Puerto Vegarada -Charcos Cochaína -Colleores -Cdo.de Faro -peñas de Faro -pico Huevo -Portina Faro -Cascada Vegarada -puerto

A comienzo de verano, 'Ojolince y Sra.' vamos a completar un recorrido circular por las montañas del alto Curueño que nos lleva a alcanzar cumbres de más de dos mil metros, realizando el retorno por la hermosa y diversa cuenca del río Curueño.
Damos comienzo la ruta de buena mañana partiendo del puerto de Vegarada, sito a 1.556 mts. de altitud con fresca temperatura, donde damos rienda suelta a nuestra particular afición de localización de especies vegetales, en las mismas praderías del puerto que, libres de ganadería y bien encharcadas, gozan de una impresionante floración.
Sin atravesar el vallado que delimita el límite de Comunidad y sin senda definida, comenzamos a ascender ladera arriba en dirección a las peñas de Faro.
Enseguida alcanzamos el paraje conocido como los Charcos de Cochaína, una gran pradera salpicada de pequeñas lagunas temporales.
Avanzando, ganamos altura de forma cómoda hasta Los Colleores, gran pradera sita a 1.686 mts. de altitud, que también encontramos libre de ganadería y desde donde emprendemos la subida al Collado de Faro alcanzando los 1.850 mts., tras darle un buen repaso botánico a las verticales paredes que circundamos.
Desde el collado, cresteando y disfrutando de las vistas de este cordal, llegamos a la primera cima de peñas de Faro, situada más al este y de 2.080 mts. de altitud para coronar en pocos minutos la cumbre principal de 2.112 mts. en la que disfrutamos durante un buen rato de su magnífica localización y reconocimiento del entorno.
Y así distinguimos: Picos Nogales, Morala, Pico del Oso, el Pico Bodón, las montañas de Riaño incluídos los Mampodres, la Montaña Palentina, y también los macizos occidental y central de Picos de Europa...
Descendemos de peñas de Faro tomando las debidas precauciones por su pedrera semidescompuesta hacia el collado que las une con el pico Huevo y tras pocos minutos de cómoda subida encumbramos sus 2.155 mts. para realizar el merecido almuerzo en uno de los lugares más tranquilos y bellos de estas montañas, que nos regala excepcionales vistas allá donde miremos.
El retorno lo hacemos desandando el sendero hasta el collado que separa pico Huevo y peñas de Faro, desde donde nos dirigimos a la Portina de Faro, una brecha que nos abre el paso entre las peñas de Faro y el pico del Mediodía que, mediante una pindia pendiente, nos permite bajar al hermoso valle glaciar del río Curueño por donde, descubriendo su flora, fauna, cascadas y saltos, retornamos al puerto de Vegarada.
Una ruta gratificante y de excepcional belleza donde se hace patente la diversidad botánica que conservan estos altos valles y sus cumbres.
Puedes ver la flora localizada durante este recorrido en la crónica destinada a tal fin en nuestro blog: http://www.ojolince.com/2023/07/flora-del-puerto-vegarada-pico-huevo-y.html