PRESA DE EL PINTADO - MIRADOR BAJOS DE JÁDRAGA

Esta ruta la planifiqué yo sobre mapas y acabó pareciéndose poco al proyecto original pues improvisé bastante.

El inicio/fin de la ruta lo ubiqué en la misma presa del Embalse de El Pintado. A él podemos acceder tanto desde El Real de la Jara como desde Cazalla de la Sierra. Aconsejo ir desde Cazalla, pues el otro tramo de carretera es más largo, más sinuoso y el firme está peor.

No lo sabía al planificar la ruta, pero informo que el itinerario transcurre casi todo el tiempo por la finca privada Los Tohales. Se anuncia en alguna ocasión la existencia de ganado bravo. El terreno por donde yo circulé es escarpado y con bastante vegetación, así que no creo en absoluto que por ahí discurra este tipo de animal. Sí vi alguna mansa vaca. De todas formas pregunté a un cazador amigo, el cuál me comentó que él conoció la existencia de toro bravo en la finca, pero en otros parajes y tiempos pasados. O sea, que según él ya no hay toro allí. De todas formas podéis indagar en el poblado de El Pintado para quedaros tranquilos al 100%.

Empezamos a caminar por un camino paralelo a la orilla aunque se prohíba el paso. Al llegar a una cancela herrumbrosa y abierta giramos a la derecha, saltamos una recia alambrada sin problemas y afrontamos un duro repecho hasta alcanzar un carril unos 150 metros arriba de aquélla, carril que circunda completamente ese cerro.

El carril es comodísimo y conforma una excelente balconada del embalse. Las vistas son de continuo muy hermosas.

Llegaremos a una trifurcación. Yo tomé el carril de la izquierda porque así lo tenía planeado, pero se me quedaron en la retina los otros dos carriles. Tanto es así que acabé circulando por todos ellos. El de enmedio me llevó a la bien visible antena de telefonía y el de la derecha me condujo de regreso a la presa. Aconsejo subir primero a la antena y después tomar el de la izquierda, pues tenemos más fuerzas al principio de la jornada.

Mis pasos me guiaron a una cancela blanca abierta y pasé, algo más allá, entre una alambrada para acceder a la carretera de Cazalla. Unos 400 metros más tarde crucé la carretera y pasé entre otra alambrada para acceder al Camino de Las Corchas. Tuve que salvar una angarilla cerrada. Tras ésta decidí afrontar otro duro repecho para alcanzar un nuevo carril traspasando entre otra alambrada.

Ahora paseé por la cuerda de una loma, cuerda que se convierte postreramente en cortafuegos. Cuando éste finiquita tomé un senderín que me condujo a un regato. Lo hollado por las vacas me ayudó a desembocar en la carretera que se dirige a La Ganchosa a la izquierda y a la carretera de Cazalla a la derecha, no sin metros antes cruzar fácilmente bajo una última alambrada.

Tomamos a la derecha y a unos 700 metros llegamos al Mirador de los Bajos de Jádraga, un lugar ideal para admirar las gargantas del Río Viar, uno de los parajes más bellos, sin duda, de la provincia de Sevilla.

Continuamos por la carretera (que no tienen tráfico ninguno) hasta desembocar en la de Cazalla/El Real de La Jara. Al final del tramo nos quedará la cortijada de Los Tohales a la izquierda.

Ahora podéis acabar por asfalto o retomar el carril-balcón del embalse traspasando una cancela. Al llegar a la trifurcación debéis circular por el carril aún no conocido. Cruzaréis una oxidada y abierta cancela y pasaréis por el hueco de una última alambrada antes de llegar al poblado y a la presa de El Pintado.

El paseo me mereció en extremo la pena. También aconsejo pasar la noche en la presa y ver amanecer desde o cerca de ella.

¡A disfrutar!