Valdevacas y el valle del Río Santa Águeda

1.- FICHA TÉCNICA:

Distancia total: 11,42 km
Fecha de realización: 19/Noviembre/2020
Fecha de subida: 6/Diciembre/2020
Dificultad: Fácil
Índice IBP: 43 HKG
Tiempo total: 3:09:00 h
Tiempo en movimiento: 3:04;00 h
Tiempo parado: 00:05:00 h
Altitud al inicio/al final: 964 m/964 m
Altitud mínima/máxima:964 m/ 1109 m
Señalización: No hay
Posible con BTT: Si, pero con algunos tramos con dificultad.

2.- ACCESO AL INICIO DE LA RUTA

El comienzo de la ruta está en el núcleo urbano del pueblo de Valdevacas. Para llegar hasta él, tenemos que utilizar la carretera SG–V–2312, con dos posibles opciones de acceso: por el pueblo de El Cubillo o por el pueblo de El Guijar. En ambos casos es la misma carretera la que nos va a permitir llegar hasta la Plaza de la Fuente y del monumento "Puertas de la Ausencia", bien desde el sur o bien desde el norte respectivamente, y donde podremos dejar aparcado nuestro vehículo.
Las coordenadas del aparcamiento en sistema sexagesimal o GSM, son 41° 08' 12,2” N y 3° 54' 42,8” W. En sistema decimal o GD, son 41.136716, -3.911897.
Otra alternativa que tenemos para llegar al punto de inicio, es la de utilizar la función “¿Como llegar al punto de inicio?” que tiene Wikiloc a nuestra disposición. Al abrir la ruta que queremos hacer, justo a continuación de las características técnicas de la misma (distancia, dificultad, fecha, etc.) aparece dentro de un recuadro la mencionada pregunta. Al picar en dicha opción, desde tu ubicación, estés donde estés, aparecerá en Google Maps, el trayecto que se ha de realizar para acceder al punto de partida de la ruta.

3.- INFORMACION GENERAL SOBRE LA RUTA

3.1.- CARACTERISTICAS GENERALES:

Es una bonita, interesante y poco transitada ruta circular. Se puede hacer tranquilamente en una mañana o en una tarde, pero si nos lo tomamos con calma para disfrutar del caminar por el sabinar, por el valle fluvial, así como del paisaje, y le echamos algo más que medio día, vamos a sacarle más jugo a la ruta.
Tiene dos partes claramente definidas y con diferente interés desde el punto de vista paisajístico. La primera parte del circuito, de unos 5 km, entre Valdevacas y el borde del valle del río Santa Águeda (en la zona de la “caseta de los guardias”), discurre a través de un buen sabinar. Nos vamos a mover por una lastra caliza, por encima de los 1050 metros de altitud sobre el nivel del mar, cubierta por un sabinar con zonas densas y zonas “olivadas” (= podadas las ramas bajas de las sabinas) que delimitan una ancha banda sin árboles y con afloramientos rocosos, hasta que llegamos al borde norte de la lastra. Tiene vallas de alambre de púas durante cierta parte del recorrido. No hay opción de “perderse” al caminar por la lastra, pues solo hay que ir siguiendo la ancha pista entre sabinas con una ligera tendencia a girar a la izquierda y en suave ascenso. Una vez en el punto más al norte del borde de la lastra, por una senda la cruzaremos de norte a sur a través del sabinar hasta el borde del valle del río Santa Águeda.
La segunda parte del recorrido, de unos 4,5 km, es la bajada al fondo del valle del río Santa Águeda y el remontar dicho valle hasta la proximidad de El Cubillo. Llegados al final del valle, solo nos queda el volver a cruzar un pequeño tramo del sabinar (de unos 2 km) en nuestro camino hacia Valdevacas.
Esta parte de la ruta tampoco presenta muchas complicaciones a la hora de caminar en cuanto a orientación y elección de los caminos por los que progresar, pues varios de los elementos orográficos existentes (cauce del río y desembocadura del río Sordillo) facilitan siempre el encontrar por donde hay que caminar.
Se puede realizar en cualquier época del año. Pero teniendo presente por donde vamos a caminar, paisajísticamente hablando, el tipo de caminos que vamos a seguir y el clima de la provincia de Segovia, a mi juicio el momento idóneo para hacerla son los meses de mayo y junio, cuando la primavera está en todo su esplendor, con la floración en su apogeo, lo que le da un añadido de color al entorno por el que vamos a transitar.
En el verano, como la zona por la que hay que caminar es muy seca (salvo el camino a orillas del río Santa Águeda), sería aconsejable madrugar para hacerlo antes de que el calor comience a apretar.
El otoño es también un buen momento para hacer esta ruta, pues dada las numerosas plantaciones de chopos que hay en el valle del río Santa Águeda, el amarillo otoñal de sus copas, le dará un toque especial de color al paisaje.
Se puede decir que no hay sombra durante todo el recorrido (salvo en el fondo del valle del río Santa Águeda), por lo que es aconsejable protección solar y un sombrero o gorra (aunque esto es aplicable no solo al verano). No hay fuente de agua tratada en todo el recorrido, por lo que es aconsejable el llevarla en cantidad suficiente.
En nuestro caso, hicimos este recorrido el 19/noviembre/2020, en un bonito y fresco día de otoño, perfecto para caminar.
La ruta no está balizada. A pesar de ello, no presenta muchas complicaciones a la hora de caminar en cuanto a orientación y elección de los caminos por los que progresar. Siempre hay algún elemento orográfico que nos va a permitir seguir la dirección adecuada, supuesto que nos equivoquemos a la hora de elegir por donde desplazarnos.
Físicamente no es exigente, salvo algún punto muy localizado, pero de muy corta longitud. Teniendo en cuenta todo lo expuesto anteriormente, las aceptables pistas y caminos por las que mayoritariamente se va a caminar y la poca dificultad en general de la ruta, se puede catalogar este recorrido como fácil (el índice IBP es de 43).
Todo el circuito va a tener un ambiente solitario, siendo raro el encontrarse con alguna persona, tanto en la lastra y el sabinar como en el valle del río Santa Águeda.

3.2.- GEOLOGÍA DE LA ZONA

El terreno por el que vamos a caminar está formado por rocas calcáreas, fundamentalmente calizas y dolomías, en las que arroyos estacionales y el río Santa Águeda, han excavado interesantes vallejos y pequeños cañones fluviales, tan frecuentes por otra parte en el piedemonte calcáreo segoviano y que sirven como refugio para innumerables especies animales y una abundante vegetación.
El valle del río Santa Águeda, es una zona de contacto entre rocas calcáreas y rocas metamórficas, lo que se percibe con nitidez. Se va a dar el hecho de que en la ladera hidrográfica izquierda vamos a ver rocas calcáreas, mientras que en la derecha vamos a ver rocas metamórficas, gneis en este caso. A poco que nos fijemos, veremos que hasta el color de ambas laderas es distinto, más claro la ladera hidrográfica izquierda y más oscura la ladera hidrográfica derecha. Según caminamos por la ladera derecha del valle, veremos afloramientos de grandes rocas de gneis, al igual que en la unión del valle del río Sordillo con el valle del río Santa Águeda.
En la zona alta del valle fluvial, en algunos puntos vamos a ver afloramientos de arcillas y arenas silíceas de colores (facies Utrillas), depositadas en la zona hace unos 100 millones de años, sobre las cuales están las calizas cretácicas de la lastra.

3.3.- VEGETACIÓN DE LA ZONA

La cubierta vegetal arbórea va a estar formada por una buena masa de sabinas, tanto en toda la zona de lastra, como en sus laderas. En la zona de la lastra, cruzaremos un sabinar con un buen estado de conservación y regeneración, que en algunas zonas forma un bosque denso.
En la ladera derecha del valle fluvial, con suelos metamórficos y con orientación norte, encontraremos encinas y pinos, con algún ejemplar de enebro. En la ladera izquierda del valle fluvial, con suelos calcáreos y con orientación sur, encontraremos sabinas y quejigos, con algún ejemplar de enebro.
En el fondo del valle del río Santa Águeda, veremos una buena representación de vegetación riparia o de galería de río, en la que abundan fresnos, sauces y plantaciones de chopos.
El sotobosque está formado por jaras, plantas aromáticas (espliego, tomillos, salvia, ruda, etc.), renuevos de sabinas y enebros, así como una buena muestra de plantas espinales, en las que zarzas, espino negro y escaramujos son los más abundantes. En algunos puntos, sobre todo en la orilla izquierda, esta abundante cubierta vegetal arbustiva hace que algunas zonas sean casi intransitables.
Y sobre nuestras cabezas, son frecuentes los planeos de los buitres leonados, que utilizan los paredones calizos de Peñacorba como posaderos.

4.- ITINERARIO

Dejamos el vehículo en la Plaza de la Fuente y del monumento "Puertas de la Ausencia" de Valdevacas, punto de partida y punto final de la ruta.
Salimos de la plaza hacia la izquierda, por la carretera que cruza el pueblo, con dirección a El Cubillo. Giramos por la segunda calle a la izquierda, por la que saldremos del pueblo y comenzaremos a ascender hacia la lastra. El antiguo camino carretero por el que vamos ascendiendo, se transformará en una pista de firme irregular, a medida que vamos entrando en el sabinar.
Durante unos 2,5 km, vamos a caminar por un sabinar en buen estado, tanto de conservación como de regeneración, salpicado de enebros, jaras, espino negro, así como de diversas especies de plantas aromáticas. La ancha pista está claramente marcada, y hacia la mitad del recorrido, girará hacia la izquierda, en suave ascenso.
Finalmente, llegaremos al borde norte de la lastra, desde donde veremos una buena panorámica de la campiña cerealista y del valle del río Cega. En esta zona, hay una bifurcación: el camino que va hacia la izquierda, desciende hacia el pueblo de El Guijar y a la zona de cultivos cerealistas, y el camino que va hacia la derecha, que es el que debemos seguir, se interna de nuevo en el sabinar, por una senda bien marcada.
Esta senda, una parte del antiguo camino de El Guijar a Arahuetes, durante unos 2,5 km cruza transversalmente el sabinar, hasta que llegamos al borde norte del valle del río Santa Águeda, en el que hay un chozo de piedra caliza en no muy buen estado de conservación. Es la que se denominaba la “caseta de los guardias” o caseta de la guardia civil.
En este punto, merece la pena sentarse un rato para observar la espléndida vista del valle fluvial con el río unos 100 m por debajo de nosotros, con los promontorios denominados Los Castillejos (1056 m y 1044 m) un poco a nuestra izquierda, el pueblo de Arahuetes en la orilla opuesta del valle y con la Sierra de Guadarrama al fondo.
Se baja la ladera norte del valle por un camino bien marcado con algún zigzag durante unos 0,7 km, a través de un bosque mixto de sabinas, enebros y quejigos principalmente, que nos va a llevar hasta el río Santa Águeda., que cruzaremos por un puente de lajas, el puente de Santa Águeda.
Hacia la derecha sale una pequeña senda, paralela en su inicio al río, por la que caminaremos alrededor de 0,6 km. Esta senda, poco a poco comienza a alejarse del río y a trepar por la ladera sur del valle.
Continuaremos subiendo por la senda, que a veces durante unos metros se intuye más que se ve, hasta que desembocamos en una ancha pista de tierra (en las proximidades de unas grandes rocas de gneis), que baja desde el pueblo de Arahuetes hasta el fondo del valle del río Santa Águeda.
Caminaremos por dicha pista unos 0,9 km, entre encinas y pinos mayoritariamente, hasta llegar de nuevo a la orilla del río.
Avanzando por dicho camino, llegaremos a otro puente de lajas, el puente Segurilla, que cruzaremos.
A la vera del río, hay una ancha pista herbosa que remonta el valle, entre la abundante y clásica vegetación de galería de río a un lado y paredes de piedra, semiderruidas a veces, de fincas. Algunas de ellas tienen plantaciones de chopos.
A medida que vamos remontando el valle, la pista se va perdiendo anchura hasta que se transforma poco a poco en una senda. A la altura del valle del río Sordillo, afluente del Santa Águeda por su margen derecha y cuya silueta en V veremos fácilmente, la pista ya es una senda que va a mantener un claro, continuo y suave ascenso, hasta la cabecera del valle.
Llegaremos a un punto en que el ruido de una cascada, nos indicará uno de los aportes de agua del río Santa Águeda, el nacimiento de dicho río. Para evitar el barrizal que hay, la zona con agua de la surgencia y la tupida vegetación que dificulta el paso, antes de llegar a ella, subiremos como unos 20 metros en vertical la ladera de nuestra derecha, hasta que demos con una clara senda que pasa por encima la surgencia. Desde que cruzamos el puente Segurilla, hasta aquí, habremos caminado alrededor de 1 km.
Durante otros 1,3 km aproximadamente, progresaremos por dicha senda en suave ascenso. Veremos paredes semiderruidas, zonas de arcillas y arenas silíceas de colores (facies Utrillas), así como fincas abandonadas desde hace muchos años e invadidas de jaras y vegetación espinal. Las laderas y fondo del valle están cubiertas por pinos, encinas, sabinas y enebros, así como zonas cubiertas de jaras y espino negro.
Finalmente, la senda desemboca en una ancha y blanca pista agrícola. Giraremos hacia nuestra derecha, en ascenso, y volveremos a caminar entre sabinas, ya otra vez en la zona de lastra, Por ella vamos a progresar durante unos 1,7 km.
Llegaremos a una bifurcación, donde tomaremos la pista que sigue de frente. Al cabo de unos cientos de metros, de nuevo otra bifurcación, en la que continuaremos también de frente. Puede que encontremos “cortando” el camino, una cinta blanca para el ganado. Si es el caso, saltarla y seguir de frente.
A medida que avanzamos, la pista se va transformará en una senda bien marcada, que ya en descenso nos llevará hasta la carretera de El Cubillo a Valdevacas.
Llegados a la carretera, la SG-V-2312, en las proximidades de un edificio sin techumbre, giramos a la derecha y veremos a unos 300 m las casas de Valdevacas, donde habíamos dejado aparcado el vehículo.

Todo aquel que utilice total o parcialmente la ruta aquí descrita, así como su correspondiente track para GPS y la información complementaria que lo acompaña, lo hace bajo su responsabilidad. Por los riesgos que toda actividad en la naturaleza conlleva, queda igualmente bajo la responsabilidad de quien lo utilice, el tomar las medidas de seguridad adecuadas para realizar el itinerario descrito, que va a depender de las condiciones meteorológicas, del estado y preparación física de quien lo vaya a realizar y del grado de conocimientos técnicos del que use dicho track. La información que has leído, es de carácter informativo y orientativo.