Samitier - Castillo y ermita de Samitier - Ligüerre de Cinca - Congosto de Entremón (Circular)

Salimos de Samitier, justo donde esta el cartel indicador. Se trata de una subida fácil, por pista, de una longitud de 2,2 km. El conjunto se encuentra en la cima del denominado “Tozal de Samitier”, dominando un tramo estrecho del río Cinca llamado Congosto del Entremón. También hay una amplia panorámica de todo el embalse de Mediano y del Grado.
A medio camino encontramos la ermita gótica de Nª Sª de Waldesca, que data del S.XVI. También encontramos una bifurcación de pistas hacia Ligüerre de Cinca, que nos queda a unos 3,3 km. Y que cogeremos luego para hacer la circular.
El Castillo, tiene planta hexagonal imperfecta, con dos lados paralelos más largos que el resto. Referente a la Ermita de San Emeterio y San Celedonio, se trata de una iglesia de estilo románico construida en el siglo XI con fines religiosos, pero formando una misma unidad defensiva junto con el castillo.
Ruta fácil y recomendable debido a les magníficas vistas desde este privilegiado mirador, así como del valor arquitectónico del conjunto, visitable en su exterior, y también en su interior. Hasta aquí la ruta la clasifico como fácil y familiar.
Después de visitar el conjunto, volvemos por la pista hasta el cruce que marca Liguerre de Cinca. Enseguida se llega a un desvió, que nos permite visitar La Torre del Moro ( se veía enfrente del Castillo). Yo acorto la subida monte a través. Después retrocedo hasta el segundo cruce y continuamos dirección Liguerre de Cinca por pista.
Llega un momento que salimos, por la izquierda, a un camino que nos baja hacia Liguerre. Ese camino desemboca en un campo que atravesamos dirección a la carretera general, la cual cruzamos y por carretera llegamos a Liguerre de Cinca. En Liguerre hay fuente para repostar agua.
Un indicador situado próximo a la zona de aparcamiento indica la dirección correcta. El camino coincide con el GR1 (sendero histórico), y rotulado y aparecen los nombres de Lumo Muro y Palo. Recorro un sendero con una primera parte de bajada, que termina aproximadamente al cruzar un portal metálico. Entonces sigue una parte llana donde también se deberá cruzar un segundo portal metálico y sigue con un tramo de subida hasta llegar a la carretera asfaltada.. Giramos a la derecha y vamos por el arcén de la carretera, hasta cruzar el Cinca a través de un puente. Pasado el puente encontramos una pequeña zona de aparcamiento y un cartel informativo sobre el Desfiladero del Entremón. Seguimos la carretera poco más de un centenar de metros, ya nuestra izquierda comienza la ruta por el desfiladero. Unas escaleras y un cartel nos sirven de indicador. Vamos ganando altura de forma progresiva pero suave y en unos 12 minutos nos situamos ante la "cueva de las palomas". A lo largo de la ruta encontramos varios carteles sobre fauna y sobre los diferentes punto singulares por donde vamos pasando. Luego pasamos por el punto más espectacular y peligroso: el paso de media caña. Un pequeño tramo excavado en la roca para poder seguir el sendero. En un momento, llegamos al paso de "las patas". En esta ocasión se trata de una zona donde el camino es inexistente y para cruzar y seguir avanzando se debe hacer a través de cinco plataformas para poner la huella ayudándonos de unos asideros. La verdad es que no tiene ninguna dificultad. A partir de aquí el camino se vuelve agradable y transita por un bosque. Caminando un poco más llegamos al final de la ruta ornitológica.
Yo sigo adelante, cruzo una cantera, haciendo un par o tres de zigzags y ganando altura con rapidez. Pasada la cantera se pasa por una explanada y se llega a la carretera asfaltada. En este punto es importante tener en cuenta que hay que girar a la derecha y continuar por el túnel (aunque pueda estar a oscuras). No bajar hacia la base de la presa, como hice yo al ver abierta la verja y ganas de curiosear.
Llegamos a la gran presa de Mediano, que nos ofrece unas privilegiadas vistas sobre el embalse del mismo nombre, y de telón de fondo, los Pirineos. Cruzamos la presa, vamos por la pista asfaltada, hasta que encontramos un pista que nos lleva de vuelta hasta el pueblo de Samitier.