Puig de Son Seguí.

Para esta ruta podemos dejar el vehículo en el parking gratuito de Sa Creueta y comenzar a caminar por el camino de Ses Olleries. En poco tiempo llegamos a una puerta de hierro por su lado derecho, que después de atravesarla y subir 92 escalones alargados, nos deja en la cueva de Lourdes. A su entrada vemos un cartel que nos informa un poco de su historia. En su parte izquierda hay un pozo con una pica, en la parte central la virgen de Lourdes, detrás una pequeña cueva y a la derecha otra con un banco semicircular de mampostería. Al terminar la barandilla de hierro del lado derecho en bajada existe un estrecho sendero que se adentra entre los árboles y que si lo seguimos nos conducirá a unas cuevas, teniendo una de ellas un agujero en el techo a modo de tragaluz. Hay que decir que tiene mucha basura en su interior. Volvemos por el mismo lugar de subida y continuamos por el asfalto hasta llegar al cartel de Camí de Son Tano en donde torcemos a la derecha, luego a la izquierda y otra vez a la derecha. Hay una puerta que en caso de estar cerrada se bordea por su lado derecho por el que le falta un trozo. La subida es muy empinada y conviene tomársela con tranquilidad. Ya dentro del pinar abandonamos por la derecha el camino ancho por el que vamos y tomamos una senda que hace de enlace con otro camino ancho de tierra que nos llevará hasta un cruce en el que giramos a la izquierda. En ligera subida sin abandonar esta vía ancha llegamos al Puig de Son Seguí. Tiene una torre de vigilancia contra incendios y al lado un vértice geodésico de grandes proporciones con una escalera de metal para subir hasta él. Continuamos por detrás de la torre con una pared a nuestra derecha y llegados a una explanada donde vemos que el agujero hecho en la rejilla de esta pared lo han medio arreglado. La salvamos por su derecha sin estropear nada y continuamos por un caminito hasta la ermita de la Pau de Son Seguí o de Nuestra Señora de la Paz, ya dentro del término municipal de Santa Maria. En el exterior se encuentran un banco de piedra con tres cruces, un pozo y un pequeño corral al que se le ha hundido el techo. Se construyó a finales del 1600 y estuvo habitada hasta 1820, teniendo a su entrada en el dintel de la puerta la inscripción "Soledad es la vida de un ermitaño anacoreta" escrita en latín. Todo su perímetro lo cierran unos muros altos que guardan la ermita, una caseta adosada, un horno de pan, una cisterna al lado contrario de donde entramos y algunas terrazas para cultivos. Damos marcha atrás y regresamos al camino por el que subimos al puig. Por nuestra izquierda cogemos el segundo desvío y en nada nos encontramos otro cruce que cogemos a la derecha para llegar a una caseta de campo, también por la derecha, al lado de la cual por su izquierda existe un senderito que entre la vegetación nos conducirá hasta un camino asfaltado. Ya en él giramos a la izquierda en bajada y vemos una antigua barraca toda de piedra, la de Can Loi. Más abajo llegamos a unas cuevas a la izquierda, posiblemente usadas para guardar ganado, y a la derecha algo por encima del camino un pozo. Nuestra pista termina en otra asfaltada en la que hacemos un giro de 180 grados y tomamos más adelante, el primer cruce, señalizado a la izquierda que pone Sa Creu. Nuevamente tomamos el primer cruce a la izquierda que va sobre un campo de cultivo pegado a la valla de un chalet, señalizado con un cartel cuadrado colgado de un árbol. Todo recto arribamos al paso del Portel Estret. El caminito que viene después a la izquierda nos llevará hasta la Cruz del Sagrado Corazón de la que han cercenado la parte alta de la cruz y la cabeza de una estatua. Posee unas vistas excelentes de casi toda la Tramuntana, de la comarca del Raiguer, comarca del Pla, varias poblaciones, etc, etc. Volvemos al Portel y seguimos un caminito que nos llevará hasta una estructura de fibra que no se sabe lo que es, detrás de la cual continuamos la ruta hasta llegar al camino de hormigón de entrada a Santa Eugenia. Pasamos frente al ayuntamiento y su plaza con un curioso burro en una esquina, luego frente a la iglesia y terminamos en el parking de Sa Creueta.

Fuera de esta ruta, a la entrada de la posesión de Son Seguí en el cruce de la carretera de Santa María con Santa Eugenia, se encuentra un fresno (fraxinus angustifolia) o "estancassangs" en mallorquín, catalogado como árbol singular por su formidable porte .

Compañeros de ruta: Naile, Jordi, Magdalena y Verónica.