Puntarrón, Mamellones y Peña del Águila (Sierra la Cañisola - Murcia)

9/10/2019
Realizada en solitario

Mi idea era seguir una ruta de Malpaso que sube al Puntarrón por su cara norte y desciende por la sur, intentando abarcar lo máximo posible de esta interesante zona, pero llegado al punto de inicio, observo algunos carteles que alertan de posibles desprendimientos consecuencia de las recientes lluvias, por otro lado, tampoco veo la necesidad de hacer dos kilómetros por el borde de la carretera del Puerto del Garruchal (RM-F19), con mucho tráfico y sin arcenes. No es cuestión de buscar la mala suerte, así que cambio ligeramente el recorrido, subiendo y bajando el Puntarrón por su cara sur, sin llegar a pisar en ningún momento la RM-F19.

El territorio que vamos a recorrer es especialmente interesante para conocer la evolución de la cuenca Baja del Segura y del Mediterráneo durante los últimos 12 millones de años, en los cuales ha experimentado una compleja y repetitiva sucesión de acontecimientos geológicos, con avances y retrocesos de la línea de costa.

HISTORIA DE LA ZONA (Según informe publicado por la CARM)

Los relieves recorridos forman parte de la Placa de Alborán, la cual colisionó con la Placa Ibérica hace unos 15 millones de años. En esta colisión está el origen de las alineaciones montañosas más importantes, pero desde entonces los relieves han experimentado sucesivas elevaciones, procesos erosivos y hundimientos, relacionados con los ascensos y descensos del nivel del Mar Mediterráneo, también la colmatación de la cuenca marina por sedimentos.

Con la colisión de la Placa del Alborán con la Ibérica, surge la Sierra de Carrascoy como un gran relieve qkue la erosión comenzó a desbastar, originando su falda de abanicos deltáico, en los que sedimentaron cantos de los materiales alplujárrides y maláguides.

Posteriormente, el nivel del mar comenzó a subir a la misma vez que la Sierra se hundía, pasando su falda a formar parte del talud marino y sobre los abanicos sedimentaron avalanchas de arenas provenientes de zonas más someras, que alternaban con margas depositadas en los fondos marinos.

Lentamente la cuenca se fue rellenando de sedimentos a la vez que su lecho unas veces se hundía y otras ascendía, descompasadamente con el nivel del mar. Así hace unos 8-9 millones de años, la zona de los Mamellones pasó de ser un fondo marino profundo a una plataforma marina relativamente somera, para más tarde volver a ser un medio marino profundo.

Pero tras la abertura del Estrecho de Gibraltar (hace unos 5 millones de años), el mar volvió a invadir lo que hoy son las estribaciones de la falda oriental de la Sierra de los Villares, originando una costa poco profunda. Tras este episodio, los relieves fueron comenzaron a elevarse paulatinamente hasta nuestros días y el mar a retirarse hacia el Este, a la vez que la erosión remodelaba el espectacular paisaje de esta zona regional.

Frente al inicio del recorrido observamos una evidente falla que pone en contacto conglomerados rojizos de hace 12 millones de años, con una margas claras más modernas. Los primeros representan sedimentos continentales de abanicos aluviales, mientras que las segundas son depósitos marinos profundos.

Luego transitamos por margas y areniscas turbídicas que representan fondos marinos profundos. Al llegar a la zona de los Mamellones, los escarpes rocosos son los restos de un ambiente marino somero (plataforma). En las areniscas de plataforma se localizan restos de bivalvos marinos, ostras y pectínidos, aunque lo más llamativo son las formas erosivas formadas por la interacción de fuerzas tectónicas, organismos pasados y actuales, erosión por aguas de escorrentía y meteorización, creando un paisaje realmente sorprendente, tal como hemos recogido en las fotografías que incorporamos.

El curiosos nombre de Los Mamellones, provienen de que la palabra mamellón se utiliza en micología para designar al mamelón o pezón en el que acaba el sombrero de algunas setas y uno de los significados de mamelón, es el de colina en forma de teta o pezón.

SOBRE LA RUTA

Aunque la mayoría de descripciones que he leído la catalogan de moderada, yo le voy a poner el calificativo de DIFÍCIL. No es que sea técnicamente compleja, pero no es la ruta adecuada para venir a probar. Aquí hay que venir con cierta experiencia, primero las Murallas de King Kong, el Garruchal y luego venir a los Mamellones. Es una ruta muy atractiva y diferente, ciertamente excitante pues la geología te va abriendo camino cuando crees que no podrás continuar. Entre los continuos repechos y el calor, el trazado es físicamente exigente.

Son cinco mamellones, el quinto con nombre propio (Pico del Águila, con 449 metros) y luego un poco separada La Peña del Águila (396), a la que es importante llegar y alucinar con el paisaje que la rodea. Tiene una plataforma donde se puede descansar y reponer fuerzas.

Regresamos por el entorno de Cañada Grande, sin tener que volver a subir rumbo al Pico del Águila, sino que en el mismo collado sale una discreta senda que podemos seguir con relativa comodidad, por supuesto evitando días en los que haya llovido que seguro está encharcada y se vuelve peligrosa. Felicito a MALPASO por haber localizado esta sutil vía de escape, ideal si has llegado hasta la Peña del Águila. Muy importante seguir el track con atención en este tramo.