Puig Campana por Km. Vertical. Finestrat, Alicante

Puig Campana es la segunda montaña más alta de Alicante, dista 7,8 km del mar Mediterráneo en línea recta y es la cima más elevada de la península por proximidad a la costa. Pertenece a la Cordillera Prebética.
Decidimos subir por el Km. Vertical, que es una de las rutas más exigentes de Alicante. Para coronar el pico hay que hacer más de 1.000 metros de desnivel por un terreno complicado.
Es importante tener en cuenta que nos encontramos en una zona de gran valor paisajístico y medioambiental, dentro del denominado Paisaje Protegido del Puig Campana y Ponotx, una zona que cuenta con una figura de protección similar a la de un Parque Natural, declarado como tal en 2006 por la Generalitat Valenciana.
En la zona encontramos varias microrreservas de flora, con especies protegidas por la legislación.
Desde el aparcamiento de la Font del Molí comenzamos la ruta. Salimos por la carretera que está a la izquierda, íbamos de charla, no nos fijamos y equivocadamente entramos por un camino que nos llevaba a la circular. Cuando nos dimos cuenta, rectificamos, volvimos y fuimos por el borde de una acequia hasta llegar a un puente que nos llevaba al inicio de Km. Vertical. Hay carteles que señalan la subida por el PR-CV-289, que hace una ruta circular, y otro que indica el Km. Vertical, que es por donde subimos nosotros.
Inicialmente, se va por una senda entre árboles, hasta que se llega a la imponente y vertical pedrera de ascenso. En la pedrera seguimos por una senda marcada con puntos amarillos. El terreno está muy descompuesto, es muy empinado, resbala mucho y en muchas ocasiones hay que hacer uso de las manos para poder seguir ascendiendo. La humedad del ambiente por su proximidad al mar, hizo que no parásemos de sudar en todo el rato. Además, montañeros de la zona nos dijeron que la subida con sol hace que haga un calor infernal, afortunadamente estaba nublado. Después del gran esfuerzo de subida por la pedrera, torcemos a la derecha y subimos por una senda desde la que podemos ver el Mar Mediterráneo. Ya en la cima, con el mar en frente y montañas en todos los demás lados, disfrutamos de unas fantásticas panorámicas con el contraste del mar y la montaña. Descendemos por el mismo lugar que hemos subido hasta llegar de nuevo a la zona de la pedrera, ahí hay postes que indican el km vertical y la bajada por el PR-CV-289 por la cara norte, que es por el que bajamos nosotros. La cara norte del Puig Campana es un espectáculo en lo que a botánica se refiere. Sus particulares condiciones de altitud y orientación permiten la presencia de árboles de hoja caduca, como fresnos y arces, además de carrascas y por supuesto pinos. También destaca la presencia de vegetación adaptada a los roquedos y canchales. Un ecosistema muy frágil, por lo que es de vital importancia no salirse de las sendas y evitar los “atajos”. En la bajada, al principio, el camino es igual de empinado que por la pedrera, hay zonas que están en muy mal estado, parece que ha habido desprendimientos, hay que llevar mucho cuidado para no resbalar. Incluso han equipado una roca con una cuerda que ayuda en el descenso. Por esta senda llegaremos al Coll de Pouet. Una vez aquí, seguiremos las indicaciones de Font del Molí. Más adelante encontraremos el Refugio de Montaña de José Manuel Vera. Seguimos descendiendo rodeando las impresionantes paredes del Portell y el Tajo de Roldán.
El Tajo de Roldán o El Portell del Puig Campana en valenciano, se encuentra en la cima oeste de la montaña, cumbre que recibe el nombre de Pic Prim. Esta seña de identidad del Puig Campana es visible desde las vertientes norte y sur de la montaña. Hay multitud de versiones de la leyenda que narra el origen de la característica brecha.
Siguiendo el PR-CV-289 llegaremos al inicio de ruta.
Una muy dura ruta y de espectacular belleza.