San Martín de la Val de Onsera

La Ermita de San Martín de la Val de Onsera tiene su origen en un monasterio del siglo XI. Se halla dentro de un profundo barranco, al pie de una de sus paredes, protegida en parte por un extraplomo, junto a una cascada.

Para su ascensión tomamos la carretera de Loporzano y, pasando por este y por Barluenga, continuamos hasta San Julián de Banzo. Después del primero de sus dos barrios, una señal indica el inicio de una pista, normalmente en bastante buen estado, hacia San Martín de la Ball d'Onsera. Continuamos por ella y 150 metros más adelante tomamos otra, a la derecha, con la misma indicación. Tras 750 metros llegamos a una pequeña explanada con sitio para algunos coches.

Comenzamos la caminata por un tramo de pista que lleva al barranco de San Martín y, a partir de aquí, seguimos ascendiendo por el cauce, normalmente seco. A la media hora, junto a un poste indicador y unos mojones, abandonamos el barranco por la derecha y seguimos ascendiendo, ahora por un bosque de carrascas.
35 minutos después (una hora y cinco minutos desde el inicio) llegamos a un punto en el que podemos elegir continuar por el paso de La Viñeta, zona escarpada equipada con sirga y barandillas, o por la senda de Los Burros, sin ninguna dificultad. Ambas vuelven a coincidir en el collado del Salvador y, aunque es habitual el ascenso por el paso de La Viñeta y el regreso por la senda de Los Burros, en esta ocasión lo hemos hecho al revés.
Una vez en el collado, al que llegamos en una hora y media, hay que descender por el lado contrario al de subida. El camino es ahora empinado y de roca, pero todo él equipado con sirga pasamanos. Llegamos así de nuevo al cauce del barranco de San Martín y ya solo quedan 200 metros de ascenso hasta la ermita, a la que llegamos tras algo menos de dos horas de agradable caminata.

Para el descenso empezamos desandando el tramo hasta el collado del Salvador. En este punto giramos a la derecha para bajar por el nombrado paso de La Viñeta y luego por la misma senda por la que hemos subido, hasta el aparcamiento. Este descenso puede llevar en torno a una hora y media.