San Martin de Caballera

Dejamos el coche a la entrada de Besians, junto a la báscula municipal frente al precioso puente románica. Iniciamos el camino unos metros por pista asfaltada en dirección oeste hasta un cruce donde tomamos la pista que a nuestra derecha nos indica a Santaliestra. Tras unos minutos cruzamos el barranco de Caballera, entubado bajo la pista, y tomamos un sendero muy vestido en su comienzo que sale a nuestra izquierda, nada más pasar el barranco (hay un pequeño mojón de piedras). El bonito sendero asciende paralelo al barranco de Caballera, unos metros por encima del mismo. Cuando el panorama se abre el sendero hace unas lazadas y alcanza las inmediaciones del pueblo de Caballera. Accedemos al pueblo entre bonitos y antiguos muros de piedra.
El pueblo de Caballera, con algunas casas rehabilitadas, esté desperdigado en varios barrios. Nosotros nos dirigimos hacia el de nuestra izquierda siguiendo señales blancas y amarillas de PR. Alcanzamos un grupo de casas rehabilitadas y tras ellas un gran caserón abandonado que tiene en su parte trasera unas impresionantes cuadras. Tras ellas surge la pista que nos lleva al monasterio de San Martín de Caballera. La pista está señalizada con señales de PR. Está en malas condiciones para vehículos pero es agradable de caminar. Al principio discurre entre muros de piedra y luego con preciosas vistas del valle del Esera. En algo menos de una hora alcanzamos el Monasterio que queda a la derecha de la pista.
San Martín de Caballera conserva la cabecera y parte de la nave, un elevado ábside, una preciosa cripta y restos de dependencias accesorias. Está rehabilitado.
Volvemos a Caballera por el mismo camino y allí tomamos el PR que nos va a conducir a Santaliestra. Pasamos junto a la iglesia de Caballera y el camino abandona el pueblo por un precioso camino entre bosque y muros de piedra. Alcanzamos un bonito mirador sobre el río Esera y descendemos hasta alcanzar un barranco que atravesamos por una faja de piedra. A continuación el camino pasa por una zona de margas con una impresionante caída sobre el río. Se atraviesa sin problemas pudiendo agarrarnos a una sirga si tenemos vértigo. Alcanzamos el Esera que pasamos por un puente y llegamos a Santaliestra. Atravesamos el pueblo en dirección sur y seguimos las señales de Besians, lavaderos y puente colgante. Alcanzamos los lavaderos, donde podemos reponer agua y atravesamos el Esera por un puente colgante de madera. Alcanzamos en seguida una pista que en algo más de media hora nos deja en el punto de partida.