Muíños de Samieira. Fervenzas do Pereiro.

La ruta dos muíños de Samieira es un recorrido por la historia del río Freiría en la que se puede apreciar un conjunto etnográfico formado por más de veinte muíños, siete de ellos tienen su origen en el siglo XVI y algunos fueron restaurados. A día de hoy, se encuentran bien señalizados.

La plaza Romay Besada será el punto de inicio de esta ruta cuyo recorrido prolongamos acercándonos hasta el Rego do Pereiro y sus hermosas fervenzas. Desde aquí vamos hacia la costa con la intención de dejar los muíños para el final, aunque nada más comenzar podemos ver el único que nos quedaría por este lado, el do Cubo de Abaixo.
Siguiendo el río Freiría llegamos a la carretera y luego de unos metros nos desviamos hacia la praia do Laño para continuar por el paseo litoral.
Disfrutando las hermosas vistas de la ría de Pontevedra y la Isla de Tambo llegamos a la praia do Covelo. Desde aquí iremos hacia el interior por carreteras secundarias hasta el lugar de Chancelas, donde, tras pasar su cruceiro abandonamos el asfalto y comenzamos un suave ascenso que nos lleva hasta el miradoiro da Tartaruga.
En este punto se encuentran los petroglifos "Pedra da Tartaruga", el lugar estaba con bastante maleza en el momento que realizamos la ruta y las vistas desde el mirador eran casi inexistentes debido a la cantidad de eucaliptos. Lo mismo que pasa en los siguientes miradoiros como el do Campanario y el do Loureiro, desde los cuales apenas se disfruta de la panorámica por el mismo motivo. Una pena.
Seguimos camino y tras pasar una área de recreo atravesamos los lugares de A Armada, O Esperón y O Pereiro. Al llegar a la fuente en A Banda do Río abandonamos el asfalto y continuamos por el sendero que bordea el rego do Pereiro.
El camino se torna en un hermoso bosque de ribeira por el que llegamos primero a la Fervenza da Pindilleira que cae unos 7 metros, y un poco más adelante la Fervenza da Freixa Alta que cae desde una altura de unos 10 metros y tiene una poza que invita al baño, aunque acceder a ella no parecía nada fácil.
Más adelante cruzamos A Regueira Alta que baja abriéndose paso dejando otra pequeña fervenza, la da Cachada da Renda.
En ascenso pasamos junto al lugar de Vilar y luego de atravesar un monte de eucaliptos llegamos al punto más alto de la ruta, que coincide con la Canceira municipal de Poio.
Lo que resta de ruta será en descenso y a la altura de Foxo das Vacas volvemos a encontrarnos con el río Freiría y, ahora sí, con todos los muíños que pueblan su orilla.
El primero es el de Arriba al que le siguen Santiaguiño, Carballos, Cabanales, Campelo, Xirome, da Ponte, Novo, Catalina, Correa, Teselán, Cabezudo... y varios más hasta llegar al último de ellos que fue el primero que nosotros vimos, el muíño do Cubo de Abaixo.
El descenso final es un bello paseo en el que además de los muíños, vamos disfrutando de los pequeños saltos, presas, canales, un lavadero y áreas recreativas que se encuentran junto a las aguas del Freiría.

Calificamos la ruta como fácil ya que el desnivel es poco y suave y se lleva bien.
Como siempre dependerá de nuestra preparación.
Quizá habría que prestar atención a posibles resbalones en días lluviosos, lo digo sin mucha seguridad ya que nosotros lo hicimos con tiempo seco.
Quien solo quiera realizar la ruta dos muíños puede hacerlo sin pérdida, sería un ida y vuelta de nuestro trayecto final, unos 5,5 kms, partiendo de la plaza. Aunque las fervenzas do Pereiro merecen el esfuerzo de acercarse a ellas.