (superior al que estima Wikiloc).
Idílicos se mostraban los campos primaverales. Tranquilos estaban los valles que se descuelgan por el sur de Peña Ulaña. Avanzo por el camino que se tiende sobre la ladera sureste del sinclinal. Mi ascenso hacia el portillo es sosegado. Y, sin embargo, empiezo a percibir el brote de una indefinible desazón en el cuerpo. Voy solo, y sólo con pensar en el Portillo del ‘’Infierno’’ (con esa denominación lo he visto referido en varios sitios)... Alerta…
Ese nombre suscita la imagen de un paraje tenebroso, sobrecogedor. Con la ‘paparresolla’, la ‘cacaramuza’, o la ‘zancarramalla’ (o, peor, si eso fuera posible, el ‘sacamantecas’…) apareciéndose entre la bruma (que algo hay hoy). Por estas tierras ‘habíalos’, decían que (sí, como las ‘meigas’). Cuando menos, será un lugar abrupto por el que escalar (o descender a las profundidades), reptando o culebreando. Se me disparó en la mente la expresión inglesa “¡Beware!”… ('con perdón'); y, seguidamente, la más castiza “¡átate los machos!”.
Pero empecemos por el principio…
PREÁMBULO Y RESUMEN DEL ITINERARIO
He leído que Peña Ulaña es la lora más extensa de la provincia de Burgos (que loras tiene…). Estas magníficas altiplanicies con frecuencia incluyen sinclinales y anticlinales, y generalmente están bordeadas por uno o más graderíos pétreos, con una corona de farallones en torno a su cima. Tienen por toda la cumbre una asombrosa vegetación: las más variadas florecillas (¡ay, las orquídeas!), plantas herbáceas y arbustivas diversas, y hasta árboles de pleno derecho (pinos, encinas, enebros, y sabinas, principalmente).
Así es en el caso de la Ulaña, una piedra preciosa geológica y botánica. Por no mencionar los vestigios arqueológicos de nuestros ancestros en la Edad del Hierro. No en vano o por azar forma parte, significativamente, del Geoparque Mundial de Las Loras, según la UNESCO, que abarca una amplia área del noroeste de esta provincia.
Ya conocía la plataforma superior de Peña Ulaña. Ahora quería ensanchar horizontes. Así que, en esencia, (1) tomando el pueblo de Ordejón de Arriba (en Wikiloc lo apellidan de Abajo; no sé qué tal lo aceptarán sus vecinos respectivos) como punto de partida y llegada, (2) me encaminé hasta el Portillo del Infierno, en dirección este, (3) crucé de norte a sur Peña Ulaña, subiendo y bajando por senderos nuevos, con una cata selectiva de su enorme cima, y (4) después extendí la exploración hasta la Peña Castillo, en dirección oeste.
Tres elementos principales jalonan, pues, la ruta con un carácter distintivo: los citados Portillo del Infierno, la Ulaña y la Castillo. Hay, además, tres puntos críticos en el recorrido, con cierta complejidad en lo que respecta a la orientación y con alguna dificultad física: el acceso desde ese portillo hasta la primera plataforma de la Ulaña, el descenso desde ésta hacia Ordejón, y el acceso posterior a la otra peña.
En la travesía nos toparemos con tres alambradas. Una, para acceder al portillo, con puerta de ‘quita-y-pon-como-estaba’. Otra, subiendo a la primera plataforma de Peña Ulaña, poco después del portillo. Y una más, cruzando la meseta de Peña Ulaña. Estas dos últimas son superables por algún hueco entre los alambres de espino.
EL PORTILLO (O LA GARGANTILLA) DEL INFIERNO
Ya he aludido a mi turbación durante el ascenso… Pero, alcanzado el portillo propiamente dicho, antaño un lugar de tránsito para personas, animales y mercancías entre el sur y el norte del cordal, ¿qué hallé? Hacia el este, verdes praderas con suaves ondulaciones y tímidas elevaciones rocosas; hacia el oeste, el más agreste sinclinal de Peña Ulaña. ‘Nada del otro mundo’ en el portillo. Todavía intrigado, crucé hasta su vertiente norte, a ver si... Tal vez algo se me había escapado... No. El camino continuaba apacible bajando por ese lado también.
¿Dónde estaba el ‘infierno’? Pues, a mi entender, fuera del portillo en sí; en su margen oeste. Una falla, una gran grieta, una profunda canal aprisionada entre retorcidos peñascos y pliegues tectónicos; como sufriendo condenados en el averno. Verlos produce desasosiego, pero no es el ‘inframundo donde son torturadas eternamente las almas de los pecadores’. No tiene implicaciones prácticas para las funciones del propio portillo actual. Dudo que por esa canal hubiera tráfico regular; si acaso, ‘clandestino’ (ej., estraperlo), para evitar intencionadamente la vía abierta del portillo (...actual).
El suelo de la canal estaba impracticable. Era un barrizal; del que se te agarra a las botas y no te suelta; como el cemento o la pez. Salí de ella y fui bordeándola por la ladera. Pero es verdad que el lugar proporciona una experiencia para saborear allí y contar después. Lo que podría haber sido y no fue. Quizá ‘el Portillo del Purgatorio’ (si acaso) y ‘la Canal (o, mejor, Gargantilla) del Infierno’. Eso se aproximaría más a mi experiencia allí. Paraje inolvidable, en cualquier caso; que acentúa mi empatía con y mi apego a estas tierras (y otras muchas).
(*) Nota añadida. Nueve días después (8 de mayo), entre intrigado y hechizado, he vuelto a 'La Gargantilla del Infierno', pero ahora por su vertiente norte. He podido subir por ella desde abajo hasta arriba; encajonado entre paredones calizos. Ahora sí era practicable, casi seca. Esto me ha permitido aportar información nueva o correctiva respecto a la actual excursión. Algo sí se me escapó entonces. Es impresionante. Accesible en: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/de-talamillo-a-la-gargantilla-102182755
LA PEÑA ULAÑA
Tras dejar el portillo, nos situaremos en el sinclinal de la Ulaña. Enseguida hay que salirse del camino por la derecha y entrar en un bosque de pinos. A través de él, sin sendero, pero sin agobios, ascendemos hasta un collado que nos deja en la plataforma intermedia, entre el valle norte y la cima. Una alambrada cierra el paso en el collado; hay que localizar un hueco para cruzarla. Después caminaremos cómodamente por esa plataforma, con buenas vistas del valle norte (Fuencaliente, San Martín de Humada,…), hasta una pista que sube a la cima.
Ya arriba, en la plataforma superior, me detuve a admirar sus acurrucadas florecillas, y la atravesé, sin más dilación, hasta su borde sur. El resto me era familiar, a oriente y a poniente. Desde allí, veremos cómo debajo emergen los dos Ordejones; un poco más al oeste, la emblemática Peña Amaya irguiéndose sobre Villamartín; y, más al sur, se despliega la inmensa llanura y su retícula de campos, y sus pueblos, tras los montes de Rioparaíso: Villusto, Sandoval de la Reina, Sotresgudo… Todo un espectáculo; no por conocido, menos fascinante.
Hay que encontrar el modo de descender. La altura es considerable y los cortados caen en picado. Como quiero ir a la Peña Castillo, exploro una posible bajada cercana. Imposible. Un poco más atrás, frente a Ordejón de Arriba, un hito de piedras señala el punto flaco en los crestones: un escondido canalón, tan camuflado que es imposible detectarlo desde abajo y difícil de hacerlo hasta que no estás dentro, desde arriba. Luego, moverte por él no es peligroso, pero requiere precaución. Prohibido perderse la roca de El Ventanón.
PEÑA CASTILLO
No puede uno ir a Peña Ulaña y olvidarse de Peña Castillo; su prole más independiente, con ‘personalidad’ y presencia propias. Como hay tantas ‘peñas castillo’ por doquier, también se la denomina Sinclinal de Ordejón. Aparte de su forma característica, ovalada y con una corona rocosa en su inclinada cima, como una visera de medio lado, tiene otra peculiaridad notable: con orientación sureste, se aprecian dos caras de personas esculpidas fantasiosamente en la piedra por la naturaleza; con su frente, ojos, nariz, boca, barbilla.
Allá me fui tras bajar de la Ulaña. El camino hasta la base de Peña Castillo es cómodo. Luego hay que poner una marcha corta en las piernas para subir hasta la parte roqueña. En este trayecto, el punto crítico es la vía de acceso hasta la cumbre. Sólo hay un paso factible, caminando o, más bien, trepando. Está en su lado norte. Una vez allí, hay que servirse de pies y manos al suelo para ascender. Es un tramo corto y escalonado. Vamos encajonados, lo que reduce los riesgos, pero hay que ir con cuidado.
Arriba no hay mucho que hacer ni que recorrer. Sólo hay hierba y algunas flores. Pero, una vez más, disponemos de espléndidas panorámicas. Las aulagas empiezan a florecer y adornan las laderas. Hacen su contribución a la explosión primaveral, aportando su vivo color gualda a los innumerables verdes. Menos mal que no son ‘flor de un día’ y que se extenderán y mantendrán al menos un mes más. En el camino de vuelta hasta Ordejón, las aulagas atavían el paisaje. Y, curiosamente, nos preparan para otra floritura; ésta, inesperada…
EL JARDÍN DE ORDEJÓN DE ARRIBA
En una comarca austera y espartana en muchos sentidos, todos admirables a mi parecer, sorprende encontrar una pequeña localidad con unos jardines tan floridos, con esa variedad y ese buen gusto. A falta de una iglesia deslumbrante (se halla encerrada entre otras edificaciones y no parece estar en uso), me dediqué a hacer fotos de sus flores. Un cierre artístico y refinado (el de Ordejón) para una soberbia y correosa excursión. Gran contraste.
Otro día más
bien aprovechado,
en esta ruleta,
en este letargo.
Cuando el día acabe,
no habrá terminado.
Se me quedará en la mente,
para r'memorarlo.
Un costal de ahorros
para el mañana,
cuando el cuerpo diga:
“hasta aquí; ya basta”.
Andares airosos,
afanes de esfuerzo,
mirada volando:
ese es el secreto.
RUTAS CERCANAS POR EL GEOPARQUE DE LAS LORAS:
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/fuenteodra-y-pena-lora-96470479
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/geoparque-de-las-loras-desde-valdelucio-92736885
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/lora-de-la-mesa-desde-valtierra-97077182
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/de-los-valcarceres-a-talamillo-91794892
Para Criterios y Tabla de Interpretación, Ir a:
https://www.ibpindex.com/index.php/es/
El resultado del análisis IBP es de 71 (para Senderismo): dificultad 'Media' para una preparación física 'Media'.
El cómputo del desnivel acumulado de la ruta por parte de IBP es de 679 metros (superior al que estima Wikiloc).
Idílicos se mostraban los campos primaverales. Tranquilos estaban los valles que se descuelgan por el sur de Peña Ulaña. Avanzo por el camino que se tiende sobre la ladera sureste del sinclinal. Mi ascenso hacia el portillo es sosegado. Y, sin embargo, empiezo a percibir el brote de una indefinible desazón en el cuerpo. Voy solo, y sólo con pensar en el Portillo del ‘’Infierno’’ (con esa denominación lo he visto referido en varios sitios)... Alerta…
Ese nombre suscita la imagen de un paraje tenebroso, sobrecogedor. Con la ‘paparresolla’, la ‘cacaramuza’, o la ‘zancarramalla’ (o, peor, si eso fuera posible, el ‘sacamantecas’…) apareciéndose entre la bruma (que algo hay hoy). Por estas tierras ‘habíalos’, decían que (sí, como las ‘meigas’). Cuando menos, será un lugar abrupto por el que escalar (o descender a las profundidades), reptando o culebreando. Se me disparó en la mente la expresión inglesa “¡Beware!”… ('con perdón'); y, seguidamente, la más castiza “¡átate los machos!”.
Pero empecemos por el principio…
PREÁMBULO Y RESUMEN DEL ITINERARIO
He leído que Peña Ulaña es la lora más extensa de la provincia de Burgos (que loras tiene…). Estas magníficas altiplanicies con frecuencia incluyen sinclinales y anticlinales, y generalmente están bordeadas por uno o más graderíos pétreos, con una corona de farallones en torno a su cima. Tienen por toda la cumbre una asombrosa vegetación: las más variadas florecillas (¡ay, las orquídeas!), plantas herbáceas y arbustivas diversas, y hasta árboles de pleno derecho (pinos, encinas, enebros, y sabinas, principalmente).
Así es en el caso de la Ulaña, una piedra preciosa geológica y botánica. Por no mencionar los vestigios arqueológicos de nuestros ancestros en la Edad del Hierro. No en vano o por azar forma parte, significativamente, del Geoparque Mundial de Las Loras, según la UNESCO, que abarca una amplia área del noroeste de esta provincia.
Ya conocía la plataforma superior de Peña Ulaña. Ahora quería ensanchar horizontes. Así que, en esencia, (1) tomando el pueblo de Ordejón de Arriba (en Wikiloc lo apellidan de Abajo; no sé qué tal lo aceptarán sus vecinos respectivos) como punto de partida y llegada, (2) me encaminé hasta el Portillo del Infierno, en dirección este, (3) crucé de norte a sur Peña Ulaña, subiendo y bajando por senderos nuevos, con una cata selectiva de su enorme cima, y (4) después extendí la exploración hasta la Peña Castillo, en dirección oeste.
Tres elementos principales jalonan, pues, la ruta con un carácter distintivo: los citados Portillo del Infierno, la Ulaña y la Castillo. Hay, además, tres puntos críticos en el recorrido, con cierta complejidad en lo que respecta a la orientación y con alguna dificultad física: el acceso desde ese portillo hasta la primera plataforma de la Ulaña, el descenso desde ésta hacia Ordejón, y el acceso posterior a la otra peña.
En la travesía nos toparemos con tres alambradas. Una, para acceder al portillo, con puerta de ‘quita-y-pon-como-estaba’. Otra, subiendo a la primera plataforma de Peña Ulaña, poco después del portillo. Y una más, cruzando la meseta de Peña Ulaña. Estas dos últimas son superables por algún hueco entre los alambres de espino.
EL PORTILLO (O LA GARGANTILLA) DEL INFIERNO
Ya he aludido a mi turbación durante el ascenso… Pero, alcanzado el portillo propiamente dicho, antaño un lugar de tránsito para personas, animales y mercancías entre el sur y el norte del cordal, ¿qué hallé? Hacia el este, verdes praderas con suaves ondulaciones y tímidas elevaciones rocosas; hacia el oeste, el más agreste sinclinal de Peña Ulaña. ‘Nada del otro mundo’ en el portillo. Todavía intrigado, crucé hasta su vertiente norte, a ver si... Tal vez algo se me había escapado... No. El camino continuaba apacible bajando por ese lado también.
¿Dónde estaba el ‘infierno’? Pues, a mi entender, fuera del portillo en sí; en su margen oeste. Una falla, una gran grieta, una profunda canal aprisionada entre retorcidos peñascos y pliegues tectónicos; como sufriendo condenados en el averno. Verlos produce desasosiego, pero no es el ‘inframundo donde son torturadas eternamente las almas de los pecadores’. No tiene implicaciones prácticas para las funciones del propio portillo actual. Dudo que por esa canal hubiera tráfico regular; si acaso, ‘clandestino’ (ej., estraperlo), para evitar intencionadamente la vía abierta del portillo (...actual).
El suelo de la canal estaba impracticable. Era un barrizal; del que se te agarra a las botas y no te suelta; como el cemento o la pez. Salí de ella y fui bordeándola por la ladera. Pero es verdad que el lugar proporciona una experiencia para saborear allí y contar después. Lo que podría haber sido y no fue. Quizá ‘el Portillo del Purgatorio’ (si acaso) y ‘la Canal (o, mejor, Gargantilla) del Infierno’. Eso se aproximaría más a mi experiencia allí. Paraje inolvidable, en cualquier caso; que acentúa mi empatía con y mi apego a estas tierras (y otras muchas).
(*) Nota añadida. Nueve días después (8 de mayo), entre intrigado y hechizado, he vuelto a 'La Gargantilla del Infierno', pero ahora por su vertiente norte. He podido subir por ella desde abajo hasta arriba; encajonado entre paredones calizos. Ahora sí era practicable, casi seca. Esto me ha permitido aportar información nueva o correctiva respecto a la actual excursión. Algo sí se me escapó entonces. Es impresionante. Accesible en: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/de-talamillo-a-la-gargantilla-102182755
LA PEÑA ULAÑA
Tras dejar el portillo, nos situaremos en el sinclinal de la Ulaña. Enseguida hay que salirse del camino por la derecha y entrar en un bosque de pinos. A través de él, sin sendero, pero sin agobios, ascendemos hasta un collado que nos deja en la plataforma intermedia, entre el valle norte y la cima. Una alambrada cierra el paso en el collado; hay que localizar un hueco para cruzarla. Después caminaremos cómodamente por esa plataforma, con buenas vistas del valle norte (Fuencaliente, San Martín de Humada,…), hasta una pista que sube a la cima.
Ya arriba, en la plataforma superior, me detuve a admirar sus acurrucadas florecillas, y la atravesé, sin más dilación, hasta su borde sur. El resto me era familiar, a oriente y a poniente. Desde allí, veremos cómo debajo emergen los dos Ordejones; un poco más al oeste, la emblemática Peña Amaya irguiéndose sobre Villamartín; y, más al sur, se despliega la inmensa llanura y su retícula de campos, y sus pueblos, tras los montes de Rioparaíso: Villusto, Sandoval de la Reina, Sotresgudo… Todo un espectáculo; no por conocido, menos fascinante.
Hay que encontrar el modo de descender. La altura es considerable y los cortados caen en picado. Como quiero ir a la Peña Castillo, exploro una posible bajada cercana. Imposible. Un poco más atrás, frente a Ordejón de Arriba, un hito de piedras señala el punto flaco en los crestones: un escondido canalón, tan camuflado que es imposible detectarlo desde abajo y difícil de hacerlo hasta que no estás dentro, desde arriba. Luego, moverte por él no es peligroso, pero requiere precaución. Prohibido perderse la roca de El Ventanón.
PEÑA CASTILLO
No puede uno ir a Peña Ulaña y olvidarse de Peña Castillo; su prole más independiente, con ‘personalidad’ y presencia propias. Como hay tantas ‘peñas castillo’ por doquier, también se la denomina Sinclinal de Ordejón. Aparte de su forma característica, ovalada y con una corona rocosa en su inclinada cima, como una visera de medio lado, tiene otra peculiaridad notable: con orientación sureste, se aprecian dos caras de personas esculpidas fantasiosamente en la piedra por la naturaleza; con su frente, ojos, nariz, boca, barbilla.
Allá me fui tras bajar de la Ulaña. El camino hasta la base de Peña Castillo es cómodo. Luego hay que poner una marcha corta en las piernas para subir hasta la parte roqueña. En este trayecto, el punto crítico es la vía de acceso hasta la cumbre. Sólo hay un paso factible, caminando o, más bien, trepando. Está en su lado norte. Una vez allí, hay que servirse de pies y manos al suelo para ascender. Es un tramo corto y escalonado. Vamos encajonados, lo que reduce los riesgos, pero hay que ir con cuidado.
Arriba no hay mucho que hacer ni que recorrer. Sólo hay hierba y algunas flores. Pero, una vez más, disponemos de espléndidas panorámicas. Las aulagas empiezan a florecer y adornan las laderas. Hacen su contribución a la explosión primaveral, aportando su vivo color gualda a los innumerables verdes. Menos mal que no son ‘flor de un día’ y que se extenderán y mantendrán al menos un mes más. En el camino de vuelta hasta Ordejón, las aulagas atavían el paisaje. Y, curiosamente, nos preparan para otra floritura; ésta, inesperada…
EL JARDÍN DE ORDEJÓN DE ARRIBA
En una comarca austera y espartana en muchos sentidos, todos admirables a mi parecer, sorprende encontrar una pequeña localidad con unos jardines tan floridos, con esa variedad y ese buen gusto. A falta de una iglesia deslumbrante (se halla encerrada entre otras edificaciones y no parece estar en uso), me dediqué a hacer fotos de sus flores. Un cierre artístico y refinado (el de Ordejón) para una soberbia y correosa excursión. Gran contraste.
Otro día más
bien aprovechado,
en esta ruleta,
en este letargo.
Cuando el día acabe,
no habrá terminado.
Se me quedará en la mente,
para r'memorarlo.
Un costal de ahorros
para el mañana,
cuando el cuerpo diga:
“hasta aquí; ya basta”.
Andares airosos,
afanes de esfuerzo,
mirada volando:
ese es el secreto.
RUTAS CERCANAS POR EL GEOPARQUE DE LAS LORAS:
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/fuenteodra-y-pena-lora-96470479
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/geoparque-de-las-loras-desde-valdelucio-92736885
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/lora-de-la-mesa-desde-valtierra-97077182
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/de-los-valcarceres-a-talamillo-91794892
Waypoints
Comments (2)
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Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Gracias maisid por descubrirnos el monte Rushmore burgalés 😂😂😂 Una entretenida ruta con el vértigo de los grandes espacios.
Un saludo, y muchas rutas
Gracias luis.itxina. Las sombras y los relieves de las rocas juegan fantásticamente.