Puerto del Arenal - Navarredonda de Gredos

Despues de pasar en distintas ocasiones por el punto de inicio de esta ruta y no poder parar, hoy es el día elegido, vengo con la intención de llegar al Puerto del Arenal.
El inicio de la ruta está al borde de la carretera que va de Venta Rasquilla al Barco de Ávila, un kilometro antes de llegar al Parador de Turismo de Gredos, allí encontramos una buena explanada y un cartel informativo.
El Puerto del Arenal fue uno de los pasos históricos que se utilizaba desde antaño y que en su momento estuvo sujeto a peaje. Aquí la montaña no se muestra tan abrupta como en el macizo central de Gredos y resulta cómodo andar por sus caminos y sendas ya que la cara norte de esta sierra no tiene excesiva pendiente.
Ha sido utilizado desde siempre para comunicar el Valle del Tormes desde Navarredonda de Gredos, con el Valle del Tiétar a través del pueblo de El Arenal, del que recibe su nombre.
El recorrido tiene la denominación PR-AV-45 y comienza por una amplia pista de tierra con poste indicativos de madera que discurre por el interior de un tupido pinar, después salimos a una zona de pastos de montaña donde vemos rebaños de vacas y caballos.
El primer punto de interés que encontramos es el Nacimiento del rio Tormes, nos tenemos que desviar un poco hacia la derecha para llegar al sitio, allí encontramos un apilamiento de piedras y un chorro de agua que surge entre ellas, esto sería el manantial del Arroyo Tormejon que da origen al rio, al lado hay una especie de gran dolmen para señalar el sitio.
Desde aquí tenemos una buena vista de los grandes de Gredos en la lejanía, volvemos a la pista principal, pasamos por una puerta de alambre y palos y seguimos en suave ascenso por la ladera de la montaña en dirección sur, la pista nos lleva hasta las inmediaciones de una caseta de pastores, desde aquí seguimos los hitos por un claro sendero hasta que llegamos a la zona de Canto Cochino, ya en la cuerda de la sierra, seguimos hacia la izquierda bajando un poco hasta llegar al Puerto del Arenal, desde aquí las vistas se abren hacia el inmenso Valle del Tiétar y el Barranco de las Cinco Villas en primer término, en las laderas del sur se aprecian diferentes pistas que suben serpenteando hasta el puerto.
Después de un rato disfrutando de las buenas vistas comienzo el regreso por el mismo camino,