PRC-BU 3. Valles Románicos y dolmen de las Arnillas. Desde Quintanaloma por Moradillo de Sedano.

PRC-BU 3. Valles románicos y dolmen de las Arnillas.

Desde Quintanaloma salimos cruzando el bonito pueblo que fue premio de embellecimiento de la provincia en 1996.

Hoy vamos a realizar la ruta circular correspondiente al número tres de los PRC de Burgos.

Pero vamos a ampliar el recorrido para acercarnos al dolmen de Las Arnillas.
Se trata de un sepulcro de corredor con una cámara circular con lajas verticales y un pasillo de acceso.
Todo ello rodeado por un túmulo circular de tierra y piedras.
La cámara circular se encuentra abierta.
Se entiende que estaba recubierta de ramas.

Este yacimiento arqueológico se encuentra en muy buen estado de conservación.
Se perimetra con unos muros de medio metro de altura y un alambre para evitar la entrada del ganado.
Un auténtico tesoro del Neolitico de más se 5000 años de antigüedad.

Decidimos salir desde Quintanaloma porque es el punto más cercano desde Villarcayo.

Se tarda poco más de media hora en llegar ahí subiendo por el puerto de la Mazorra hasta el cruce del páramo de Masa y de ahí continuar por una carretera del siglo XX.

A pie ya atravesamos este silencioso y bien cuidado poblado.
En su centro se puede descubrir la iglesia con herencia románica de san Cornelio y san Cipriano.
Esta edificación se ha trasladado en gran parte desde el despoblado de Loma.

Pasamos junto a una pista polideportiva y el Aula Refugio de san Huberto para ganar por un camino en cuesta la sombra del gran campanario que forma la iglesia de San Román.
Tiene algunos detalles románicos, pero sus posteriores ampliaciones hacen que este sitio religioso tenga otros estilos arquitectónicos.

Bajamos de esta ladera en la que se encuentra san Andrés y continuamos por el camino hacia Loma.

Tenemos niebla matinal.
Esto limita en gran medida las ilusiones que habíamos puesto para disfrutar de los encantos de estos pequeños valles.
El despoblado de Loma es una huella más de la decadencia rural en nuestra tierra.

Un camino desde ahí desciende entre eras y terrazas del terreno hasta llegar a la intersección que permite acceder a la ermita de Santa Ana.
Se trata de un austero edificio.
Lo más destacado es el lugar en el que se encuentra.
Resulta ser un faro en lo alto del barranco del arroyo de la Nogala.
En uno de sus laterales encontramos un portillo o paso que nos evita retroceder y así bajamos con cuidado pero sin apenas dificultad al camino del propio barranco.
Un abrevadero junto al manantial hace que se pueda beber un buen trago de agua.
Poco más adelante giramos a la derecha y subimos por trochas y entre peñas hasta una portilla que delimita esta depresión.
De ahí en adelante marchamos por el valle del Almendro o Mendro entre pinos de reforestación y varias vallas hasta tomar el camino que nos conduce sin pérdida al dolmen de las Arnillas.

Nos recreamos y maravillamos con este yacimiento arqueológico y regresamos por los pasos anteriormente realizados hasta situarnos dentro del barranco de la Nogala, donde habíamos girado para salir de él.

Una vez encajonados entre las riscas de este estrecho valle revestido de un bosque de galería de roble vamos bajando en compañía del humilde cauce del arroyo hasta llegar unos kilómetros más adelante a la maravillosa iglesia románica de San Esteban Proto Mártir de Moradillo de Sedano.

Se encuentra en un pequeño otero.
Las líneas de la portada y sus elementos ornamentales con un Pantocrator pétreo impresionante hacen que nos quedemos boquiabiertos con las maravillas románicas de este templo.


Dejamos a san Esteban y a sus jóvenes morales que lo custodian para descender las irregulares escaleras por las que se accede aquí arriba y ponernos al nivel del pueblo donde aparece la carretera que nos llevaría Quintanaloma.
Pero en el cartel de fin del pueblo aparece un camino antiguo paralelo a ella y que nos lleva por este valle del arroyo Ruyuela hasta arriba, donde habíamos salido a primera hora de la mañana.
Nogalas y robles nos acompañan en el camino.

La entrada a Quintanaloma es muy interesante.
El pilón y lavadero nos indican la llegada al pueblo.
Antes de ganar la carretera y el centro urbano nos acercamos junto a un parque infantil y bajo la carretera a una hermosa fuente románica.
Una joya poco común que aún perdura.

Ruta muy sencilla.
Tanto como interesante y agradable.