Puerto de las Camellas- Monte Arropé- Vía de la Plata-Cáceres

Iniciamos la ruta en el Puerto de Las Camellas. Dejamos a mano izquierda la Residencia de Mayores La Hacienda y tras un depósito de agua nos desviamos a la derecha para seguir por una pista asfaltada.
Continuamos un trecho hasta llegar a una cancela que dejamos a la derecha y que conduce al polvorín.
Por una pista de tierra vamos ascendiendo hacia el cerro del Arropé que está muy deforestado, ya que se plantaron eucaliptos y se talaron posteriormente, tan solo en la cima hay escasa vegetación autóctona, como el piruétano o peral silvestre.
Hay varias señales que nos encaminan al mirador, recordando la distancia que falta para llegar.
Encontramos un desvío hacia el mirador. Entre jara vemos varias mesas con bancos para descansar.
En la cima está el mirador, con una cabaña de madera semejante a las de avistamiento de aves bien conservada, pero sin bancos.
Paramos para hacer unas fotos a Cáceres, la Sierra de la Mosca, Sierra de Fuentes, el Alcor de Santa Ana y a la extensión más allá de Valdesalor, con la Sierra de San Pedro al fondo.
También se aprecia el y la cantera de Núñez donde se extrae cuarcita armoricana.
Hay numerosos icnofósiles en las cuarcitas y pizarras rojas. En el devónico y silúrico, hace 300 millones de años, esta zona era el fondo de un mar, por lo que aparecen aquí y en el cerro del Milano numerosos skolithos que son galerías de gusanos que en la parte superior de la cuarcita tienen un agujero visible.
Abandonamos el mirador y tomamos de nuevo el camino que nos llevará al Mirador de Arropé1, en la ladera sur del monte.
Ascendemos a la atalaya de madera que está muy bien conservada, para ver el pantano de Valdesalor, la Sierra de Fuentes, donde se aprecia el radar en la cima, y una cantera.
Iniciamos un fuerte descenso y continuamos por el camino, dejando a la derecha la Alberca y la dehesa de Lagartera.
Pasamos al lado de encinas y entre el cerro de Arropé y la sierra de la Mosca está el llano de Matamoros y el pradillo de Arropé.
Se nos cruzó un zorro por el camino, que desapareció monte arriba rápidamente.
Vemos a la derecha varias casas y a la izquierda sale un camino que señala a los miradores de Arropé, que por lo que se ve el acceso está accesible también por este lado, sin tener que desviarse a la pista que llega al polvorín.
Llegamos de nuevo al puerto de Las Camellas y sin cruzar la carretera seguimos hasta alcanzar más adelante la Vía de la Plata que en este tramo coincide con la cañada Real del Casar.
A la izquierda están los montes del alcor de santa Ana y el CEFOT o campamento de Santa Ana.
Más adelante se desvía la Vía de la Plata para dirigirse a la Charca Musia, pasando al lado de la dehesa de los Caballos, y adentrarse en Cáceres.
Continuamos por la cañada real y vemos a la izquierda las viviendas de la urbanización Ceres Golf.
Llegamos al recinto ferial y tras los aparcamientos nos desviamos por una senda hacia la rotonda del cruce de las carreteras de Badajoz y Mérida.
Continuamos sin cruzar la carretera por el polígono industrial y accedemos al parque de las Víctimas del Terrorismo, muy seco en esta época del año, pero que tiene varios arbustos de distintos tipos de laurel, pinos, encinas, alcornoques y madroños.
Más delante pasamos por el parque Puerta Sur y continuamos hasta llegar al recinto vallado donde se conservan los restos de antiguos hornos de cal. Seguidamente pasamos por la estación de autobuses y por la rotonda de la RENFE.
Desde aquí cruzamos la amplia avenida de Alemania para acceder a la rotonda de Alfonso IX.
Pasamos por la Avenida de París, muy sombreada por frondosos árboles y altas palmeras y finalizamos la ruta en la Plaza de Andalucía que tiene numerosos naranjos y palmeras rodeando una fuente con los escudos de cada provincia andaluza.