Punta de La Madalena (2273m) desde el Parking La Cleta (Valle de Aisa)
near Canfranc, Aragón (España)
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Trail photos
Itinerary description
Segundo día de caminata por los valles y picos del Pirineo Occidental. Como dije ayer, hoy nuestra intención era ascender al Pico Lecherin (2570m). Yo en cambio, andaba flojo de energías por el esfuerzo realizado en el Bisaurín, así que, previo aviso al grupo, decidí ir por mi cuenta por la zona. E aquí la descripción de mi recorrido:
Comenzamos en el parking conocido como "La Cleta", situado en el bonito valle de Aisa. Avanzamos al principio por un camino indicado con el nombre de el SL-HU 105 y que está señalizado con marcas de color verde y blanco. Ascendemos suavemente por una pista de piedras hasta llegar a una pequeña llanura, donde contemplamos varios de los picos del macizo de Aspe.
Cruzamos un riachuelo y seguimos en suave y cómodo ascenso por un estrecho sendero natural, señalizado con marcas de color verde y blanco. Por el camino, pasamos entre un arroyo, en el cual podemos llenar las botellas de agua muy fresca y buena.
A medida que avanzamos, vemos 3 de los picos más elevados y agrestes de esta sierra, como son el Lecherines (objetivo de mis compañeros), los Mallos de Lecherín y el Riguelo. A la derecha, se encuentra también la Punta de La Madalena, monte que me propuse como principal objetivo, con un perfil redondeado y herboso, mucho más asequible que cualquiera de las cumbres del macizo de Aspe.
Luego, llegamos a un cruce, y aquí es donde nos separamos. A la izquierda se va hacia el Lecherín y a la derecha hacia una ancha pista que conduce al refugio López Huici.
Giro a la derecha y, siguiendo varias marcas GR roja y Blanca, camino todavía por un estrecho sendero de tierra y piedras.
Al cabo de unos minutos, el sendero gira hacia la izquierda y ahora me toca ascender una empinada ladera con magníficas vistas a todos los picos que rodean la anterior llanura.
El camino es bastante pedregoso y tiene una pendiente bastante elevada, pero más allá de eso no tiene ninguna dificultad. Además, se avanza por numerosos zig-zags que facilitan el ascenso.
Tras realizar el último zig-zag, sigo en linea recta hasta conectar con una ancha pista. Aquí podría continuar por la izquierda y llegar al refugio López Huici, pero aún era pronto para ir hasta ahí. Mis compañeros, una vez hicieran cumbre al Pico Lecherines, bajarían hasta el mismo refugio, así que mientras yo aprovecharía el tiempo para poder coronar mi propia cima, en este caso la Punta de La Madalena.
Para ello, giro a la derecha y acto seguido, abandono la pista por la izquierda. La teoría era muy fácil, ascender en línea recta una empinada ladera hasta hacer cumbre. La práctica en cambio, no lo iba a ser tanto. Las rampas son descomunales, entorno al 35-40%, sobre todo en el tramo intermedio. La ladera está separada en 2 por una valla, aunque realmente da igual el lado por el que se suba, al inicio fui por la derecha y al bajar fui por la izquierda (derecha de la valla si se desciende).
El terreno es una mezcla de tierra, hierba y piedras, aunque en la parte final del ascenso, el protagonista absoluto es la piedra.
Avanzo sin demasiada prisa y haciendo muchas pausas, por culpa del cansancio y por la poderosa pala a superar, pero al fin consigo llegar a la cima. Bueno, más bien no, era una antecima, la verdadera cumbre se encontraba unas decenas de metros hacia la izquierda. Aún así, he de decir que las mejores vistas están en este lugar.
No tengo palabras para describir la belleza del entorno. Se puede observar toda la sierra de Aspe, con cumbres como Llana del Bozo, Llana de la Garganta, Aspe, Riguelo, Sombrero, los Mallos, Lecherin..., Bisaurín, Pico del Infierno, Collarada, el cercano Pico de La Madalena y alguna que otra cima, además del amplio valle de Aisa.
Tras las fotos de rigor, ahora si, llego hasta la verdadera cima de la Punta de La Madalena (2273m). Aquí podría haber seguido recto hacia la cumbre del Pico de La Madalena, pero eso habría supuesto andar unos cuantos minutos más para ir y volver, y desconocía si sería capaz de llegar al refugio a tiempo, antes de que mis compañeros llegaran y tuvieran que esperarme.
Así pues, fui a lo seguro y volví sobre mis pasos. A paso lento pero firme, desciendo hasta volver a la pista.
Ahora si, continúo de frente y rápidamente llego hasta el refugio López Huici. Al final resultó que me adelanté media hora con respecto a mis compañeros. Podía haber hecho cumbre a la otra cima, aunque en realidad tampoco me he perdido nada importante. Es más, lo agusto que me quedé sentado-tumbado, comiendo el bocata, disfrutando del entorno y más tarde viendo a lo lejos como bajaban mis compañeros, eso no tiene precio.
Nos reagrupamos todos, hacemos un parón para que ellos descansaran (al parecer el tramo final del Pico Lecherin era realmente duro y complicado, probablemente yo no hubiera llegado hasta la cima), y luego iniciamos el descenso hacia el punto de partida. La bajada lo hacemos por el mismo sitio por el que yo he subido.
Al llegar a la parte baja, dedico unos minutos extras para sacar fotos de los alrededores, ya que al inicio apenas pude fotografiar nada por culpa del sol, que golpeaba justo de frente. De hecho, buena parte de las imágenes que he incluido en los waypoints han sido de la bajada, ya que fue sin duda el mejor momento para sacar fotos, cuando el sol estaba en su zenit.
Antes de volver al parking, nos desviamos hasta un pequeño charco llamado "Pozos del Río Estarrún", donde varios de mis compañeros aprovecharon para darse un chapuzón por la frías aguas del río.
Finalmente, volvemos a la pista para ir al parking y finalizar así esta sencilla y preciosa ruta. Ahora toca volver a casa.
Comenzamos en el parking conocido como "La Cleta", situado en el bonito valle de Aisa. Avanzamos al principio por un camino indicado con el nombre de el SL-HU 105 y que está señalizado con marcas de color verde y blanco. Ascendemos suavemente por una pista de piedras hasta llegar a una pequeña llanura, donde contemplamos varios de los picos del macizo de Aspe.
Cruzamos un riachuelo y seguimos en suave y cómodo ascenso por un estrecho sendero natural, señalizado con marcas de color verde y blanco. Por el camino, pasamos entre un arroyo, en el cual podemos llenar las botellas de agua muy fresca y buena.
A medida que avanzamos, vemos 3 de los picos más elevados y agrestes de esta sierra, como son el Lecherines (objetivo de mis compañeros), los Mallos de Lecherín y el Riguelo. A la derecha, se encuentra también la Punta de La Madalena, monte que me propuse como principal objetivo, con un perfil redondeado y herboso, mucho más asequible que cualquiera de las cumbres del macizo de Aspe.
Luego, llegamos a un cruce, y aquí es donde nos separamos. A la izquierda se va hacia el Lecherín y a la derecha hacia una ancha pista que conduce al refugio López Huici.
Giro a la derecha y, siguiendo varias marcas GR roja y Blanca, camino todavía por un estrecho sendero de tierra y piedras.
Al cabo de unos minutos, el sendero gira hacia la izquierda y ahora me toca ascender una empinada ladera con magníficas vistas a todos los picos que rodean la anterior llanura.
El camino es bastante pedregoso y tiene una pendiente bastante elevada, pero más allá de eso no tiene ninguna dificultad. Además, se avanza por numerosos zig-zags que facilitan el ascenso.
Tras realizar el último zig-zag, sigo en linea recta hasta conectar con una ancha pista. Aquí podría continuar por la izquierda y llegar al refugio López Huici, pero aún era pronto para ir hasta ahí. Mis compañeros, una vez hicieran cumbre al Pico Lecherines, bajarían hasta el mismo refugio, así que mientras yo aprovecharía el tiempo para poder coronar mi propia cima, en este caso la Punta de La Madalena.
Para ello, giro a la derecha y acto seguido, abandono la pista por la izquierda. La teoría era muy fácil, ascender en línea recta una empinada ladera hasta hacer cumbre. La práctica en cambio, no lo iba a ser tanto. Las rampas son descomunales, entorno al 35-40%, sobre todo en el tramo intermedio. La ladera está separada en 2 por una valla, aunque realmente da igual el lado por el que se suba, al inicio fui por la derecha y al bajar fui por la izquierda (derecha de la valla si se desciende).
El terreno es una mezcla de tierra, hierba y piedras, aunque en la parte final del ascenso, el protagonista absoluto es la piedra.
Avanzo sin demasiada prisa y haciendo muchas pausas, por culpa del cansancio y por la poderosa pala a superar, pero al fin consigo llegar a la cima. Bueno, más bien no, era una antecima, la verdadera cumbre se encontraba unas decenas de metros hacia la izquierda. Aún así, he de decir que las mejores vistas están en este lugar.
No tengo palabras para describir la belleza del entorno. Se puede observar toda la sierra de Aspe, con cumbres como Llana del Bozo, Llana de la Garganta, Aspe, Riguelo, Sombrero, los Mallos, Lecherin..., Bisaurín, Pico del Infierno, Collarada, el cercano Pico de La Madalena y alguna que otra cima, además del amplio valle de Aisa.
Tras las fotos de rigor, ahora si, llego hasta la verdadera cima de la Punta de La Madalena (2273m). Aquí podría haber seguido recto hacia la cumbre del Pico de La Madalena, pero eso habría supuesto andar unos cuantos minutos más para ir y volver, y desconocía si sería capaz de llegar al refugio a tiempo, antes de que mis compañeros llegaran y tuvieran que esperarme.
Así pues, fui a lo seguro y volví sobre mis pasos. A paso lento pero firme, desciendo hasta volver a la pista.
Ahora si, continúo de frente y rápidamente llego hasta el refugio López Huici. Al final resultó que me adelanté media hora con respecto a mis compañeros. Podía haber hecho cumbre a la otra cima, aunque en realidad tampoco me he perdido nada importante. Es más, lo agusto que me quedé sentado-tumbado, comiendo el bocata, disfrutando del entorno y más tarde viendo a lo lejos como bajaban mis compañeros, eso no tiene precio.
Nos reagrupamos todos, hacemos un parón para que ellos descansaran (al parecer el tramo final del Pico Lecherin era realmente duro y complicado, probablemente yo no hubiera llegado hasta la cima), y luego iniciamos el descenso hacia el punto de partida. La bajada lo hacemos por el mismo sitio por el que yo he subido.
Al llegar a la parte baja, dedico unos minutos extras para sacar fotos de los alrededores, ya que al inicio apenas pude fotografiar nada por culpa del sol, que golpeaba justo de frente. De hecho, buena parte de las imágenes que he incluido en los waypoints han sido de la bajada, ya que fue sin duda el mejor momento para sacar fotos, cuando el sol estaba en su zenit.
Antes de volver al parking, nos desviamos hasta un pequeño charco llamado "Pozos del Río Estarrún", donde varios de mis compañeros aprovecharon para darse un chapuzón por la frías aguas del río.
Finalmente, volvemos a la pista para ir al parking y finalizar así esta sencilla y preciosa ruta. Ahora toca volver a casa.
Waypoints
Intersection
5,899 ft
Cruce. Izquierda hacia Pico Lecherin, derecha hacia refugio López Huici
Cruce. Izquierda hacia Pico Lecherin, derecha hacia refugio López Huici
Information point
6,834 ft
Pista. Izquierda hacia refugio, o derecha y subir a la Punta de La Madalena
Pista. Izquierda hacia refugio, o derecha y subir a la Punta de La Madalena
Comments (2)
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Que paisajes tan bonitos y que día tan esplendoroso para caminar, muy buenas fotos y vídeos, gracias Jon por compartir el trazado.
Completamente de acuerdo Óscar, el escenario es maravilloso, de ensueño, merece pasarse por aquí al menos 1 vez en la vida, Los Pirineos nunca defrauda.
Un saludo, y gracias por tu valoración.