San Gregorio Ostiense y Ermita de la Virgen de la Guarda

Nosotros dejamos el coche al pie de la Basílica de San Gregorio Ostiense, aunque es factible dejarlo en Sorlada.

Maravilla la Basílica barroca nada más verla. Es una pena que la encontráramos cerrada, porque dentro es también es espectacular.

En el recinto de la basílica existe una fuente, pasaremos por delante de ella e iremos descendiendo por una senda hasta un collado que separa el monte Piñalba donde se encuentra la basílica del monte Virgen de la Guarda donde se encuentra la ermita de su mismo nombre.

Justo en el collado nace un camino ancho, que sube directamente a la ermita. Pero advertidos por un vecino de Sorlada decidimos girar a la izquierda por otro camino con pendiente más suave que sube también hasta la cresta de la sierra.

Este camino hasta llegar a la cresta transita por un bosque de encinas y tiene pintas de ser bastante embarrable.

Ya en la cresta seguiremos el camino que pasa por ella conocido como Camino de la Virgen.
Para subir a la ermita tendremos que apartarnos del camino para subir hacia los riscos donde se encuentra. No tiene ninguna dificultad ni peligro sólo el desnivel, pero es un trecho corto.

Desde la ermita tendremos grandes vistas se encuentra siempre muy soleada y la ermita está bastante cuidada.
Está sobre el monte Virgen de la Guarda, que con sus 729 metros de altitud es la mayor altura de la Sierra de San Gregorio, pero no es tan conocida como Piñalba.

Descendemos de los riscos, de nuevo al Camino de la Virgen, y seguimos por él bajaremos de nuevo hacia el collado. El vecino nos aconsejó muy bien porque para bajar hasta el collado el camino tiene mucha pendiente y es muy pedregoso.

Volvemos a subir a la Basílica por la misma senda de antes. Ya en la explanada donde hemos dejado los coches. Seguiremos por la carretera hasta encontrar la pista que nos llevará al espectacular monolito de casi 20 metros de altura.

Se desconoce su origen, pero dada su altura se piensa que su origen es humano y que es parte de una inacabada obra.
Volvemos a la Basílica por el mismo camino para terminar esta corta excursión.