Pueyo de Araguás - Los Molinos - Monasterio de San Victorián - Ermita de Espelunga - Oncins - Torrelisa - Pueyo de Araguás

Circular Pueyo de Araguás – Monasterio de San Victorián – Ermita de Espelunga.

Todos los datos de la ruta en la siguiente reseña del blog Península: Ermita de Espelunga. Circular a los pies de la Peña Montañesa.

Ruta circular por las faldas de la Peña Montañesa, encadenando viejos caminos de herradura que unen a las diferentes aldeas que encontramos bajo la montaña.
La excursión comienza en Pueyo de Araguás, una pequeña aldea a 5 kilómetros de Aínsa. Los primeros kilómetros hasta el monasterio de San Victorián o San Beturián discurren por el sendero balizado PR-HU 43, por lo que seguiremos marcas blancas y amarillas.

Tras algunos kilómetros por pista, ya muy cerca de la aldea de Soto, conectamos con una senda muy bonita que asciende por un bosque de pino al Cuello de San Beturián, collado que corona la modesta Sierra de Soto y que permite el paso a Los Molinos y a el monasterio desde el Pueyo de Araguás.

Descenderemos por otro bosque de pinos hasta alcanzar las inmediaciones del Barranco de la Nata. Este barranco esta rodeado de badlands o margas, terreno muy resbaladizo y roto. Vadearemos el barranco y nos mojaremos inevitablemente debido a las últimas lluvias y comenzamos un breve ascenso al pueblo de Los Molinos.
Desde aquí, conectaremos de nuevo con otra senda que asciende primero al pueblo de La Muria y después al monasterio de San Victorián. La última subida es bastante potente.

Ya en el monasterio vemos el desvío a la ermita de la Espelunga. La visita a la ermita es “voluntaria” pues podríamos poner rumbo al Pueyo de Araguás desde aquí, pero decidimos subir a verla. Son 2,5 kilómetros y unos 150 metros de desnivel positivo, un paseo muy asequible.

La subida es muy bonita. Pasaremos primero por la ermita de San Antón sin apenas ganar altura, para después comenzar a subir en diagonal. Atravesaremos un bosque de encinas espectacular para terminar subiendo a la ermita por un empinado zig-zag.
La ermita sorprende por su ubicación. Está mimetizada con las rocas de las paredes de la Peña Montañesa.

Tras una breve visita, volvemos hasta el monasterio y desde allí, por la estrecha carretera, ponemos rumbo al siguiente pueblo: Oncins. Atravesaremos su diminuto casco urbano y tomaremos otra senda que conduce a Torrelisa.

El camino a este pueblo es cómodo, casi todo bajada, atravesando una zona de barrancos y monte bajo que no tiene dificultad alguna.

Alcanzaremos este pueblo y seguiremos hacia el Pueyo siguiendo las indicaciones de los senderos de la Zona Zero de Aínsa hacia el Planillé (collado que atraviesa de nuevo la Sierra de Soto).

Coronado el Planillé, descenderemos a el Pueyo de Araguás por el camino de la derecha. Una senda que atraviesa el pinar hasta desembocar en la carretera y que nos deja de manera cómoda en el punto de partida.