Puntal del lazarejo,Paredes del covacho del aire, pico calerilla,navillas de capazul,peña los alcañetes,desde fuente bermejo
near Nava de San Pedro, Andalucía (España)
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Trail photos
Itinerary description
Una bonita y espectacular ruta , partiendo desde el collado de fuente bermejo y coger una senda de manposteria de las muchas hechas en sierra de cazorla , segura y las villas por el ingeniero enrique mackay monteverde( abajo de la descripción dejo un poco mas de su biografía) ,para introducirnos en pleno corazón de sierra cazorla, entre quejigales y pinos laricios centenares ,todo un tesoro que nos regala la madre naturaleza. llegaremos al portillo del calerillas y a las navillas de capazul , para proseguir nuestra ruta entre los espectaculares ejemplares de pinos hasta llegar al puntal del lazarejo (1719m) y deleitarnos con unas vistas panorámicas del el banderillas ,los villares del calarejo y el calarilla uno de nuestros objetivos . procedemos a bajar desde el collado de las azadillas y coger la pista de la cueva de los alcañetes en este tramo extremar la precaución ya que la bajada es sin senda visible ,para llegar a la pista ya veis la pista por debajo, que cada cual baje según sus posibilidades y por donde mejor le convenga una vez enlazada la pista continuamos por otra senda antigua en desuso para llegar a la fuente de la umbría y reponer un poco de agua ,para así continuar la ruta bajando por la senda del barranco de las iglesias muy bien marcada y llegar a una puerta de madera que nos conduce por su senda al mirador natural del barranco oscuro, para así visualizar la subida que tenemos hacia las paredes del covacho del aire ,justo cuando lleguemos al mirador del barranco oscuro también tenéis la opción de seguir recto hacia el canuto de subida del covacho del aire, nosotros como nuestras rutas las hacemos a nivel personal nos metimos un poco mas arriba . allí vimos tres agujeros en la roca y formaciones rocosas impresionantes, continuamos por la pared apartando arbustos para llegar arriba del todo al collado para así disfrutar un poco mas la zona , repito que se puede subir recto sin necesidad de meternos por donde nos metimos nosotros, una vez en el collado avanzamos hacia unas cavidades rocosas denominadas las cuevas del covacho del aire aquí al llevar el gps activo y movernos mucho por la zona el track parece difuso por muchos círculos en la misma zona pero es solamente continuar recto hasta el próximo waypoint ya según nos convenga. y aquí viene el por que de ponerle muy difícil a esta ruta al avanzar por las paredes y llegar a la cuerda del calerillas ,nos encontramos con una pared para subir a la piedra del vigilante en la cual tuvimos que hacer escalada libre para subir, OJO ES MUY PELIGROSO Y RESBALADIZO se puede evitar bajando un poco mas abajo que esta grabada en la ruta de mi compañero las botas2 ,para asi subir al vigilante,sin necesidad de escalar pero nosotros como repito hacemos la ruta a titulo personal haciéndonos responsables de nosotros mismos y de donde pisamos y andamos. una vez llegando a una formación rocosa llamada por los pastores de la zona como el vigilante cogemos la antigua senda del calarilla, ya en desuso para coger su cuerda y así llegar al punto mas alto de la ruta del día de hoy el calerillas (1736m) .bajando por su canuto nos paseamos por otro espectacular paisaje como las navillas de capazul y peña de los alcañetes para llegar a la ventana tectonica, una cavidad en la roca en la cual justo en el agujero hecho en la roca por la sedimentacion echo raíces un pino laricio. continuando por la peña de los alcañetes o "cuerda"nos encontramos a su paso un ejemplar de tejo milenario impresionante de grande, avanzando un poco mas nos encontramos unas simas de montaña muy profundas, y una cueva que regentan el ganado de la zona para su refugio,viendo también unos sabinares una especie de pinos muy singulares por su pequeño tamaño y formaciones en el tronco y la copa. en fin todo un espectáculo paisajastico para nuestras retinas. ya un poco mas adelante nos desviamos ya hacia nuestro punto de partida de la ruta bajando por una zona muy rocosa y unos canutos de bajada un poco técnicos, pero fáciles de andar para así terminar esta impresionante ruta la cual hace que nos enamoremos cada día mas de a sierra de cazorla y sus lugares recónditos que nos regala cada vez que la visitamos.
un poco de la vida de enrique mackay monteverde amante de la sierra de cazorla y valedor de todos los senderos de manposteria de cazorla segura y las villas:
informacion adquirida de la contradejaen
El protector de las sierras de Cazorla
Paseamos por las altas sierras de Cazorla y presumimos de su belleza sin pensar que hubo un hombre que abrazó de tal modo cada árbol, arbusto y flor que, de no haberlo hecho, nuestros pasos caminarían quizá por un desértico paraje. Tener amigos como Miguel Ángel de la Rosa (compañero de nuestros inicios periodísticos y aquí continuamos, compartiendo espacios en Lacontradejaén es un lujo difícil de igualar y una breve conversación ilumina el camino hacia Cazorla: “¿Conoces a Enrique Mackay Monteverde?”. ¡Gracias compañero por otro descubrimiento más!
Tinerfeño de nacimiento en el año 1876, se licenció en Ingeniería de Montes en la Escuela de El Escorial y diez años después fue destinado a Cazorla, donde permaneció al frente hasta 1924. A su llegada, Mackay se encontró con una sierra convertida en provincia marítima un siglo antes para abastecer a la Armada de madera y la corta sin control había hecho desaparecer, prácticamente, todos sus robles. En pocos años, aquel ingeniero de montes logró, no sólo la repoblación y cuidado de este espacio natural, sino también aplicar políticas sociales como, por ejemplo, facilitar ayudas a familias de trabajadores del monte que habían perdido la vida en ellos. En 1924 es destinado a la Jefatura de Distrito de Jaén y en 1928 vuelve a cambiar de destino llegando a Madrid donde ocupó altos cargos tanto en la Administración Forestal del Estado como en la Escuela de Ingenieros de Montes.
1936: EL AÑO QUE LO CAMBIÓ TODO
El estallido de la Guerra Civil destrozó, literalmente, la vida personal de Enrique Mackay. A sus sesenta años, ostentaba el cargo de Inspector General del Consejo Forestal del Estado y de director de la Escuela de Montes. Su prestigio no evitó el asesinato de algunos de sus familiares de Cazorla, el saqueo y ocupación de su residencia con la quema de su biblioteca, el bombardeo de la Escuela de Montes... En 1937, es destinado forzosamente a Valencia tras varios registros en su domicilio madrileño y su hija Manuela —muy enferma— y una sobrina son encarceladas al ser acusadas de “derechistas” y de pertenecer a Acción Popular. En 1938, tres de sus hijas se exilian.
“No es el mío un caso excepcional, pues raros serán los hombres de juicio sano e independiente que, habitando en zona roja, no hayan sufrido en sí mismos o en sus familiares persecuciones parecidas o aún más graves”, reza en el expediente de depuración co-social que Enrique Mackay declara el 1 de abril de 1939 como funcionario. Ese mismo día había logrado regresar a Madrid.
Un mes y dos días después, una Orden Ministerial le encarga a Mackay una Comisión Especial, en su condición de Inspector General, en los montes de la provincia de Jaén. Esto representa no sólo volver a su hogar, sino también volver a recuperar las sierras que tan bien conoce del abandono sufrido en los últimos siete años. Varios viajes y grandes esfuerzos entre 1939 y 1940 lograron que el horizonte de Cazorla, Segura y Las Villas sea hoy lo que es, pero las fuertes bases ya estaban implantadas desde su llegada, cuarenta años atrás. Mackay se encuentra con su añorada sierra y con todos sus problemas tras la Guerra: recursos, viveros, roturaciones y pastoreo. Comienza el trabajo: planes de mejora urgentes, estudios de valoración del metro cúbico de madera, prepara arrastraderos, obras en caminos... No en vano, la madera de estos montes sigue siendo el mayor ingreso del Patrimonio Forestal del Estado.
Concesiones a compañías ferroviarias y la Ley del 4 de Junio de 1940 le otorgan a Mackay un ascenso profesional, pero tras visitar las zonas forestales donde se habían autorizado las talas masivas y sin criterio selvícola, se da cuenta del gravísimo daño causado a los montes, en ese momento, y la deforestación que supondría en el futuro. Tras unos meses y varios informes, Mackay es retirado de sus cargos y, por tanto de ingeniero de montes del Estado, en el mes de noviembre. Sus quejas y luchas por proteger la sierra de Cazorla, Segura y las Villas desde los despachos o a pie de monte tuvieron su consecuencia directa: Mackay fue inmediatamente represaliado como desafecto al Régimen Franquista, con falsos motivos. Pocos meses después fallece su hija Manuela con 27 años de edad tras agravar la enfermedad su permanencia en la cárcel.
Mackay siguió luchando para ser readmitido como ingeniero de montes del Estado. Llegando a juicio y a pesar de lograr la readmisión, quienes manejaban la política forestal del momento alegaron no encontrar vacante para él. “Desde su readmisión, sólo alguna comisión, estudio y propuesta le fueron encargados hasta que en enero del 46, con 70 años, le notificaron su jubilación «con la categoría de Presidente del Consejo Superior de Montes». Ahora ya no importaba” (‘Don Enrique Mackay y la Política Forestal de la Sierra de Cazorla’, de María Rosa García, Elucidario. No 8 de Septiembre de 2009). Desde su jubilación y a pesar de todo, escribió varios tratados indispensables hoy para entender la conservación de los montes. Falleció en su amada Cazorla en 1974.
“Deja el coche en la carretera y trepa alentado a lo más alto de un voladero, siéntate arriba, respira hondo aquel aire purísimo, y tiende luego la mirada..., aquí está la obra de la naturaleza. Y tú lector, podrás estar seguro de que aquel paisaje, a aquella hora precisa y con las mismas luces y sombras tan sólo por ti ha sido y será gozado”. «Turismo en la Sierra de Cazorla», Anuario del Adelantamiento de Cazorla no 2, 1953 (E. Mackay).
un poco de la vida de enrique mackay monteverde amante de la sierra de cazorla y valedor de todos los senderos de manposteria de cazorla segura y las villas:
informacion adquirida de la contradejaen
El protector de las sierras de Cazorla
Paseamos por las altas sierras de Cazorla y presumimos de su belleza sin pensar que hubo un hombre que abrazó de tal modo cada árbol, arbusto y flor que, de no haberlo hecho, nuestros pasos caminarían quizá por un desértico paraje. Tener amigos como Miguel Ángel de la Rosa (compañero de nuestros inicios periodísticos y aquí continuamos, compartiendo espacios en Lacontradejaén es un lujo difícil de igualar y una breve conversación ilumina el camino hacia Cazorla: “¿Conoces a Enrique Mackay Monteverde?”. ¡Gracias compañero por otro descubrimiento más!
Tinerfeño de nacimiento en el año 1876, se licenció en Ingeniería de Montes en la Escuela de El Escorial y diez años después fue destinado a Cazorla, donde permaneció al frente hasta 1924. A su llegada, Mackay se encontró con una sierra convertida en provincia marítima un siglo antes para abastecer a la Armada de madera y la corta sin control había hecho desaparecer, prácticamente, todos sus robles. En pocos años, aquel ingeniero de montes logró, no sólo la repoblación y cuidado de este espacio natural, sino también aplicar políticas sociales como, por ejemplo, facilitar ayudas a familias de trabajadores del monte que habían perdido la vida en ellos. En 1924 es destinado a la Jefatura de Distrito de Jaén y en 1928 vuelve a cambiar de destino llegando a Madrid donde ocupó altos cargos tanto en la Administración Forestal del Estado como en la Escuela de Ingenieros de Montes.
1936: EL AÑO QUE LO CAMBIÓ TODO
El estallido de la Guerra Civil destrozó, literalmente, la vida personal de Enrique Mackay. A sus sesenta años, ostentaba el cargo de Inspector General del Consejo Forestal del Estado y de director de la Escuela de Montes. Su prestigio no evitó el asesinato de algunos de sus familiares de Cazorla, el saqueo y ocupación de su residencia con la quema de su biblioteca, el bombardeo de la Escuela de Montes... En 1937, es destinado forzosamente a Valencia tras varios registros en su domicilio madrileño y su hija Manuela —muy enferma— y una sobrina son encarceladas al ser acusadas de “derechistas” y de pertenecer a Acción Popular. En 1938, tres de sus hijas se exilian.
“No es el mío un caso excepcional, pues raros serán los hombres de juicio sano e independiente que, habitando en zona roja, no hayan sufrido en sí mismos o en sus familiares persecuciones parecidas o aún más graves”, reza en el expediente de depuración co-social que Enrique Mackay declara el 1 de abril de 1939 como funcionario. Ese mismo día había logrado regresar a Madrid.
Un mes y dos días después, una Orden Ministerial le encarga a Mackay una Comisión Especial, en su condición de Inspector General, en los montes de la provincia de Jaén. Esto representa no sólo volver a su hogar, sino también volver a recuperar las sierras que tan bien conoce del abandono sufrido en los últimos siete años. Varios viajes y grandes esfuerzos entre 1939 y 1940 lograron que el horizonte de Cazorla, Segura y Las Villas sea hoy lo que es, pero las fuertes bases ya estaban implantadas desde su llegada, cuarenta años atrás. Mackay se encuentra con su añorada sierra y con todos sus problemas tras la Guerra: recursos, viveros, roturaciones y pastoreo. Comienza el trabajo: planes de mejora urgentes, estudios de valoración del metro cúbico de madera, prepara arrastraderos, obras en caminos... No en vano, la madera de estos montes sigue siendo el mayor ingreso del Patrimonio Forestal del Estado.
Concesiones a compañías ferroviarias y la Ley del 4 de Junio de 1940 le otorgan a Mackay un ascenso profesional, pero tras visitar las zonas forestales donde se habían autorizado las talas masivas y sin criterio selvícola, se da cuenta del gravísimo daño causado a los montes, en ese momento, y la deforestación que supondría en el futuro. Tras unos meses y varios informes, Mackay es retirado de sus cargos y, por tanto de ingeniero de montes del Estado, en el mes de noviembre. Sus quejas y luchas por proteger la sierra de Cazorla, Segura y las Villas desde los despachos o a pie de monte tuvieron su consecuencia directa: Mackay fue inmediatamente represaliado como desafecto al Régimen Franquista, con falsos motivos. Pocos meses después fallece su hija Manuela con 27 años de edad tras agravar la enfermedad su permanencia en la cárcel.
Mackay siguió luchando para ser readmitido como ingeniero de montes del Estado. Llegando a juicio y a pesar de lograr la readmisión, quienes manejaban la política forestal del momento alegaron no encontrar vacante para él. “Desde su readmisión, sólo alguna comisión, estudio y propuesta le fueron encargados hasta que en enero del 46, con 70 años, le notificaron su jubilación «con la categoría de Presidente del Consejo Superior de Montes». Ahora ya no importaba” (‘Don Enrique Mackay y la Política Forestal de la Sierra de Cazorla’, de María Rosa García, Elucidario. No 8 de Septiembre de 2009). Desde su jubilación y a pesar de todo, escribió varios tratados indispensables hoy para entender la conservación de los montes. Falleció en su amada Cazorla en 1974.
“Deja el coche en la carretera y trepa alentado a lo más alto de un voladero, siéntate arriba, respira hondo aquel aire purísimo, y tiende luego la mirada..., aquí está la obra de la naturaleza. Y tú lector, podrás estar seguro de que aquel paisaje, a aquella hora precisa y con las mismas luces y sombras tan sólo por ti ha sido y será gozado”. «Turismo en la Sierra de Cazorla», Anuario del Adelantamiento de Cazorla no 2, 1953 (E. Mackay).
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Information
Easy to follow
Scenery
Difficult
ESE LOBO LANZADERA Y SUS FANTÁSTICOS DIÁLOGOS DE LAS RUTA COMO SIEMPRE UN GRAN ARGUMENTO Y LAS FOTOS DE LUJO Y EL VÍDEO PA CUANDO COMO LA CANCIÓN .OK JJJJJJJ
ESE MAQUINAAAAAA
HAAAAAAAAAAAUUUUUUUUUUUUUUUU
YA TIENES UN SEGUIDOR DE LUJO Y EL GRUPO SEGURO Q ESTARÁ A LA ESPERA DE EL VIDEO.
BUENO NO TIENE PALABRAS DE AGRADECIMIENTO TU BUEN HACER Y TU COMPAÑERISMO EN LA SIERRA YO ESTOY MUY AGRADECIDO DE CONOCERTE Y DE Q COMPARTAS AVENTURAS Y PASEOS POR DONDE MAS NOS GUSTA Q ES LA SIERRA Y SUS SENDA O CAMINOS .OK
PERO TAMBIÉN TU SENTIDO COMÚN TU HUMILDAD PARA CON EL GRUPO DE LOBOS DE LA SIERRA DE LINARES.OK
BUENO NOS VEMOS EN LA SIEGUIENTEEEEE.OK
ERES LO MAS DE LO MASSS Y TU LO SABES Y NO TE LO RECONOCESSSS.
PARA MI ESTA RUTA ES UNA MAS PARA EL RECUERDO.OK
GRACIAS LOBO LANZADERA POR SER MI AMIGO Y UN GRAN COMPAÑERO.OK
Muchas gracias por tus palabras que dichas por un maestro como tu me llenan de orgullo y motivacion para seguir aprendiendo del mejor y haciendo lo que mas nos gusta patearnos la sierra
Una ruta estupenda, digna de dos grandes como sois Juanma y Perico, una vistas de lujo, tened cuidado por vuestra sierra, espero veros en alguna menos peligrosa pero igual de hermosa!!😍
Ruta cuidadosamente descrita y muy interesante,con la narracion historica de Enrique Mackay- gran valedor de la zona- muy conmovedora. Espero algun dia poder realizar.
muchas gracias rogelio por tus palabras y tu valoracion . la verdad que si la haces vas a disfrutar de los paisajes que envuelven esta zona de la sierra de segura un saludo.
Ese lobo vaya pedazo de ruta, y vaya pedazo de comentario que te as marcao, si señor.
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Information
Easy to follow
Scenery
Difficult
Muy buena ruta
Algo complicada pero con tus comentarios y fotos se disfruta muchoooo
Gracias
Un saludo
Muchas por vuestras valoraciones compañeros nos vemos en la montaña un abrazo lobuno auuuuu
Lobo lanzadera q buenas ruta estáis haciendo y q envidia me da el no poder acompañaros con las ganas q tengo y con los compromisos q tengo me es muy difícil cuadrar las salidas con el grupo.
Bueno ya tendré mas tiempo libre y podre salir y disfrutar de la sierra con el grupo de lobo.
Un ok para los dos lobunos.haaaaauuuu