SAN MARTIÑO DA COVA - SEGADE (RUTA DA RIBEIRA SACRA DO MIÑO PR-G 162) 07/03/20
near Acova, Galicia (España)
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Trail photos
Itinerary description
Hoy, día 28/04/20, quiero regalaros la segunda entrega de esta preciosa ruta-travesía (solo de ida, no circular) de la saga “Ribeira Sacra do Miño PR-G 162”. Tenía pendiente subir esta ruta y aprovecho para entreteneros en la cuarentena domiciliaria que sufrimos debido al estado de alarma por la desgraciada pandemia del coronavirus (Covid-19), decretado en España el día 14/03/2020 y que durará hasta… que Dios quiera. Esta ruta fue la última que hicimos, 7 días antes del confinamiento. ¡Ánimo, resistiremos!
Nuestro amigo y compañero Miguel López Blanco (directivo del Club Huellas de Cabrera), tuvo a bien organizar esta ruta y guiar al resto de los 16 senderistas participantes, en un día frío y con niebla a primeras horas de la mañana, aunque a la hora de la comida ya comenzaba a brillar el sol.
Aclaración. Como íbamos a realizar una travesía (solo ida, no circular), contratamos a un taxista, D. Antonio, para que recogiera a los conductores de los coches en la aldea de Segade (final de ruta) y los llevara de regreso al aparcamiento de la iglesia de San Martiño da Cova para recoger los coches.
También puede interesaros la primera ruta-travesía de la saga con el título: “SANTO ESTEVO DE RIBAS DO MIÑO - MIRADOR DE CUÑAS (RUTA DA RIBEIRA SACRA DO MIÑO PR-G 162) 05/10/19”. Tenéis el enlace a dicha ruta al final en “Ver más”, en letras azules después de los datos del GPS.
O esta otra con el título: “RIBIEIRA SACRA: MIRADORES Y MOLINOS SOBRE EL CAÑÓN DEL RÍO SIL (TRAVESÍA DE SAN XILLAO AL EMBARCADERO OS CHANCÍS) 11/01/20”. Para verla: copiar y pegar el título en “Buscar rutas o Explorar” de Wikiloc.
Recomiendo ver los vídeos para tener una mejor visión e idea del recorrido de las rutas, así como para ver los tiempos, distancias y promedios realizados al paso por las aldeas y lugares.
Ribeira Sacra
“La Ribeira Sacra es una zona que comprende las riberas de los ríos Cabe, Sil y Miño, en la zona sur de la provincia de Lugo y el norte de la provincia de Orense, en Galicia, España. La capital de la zona se convino que fuese la ciudad de Monforte de Lemos, en la provincia de Lugo, que es también la localidad más poblada.
El 5 de abril de 2019 fue aprobado por el Consejo de Patrimonio Histórico del Ministerio de Cultura su candidatura a la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. La decisión se tomará en el 45º Comité de Patrimonio Mundial, en el año 2021.” (Fuente: Wikipedia, marzo 2020).
Resumen de la ruta-travesía:
• Llegamos en varios coches al aparcamiento de San Martiño da Cova (en A Cova), situado al borde de la carretera LU-P-5819 y a 100 m de la iglesia románica del mismo nombre.
• Transitamos por carreteras locales o comarcales (un poco), caminos y senderos; a través de viñedos en bancales y bosques; vadeamos regatos y cruzamos el de Aguianza sobre una pasarela.
• Estuvimos en iglesias románicas. Nos situamos en miradores naturales, como el de las Maravillas con vistas al cañón del río Miño; o artificiales, como el de la preciosa fervenza (cascada) de Augacaída. También avistamos una pequeña isla y un área recreativa con un embarcadero de catamaranes del río Miño.
• Pasamos por aldeas o parroquias de pocas viviendas (casi abandonadas) de la Ribeira Sacra lucense.
• Finalmente, llegamos a la aldea de Segade, donde finalizamos esta estupenda ruta-travesía.
Descripción de la ruta-travesía
Estacionamos los coches en el aparcamiento de San Martiño da Cova (aldea de A Cova), al borde de la carretera LU-P-5819. El aparcamiento cuenta con aparatos para que las personas mayores se ejerciten y un panel de la ruta-travesía.
Llegamos al aparcamiento
Otros compañeros aparcaron enfrente
Compañeras/o y situación de la iglesia
En la propia carretera, pero enfrente, hay unos letreros de dirección que anuncian la iglesia románica de San Martiño da Cova, del siglo XII, que está situada enfrente y a unos 100 metros descendiendo una calle. Dicha iglesia perteneció a un monasterio de la orden de San Agustín y su portada es de arco de medio punto con dos arquivoltas sobre columnas y capiteles decorados con motivos vegetales (estaba cerrada).
La iglesia románica
Iniciamos la ruta-travesía desde el mismo aparcamiento, pasamos por delante del panel de la ruta y giramos a la izquierda para continuar por carretera en ligero ascenso. Nada más dejar el aparcamiento ya hay un poste de direcciones de la PR-G 162 que anuncia “Sto. Estevo de Atán 14´6 km” y, unos metros más adelante, un poste de orientación PR (Pequeño Recorrido) con una marca que indica giro a la derecha. Lo hicimos y tomamos un sendero en descenso que sigue las marcas PR. Seguidamente, vadeamos un regato de agua sobre piedras.
Iniciando la ruta-travesía
Desde el aparcamiento
Vista hacia atrás del parking
Girando a la derecha y tomando un sendero
Vadeando un rego
Ascendimos y pasamos a caminar por un sendero-camino a través de un pequeño bosque. Luego salimos a una carretera local y pasamos al lado de un viñedo en bancales o socalcos, donde se hizo más persistente la neblina. Más adelante, nos situamos en un mirador natural con vistas al río Miño, pero apenas pudimos disfrutar de sus vistas debido a la niebla.
A través de bosque
A continuación, entramos en la aldea de Arxuá (desde donde ya pudimos ver mejor el Miño). Casi al final de la aldea, apareció un camino a la izquierda. Lo tomamos, ya que así lo indicaba una marca PR en un poste del tendido eléctrico. Luego caminamos por un sendero que descendía y volvía a subir, con cierto desnivel, para entrar de nuevo en un bosque. Después de descender otra vez, tuvimos que vadear, sin dificultad, el rego da Morá, donde los troncos de los árboles estaban cubiertos de verde musgo.
Tomando un camino en Arxuá
Rego da Morá
Después, volvimos a ascender y entramos en un bosque de roble. Pasamos fácilmente otro regato. A partir de ese punto, el sendero se fue ensanchando y pasó a ser camino; también aparecieron pinos mezclados con robles.
Bosque de roble
El camino continuó a través del bosque y, a nuestro paso, vimos postes de orientación y marcas PR, que seguimos para salir a una carretera local. En el extremo del camino hay un poste de direcciones y nosotros continuamos hacia el área recreativa de Maiorga 2´5 km. En ese lugar hicimos una parada de reagrupamiento.
Parada de reagrupamiento
Seguimos la carretera local para situarnos en un mirador natural con vistas a la iglesia de Santo André, al borde de la carretera. En ese lugar, donde hay un letrero con direcciones a las aldeas de O Carballo y Portabade, giramos a la derecha pasando por un lateral de la iglesia. Tras caminar unos metros hicimos un nuevo giro a la derecha para seguir un sendero en descenso con marcas PR.
Iglesia de Santo André
De nuevo salimos a la misma carretera, que nos llevó a la entrada de la aldea de O Carballo; anunciada con un letrero. Cruzamos la aldea y vimos otro letrero en una casa que anunciaba la Casa Campaciñas (casa de alojamiento rural). Eran las 10:39 horas, habíamos recorrido 4.56 km en un tiempo de 01:19 horas y con un promedio de 3.4 km/h. Al final de la aldea existe, en un rellano, un relajante mirador con 2 sillas, 1 mesa y 2 tumbonas con vistas a: el río Miño, una zona del embalse de Os Peares y, en la orilla opuesta, la aldea de Nogueira de Abaixo.
Entrando en O Carballo
El mirador hacia el Miño
Descendimos por un camino asfaltado entre viñedos mientras también podíamos ver viñedos en bancales en la orilla de enfrente. Poco después, tomamos un camino a la derecha que descendía entre viñas y salimos a otro camino más amplio, lugar donde hicimos una parada de reagrupamiento y aprovechamos para tomar alimentos.
Reagrupamiento
Reanudamos la ruta-travesía. El camino nos fue acercando a la orilla del río y llegamos a Casa de Maiorga (área recreativa), donde pudimos ver: la pequeña isla de Maiorga y un embarcadero de catamaranes; un hórreo y un poste de direcciones (en sentido contrario al nuestro); y otro más adelante con dirección a Marce 4´3 km y Santo Estevo de Atán 8´5 km. Seguimos la indicación de este último.
Casa de Maiorga
Isla de Maiorga
El camino ascendió y giró a la izquierda (marca PR). Después de caminar 1.4 km, nos desviamos unos pocos metros del trayecto para situarnos sobre el estupendo mirador natural de A Costa, con vistas al canón (cañón) del río Miño y las aldeas de Valboa, A Míllara y, en la otra vertiente, la aldea de Erbedeiro.
En el mirador de A Costa
Cañón del río Miño
Retrocedimos para incorporarnos a la ruta-travesía y continuamos hasta llegar a la aldea de Valboa (en castellano, Balboa) cuando eran las 11:47 horas, habíamos recorrido 8.41 km en un tiempo de 02:27 horas y con un promedio de 3.4 km/h. Desde un alto de la aldea pudimos ver los grandes viñedos de la Ribeira Sacra en bancales o socalcos, sobre las laderas y con fuertes desniveles, tanto en las riberas del río Sil como del río Miño. Esta disposición hace muy difícil trabajar en dichas viñas, por lo que se la conoce como “viticultura heroica”. Pasamos por su calle principal y encontramos a un señor del pueblo con el que hablamos un momento. Fue la única persona que encontramos a nuestro paso por todas las aldeas.
Pasando por Valboa
Los viñedos en bancales
Descendimos por un camino-sendero, teniendo ya a la vista A Míllara. Pronto vadeamos un regato con poca agua y salimos a una carretera local que nos llevaría a pasar sobre la aldea de A Míllara y de sus viñedos.
Aldea de A Míllara
Continuamos la marcha por caminos y senderos mientras íbamos encontrando algún mirador natural hacia el río Miño, aunque ofrecían una escasa visión debido al ramaje de los árboles. Seguidamente, encontramos un poste de dirección que anuncia el “miradoiro do Castelo das Maravillas” (mirador del Castillo de las Maravillas). Giramos a la derecha, desviándonos de la ruta-travesía un poco, para descender por un sendero y situarnos en dicho mirador, que es un espigón rocoso de pequeñas dimensiones sobre el Miño y que presenta unas vistas espectaculares ya que abarca buena parte del río, viñedos en bancales y, en la orilla opuesta, la aldea de Erbedeiro y la iglesia de Santo Estevo de Chouzán (s. XII). Hicimos las oportunas fotos y la del grupo.
Huellas en el mirador de las Maravillas
Vista del Miño desde el mirador
Retrocedimos hacia el enlace y proseguimos por el sendero. Vimos de nuevo la iglesia de Santo Estevo de Chouzán más cercana y, a continuación, entramos en la aldea de Marce. En cuanto pasamos las primeras casas, giramos a la derecha y tomamos un camino donde vimos dos postes de dirección que señalan la fervenza (cascada) de Augacaída y Sto. Estevo de Atán 4´1 km.
Iglesia de Santo Estevo de Chouzán (en la ladera opuesta)
En Marce
Cruzamos parte de la aldea y un sendero nos condujo a una pequeña cascada y otro poste que anunciaba la fervenza. El sendero se convirtió en camino y pasamos junto a una casa abandonada. Después de caminar un tramo llegamos a otros postes, uno de ellos invitaba a girar a la izquierda (hacia la cascada) y el otro recto (al castro de Marce), adonde decidimos no ir, por lo que giramos a la izquierda y dejamos el camino para tomar un sendero en descenso con marcas PR.
Siguiendo el sendero
Al finalizar el sendero, descendimos con fuerte pendiente por unos escalones de tierra y unas largas escaleras de madera con barandillas, para situarnos en el miradoiro da fervenza de Augacaída, una bella y espectacular cascada de 40 m de caída con abundante agua proporcionada por el regato de Aguianza. Dos compañeros bajaron hasta su base y el resto nos quedamos algo más arriba ya que el sendero estaba muy resbaladizo. El mirador es una plataforma de madera con barandillas, situado en un lateral y a media altura de la cascada. Hicimos las acostumbradas fotos y las del grupo.
En las escaleras de la cascada
En el mirador de la cascada de Augacaída
Fervenza de Augacaída
Retrocedimos sobre nuestros pasos hasta el enlace, donde hay un cartel de dirección que reza: “Continuación Ruta”. Le hacemos caso y giramos a la derecha. Proseguimos la marcha por un sendero y vimos en un árbol el símbolo orientativo “PR-G 162” que nos informó de que estábamos siguiendo la ruta-travesía correcta.
El enlace de la cascada
Así que continuamos pasando sobre las ruinas de lo que debió de ser una cabaña y, seguidamente, descendimos hasta la orilla del rego de Aguianza, donde existe una pasarela metálica estrecha de color verde. La usamos para cruzar a la orilla contraria y ascendimos hasta una bifurcación de caminos. En el ramal de la izquierda, abierto recientemente, hay un pino con una flecha morada que no hay que seguir (el camino está cortado, sin continuación). Por eso, hay que continuar por el ramal de la derecha, que es el correcto. Dicha bifurcación es la única no señalizada, pensamos que quizá sí que lo estaba pero que, la máquina al abrir el camino de la izquierda, lo tapó o derribó.
En la pasarela del rego Aguianza
Continuar por la derecha
Llegamos a un mirador natural desde el que vimos el río Miño y, en la vertiente contraria, la iglesia de Santo Estevo de Chouzán y la aldea de Pacios. A continuación, llegamos a un espacio o plaza de la aldea de Cabo de Vila, situada sobre la misma. La plaza cuenta con el típico hórreo gallego. En ese lugar decidimos detenernos para comer.
Comiendo en la plaza
Con el mismo menester
Finalizada la comida, Miguel nos informó de la siguiente ruta a realizar (que luego quedaría aplazada por la desgraciada pandemia del coronavirus). Una vez informados, reemprendimos la marcha pasando sobre la aldea cuando comenzaba a lucir el sol. Pasamos al lado de una fuente-lavadero y enlazamos con la calle que pasa por el centro de la aldea, donde hay un letrero con el nombre de la misma. Luego cruzamos la aldea de Seoane (prácticamente unida a Cabo de Vila) y transitamos por un camino de hierba verde hasta llegar a la aldea de Reiriz, de pocas viviendas.
Pasando por Seoane
Entrando en Reiriz
Dejamos atrás la aldea y seguimos por el camino de hierba, entre viñas y muros de piedra. Cuando llegamos a una parte alta, pudimos ver las aldeas de Prado, Albarde y Souto rodeadas de prados y arboleda, así como de nuevo el río Miño.
Las tres aldeas
Descendimos y ascendimos para situarnos en la igrexa (iglesia) románica de Santo Estevo de Atán, del siglo XII-XIII, bien conservada exteriormente (no entramos porque estaba cerrada) y con el cementerio a ambos lados. En su entrada hay un panel informativo de la iglesia y su situación; y un poste de dirección en sentido contrario a nuestra marcha, en el que se lee: “PR-G 162 Santo Estevo de Ribas de Miño 33´4 km” (donde habíamos comenzado el primer tramo o etapa de la ruta-travesía anterior). También hay una placa de matacrilato en la pared con la historia de la iglesia. Avanzamos por el lateral del edificio y pudimos ver su torre con doble campanario, que no es románica, ya que se cayó y fue reconstruida mucho después.
Iglesia de Santo Estevo de Atán
Continuamos la marcha pasando sobre la aldea de Prado y cruzando la de Albarde (prácticamente unidas) mientras veíamos el rego de Atán descendiendo por una torrentera estrecha. Luego seguimos por un camino carretero con fuerte ascenso (que se prolongaría hasta después de la aldea de Cima de Atán). Desde dicho camino pudimos ver las dos aldeas citadas anteriormente. Más adelante, el camino se ensanchó antes de pasar a ser un sendero. Poco después llegamos a la aldea de Cima de Atán, donde tuvimos que pasar una pequeña cancilla que cierra la calle para evitar que pase el ganado. Hicimos una parada de reagrupamiento y de recuperación del aliento tras el duro ascenso.
Las dos aldeas
Reagrupamiento en Cima de Atán
Emprendimos de nuevo la ruta-travesía a través de una corredoira o congostra profunda (camino carretero con paredes laterales que discurre por debajo del nivel del terreno circundante) y todavía en duro ascenso. Además corría el agua por ella, lo que nos obligaba a pisar sobre piedras o buscando el terreno menos embarrado. La corredoira finalizó cuando salimos a la carretera comarcal LU-P-4107, por la que caminamos unos 500 metros mientras pasábamos junto a alguna casa aislada y un túnel de la carretera N-120. Finalmente, llegamos a una caseta de la parada del autobús en la aldea de Segade, donde hay una bici estática y un columpio; lugar donde dimos por concluida esta ruta-travesía y el track.
Por corredoira
En la carretera
Aldea de Segade
Fin de la ruta-travesía en la parada del bus de Segade
En dicha parada del bus esperamos a que llegara el taxista D. Antonio, que vino a recoger a los conductores de los coches para llevarlos a San Martiño da Cova (inicio de la ruta-travesía). Mientras esperábamos, los demás subimos por la carretera unos pocos metros (fuera de la ruta-travesía y del track) para esperar la llegada de los coches en una zona de descanso con una estupenda fuente, donde algunos bebieron y otros nos lavamos un poco.
Zona de descanso de Segade con fuente
La fuente
Vista desde el otro extremo
Una vez que llegaron los compañeros con los coches, nos cambiamos de ropa y calzado y nos fuimos hasta el pueblo de Ferreira de Pantón, donde entramos en el mesón Os Castros. Tomamos unas consumiciones en su terraza para aliviar la sed y brindar por esta estupenda y feliz ruta-travesía. Nos despedimos de los compañeros/as de otras localidades hasta la próxima ocasión y regresamos a nuestros domicilios. Todavía desconocíamos que, en una semana, empezaríamos un confinamiento que se mantiene a fecha de hoy… ¡Ánimo, resistiremos!
Parking y mesón Os Castros
Brindando por la magnífica ruta-travesía
En la misma
Otra más de hidratación
La despedida
Magnífica ruta-travesía que recorre maravillosos parajes de la Ribeira Sacra a través de: aldeas desconocidas y despobladas, iglesias románicas, miradores estupendos, una cascada maravillosa, viñedos en bancales, bosques y, como protagonista principal, el caudaloso río Miño que encontrareis si transitáis por este ¡¡Buen camino!!
Saludos cordiales.
Datos del GPS:
Nombre de la salida: Aparcamiento de San Martiño da Cova
Fecha y Hora
Día
07-03-2020
Hora de salida
09:20:12
Hora de llegada:
16:17:19
Duración
06:57:07
Tiempo parado
01:59:02
Tiempo en movimiento
04:58:05
Distancias
Distancia con alturas
18.10 km (real 19.00 km)
Alturas
Altura Máxima
592 m
Altura Mínima:
220 m
Desnivel máximo
372 m
Ascen.acum.
890 m
Desc.acum.
704 m
Max Pendiente
26 %
Min Pendiente
-29 %
Velocidad
Velocidad media
2.7 km/h
Nuestro amigo y compañero Miguel López Blanco (directivo del Club Huellas de Cabrera), tuvo a bien organizar esta ruta y guiar al resto de los 16 senderistas participantes, en un día frío y con niebla a primeras horas de la mañana, aunque a la hora de la comida ya comenzaba a brillar el sol.
Aclaración. Como íbamos a realizar una travesía (solo ida, no circular), contratamos a un taxista, D. Antonio, para que recogiera a los conductores de los coches en la aldea de Segade (final de ruta) y los llevara de regreso al aparcamiento de la iglesia de San Martiño da Cova para recoger los coches.
También puede interesaros la primera ruta-travesía de la saga con el título: “SANTO ESTEVO DE RIBAS DO MIÑO - MIRADOR DE CUÑAS (RUTA DA RIBEIRA SACRA DO MIÑO PR-G 162) 05/10/19”. Tenéis el enlace a dicha ruta al final en “Ver más”, en letras azules después de los datos del GPS.
O esta otra con el título: “RIBIEIRA SACRA: MIRADORES Y MOLINOS SOBRE EL CAÑÓN DEL RÍO SIL (TRAVESÍA DE SAN XILLAO AL EMBARCADERO OS CHANCÍS) 11/01/20”. Para verla: copiar y pegar el título en “Buscar rutas o Explorar” de Wikiloc.
Recomiendo ver los vídeos para tener una mejor visión e idea del recorrido de las rutas, así como para ver los tiempos, distancias y promedios realizados al paso por las aldeas y lugares.
Ribeira Sacra
“La Ribeira Sacra es una zona que comprende las riberas de los ríos Cabe, Sil y Miño, en la zona sur de la provincia de Lugo y el norte de la provincia de Orense, en Galicia, España. La capital de la zona se convino que fuese la ciudad de Monforte de Lemos, en la provincia de Lugo, que es también la localidad más poblada.
El 5 de abril de 2019 fue aprobado por el Consejo de Patrimonio Histórico del Ministerio de Cultura su candidatura a la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. La decisión se tomará en el 45º Comité de Patrimonio Mundial, en el año 2021.” (Fuente: Wikipedia, marzo 2020).
Resumen de la ruta-travesía:
• Llegamos en varios coches al aparcamiento de San Martiño da Cova (en A Cova), situado al borde de la carretera LU-P-5819 y a 100 m de la iglesia románica del mismo nombre.
• Transitamos por carreteras locales o comarcales (un poco), caminos y senderos; a través de viñedos en bancales y bosques; vadeamos regatos y cruzamos el de Aguianza sobre una pasarela.
• Estuvimos en iglesias románicas. Nos situamos en miradores naturales, como el de las Maravillas con vistas al cañón del río Miño; o artificiales, como el de la preciosa fervenza (cascada) de Augacaída. También avistamos una pequeña isla y un área recreativa con un embarcadero de catamaranes del río Miño.
• Pasamos por aldeas o parroquias de pocas viviendas (casi abandonadas) de la Ribeira Sacra lucense.
• Finalmente, llegamos a la aldea de Segade, donde finalizamos esta estupenda ruta-travesía.
Descripción de la ruta-travesía
Estacionamos los coches en el aparcamiento de San Martiño da Cova (aldea de A Cova), al borde de la carretera LU-P-5819. El aparcamiento cuenta con aparatos para que las personas mayores se ejerciten y un panel de la ruta-travesía.
Llegamos al aparcamiento
Otros compañeros aparcaron enfrente
Compañeras/o y situación de la iglesia
En la propia carretera, pero enfrente, hay unos letreros de dirección que anuncian la iglesia románica de San Martiño da Cova, del siglo XII, que está situada enfrente y a unos 100 metros descendiendo una calle. Dicha iglesia perteneció a un monasterio de la orden de San Agustín y su portada es de arco de medio punto con dos arquivoltas sobre columnas y capiteles decorados con motivos vegetales (estaba cerrada).
La iglesia románica
Iniciamos la ruta-travesía desde el mismo aparcamiento, pasamos por delante del panel de la ruta y giramos a la izquierda para continuar por carretera en ligero ascenso. Nada más dejar el aparcamiento ya hay un poste de direcciones de la PR-G 162 que anuncia “Sto. Estevo de Atán 14´6 km” y, unos metros más adelante, un poste de orientación PR (Pequeño Recorrido) con una marca que indica giro a la derecha. Lo hicimos y tomamos un sendero en descenso que sigue las marcas PR. Seguidamente, vadeamos un regato de agua sobre piedras.
Iniciando la ruta-travesía
Desde el aparcamiento
Vista hacia atrás del parking
Girando a la derecha y tomando un sendero
Vadeando un rego
Ascendimos y pasamos a caminar por un sendero-camino a través de un pequeño bosque. Luego salimos a una carretera local y pasamos al lado de un viñedo en bancales o socalcos, donde se hizo más persistente la neblina. Más adelante, nos situamos en un mirador natural con vistas al río Miño, pero apenas pudimos disfrutar de sus vistas debido a la niebla.
A través de bosque
A continuación, entramos en la aldea de Arxuá (desde donde ya pudimos ver mejor el Miño). Casi al final de la aldea, apareció un camino a la izquierda. Lo tomamos, ya que así lo indicaba una marca PR en un poste del tendido eléctrico. Luego caminamos por un sendero que descendía y volvía a subir, con cierto desnivel, para entrar de nuevo en un bosque. Después de descender otra vez, tuvimos que vadear, sin dificultad, el rego da Morá, donde los troncos de los árboles estaban cubiertos de verde musgo.
Tomando un camino en Arxuá
Rego da Morá
Después, volvimos a ascender y entramos en un bosque de roble. Pasamos fácilmente otro regato. A partir de ese punto, el sendero se fue ensanchando y pasó a ser camino; también aparecieron pinos mezclados con robles.
Bosque de roble
El camino continuó a través del bosque y, a nuestro paso, vimos postes de orientación y marcas PR, que seguimos para salir a una carretera local. En el extremo del camino hay un poste de direcciones y nosotros continuamos hacia el área recreativa de Maiorga 2´5 km. En ese lugar hicimos una parada de reagrupamiento.
Parada de reagrupamiento
Seguimos la carretera local para situarnos en un mirador natural con vistas a la iglesia de Santo André, al borde de la carretera. En ese lugar, donde hay un letrero con direcciones a las aldeas de O Carballo y Portabade, giramos a la derecha pasando por un lateral de la iglesia. Tras caminar unos metros hicimos un nuevo giro a la derecha para seguir un sendero en descenso con marcas PR.
Iglesia de Santo André
De nuevo salimos a la misma carretera, que nos llevó a la entrada de la aldea de O Carballo; anunciada con un letrero. Cruzamos la aldea y vimos otro letrero en una casa que anunciaba la Casa Campaciñas (casa de alojamiento rural). Eran las 10:39 horas, habíamos recorrido 4.56 km en un tiempo de 01:19 horas y con un promedio de 3.4 km/h. Al final de la aldea existe, en un rellano, un relajante mirador con 2 sillas, 1 mesa y 2 tumbonas con vistas a: el río Miño, una zona del embalse de Os Peares y, en la orilla opuesta, la aldea de Nogueira de Abaixo.
Entrando en O Carballo
El mirador hacia el Miño
Descendimos por un camino asfaltado entre viñedos mientras también podíamos ver viñedos en bancales en la orilla de enfrente. Poco después, tomamos un camino a la derecha que descendía entre viñas y salimos a otro camino más amplio, lugar donde hicimos una parada de reagrupamiento y aprovechamos para tomar alimentos.
Reagrupamiento
Reanudamos la ruta-travesía. El camino nos fue acercando a la orilla del río y llegamos a Casa de Maiorga (área recreativa), donde pudimos ver: la pequeña isla de Maiorga y un embarcadero de catamaranes; un hórreo y un poste de direcciones (en sentido contrario al nuestro); y otro más adelante con dirección a Marce 4´3 km y Santo Estevo de Atán 8´5 km. Seguimos la indicación de este último.
Casa de Maiorga
Isla de Maiorga
El camino ascendió y giró a la izquierda (marca PR). Después de caminar 1.4 km, nos desviamos unos pocos metros del trayecto para situarnos sobre el estupendo mirador natural de A Costa, con vistas al canón (cañón) del río Miño y las aldeas de Valboa, A Míllara y, en la otra vertiente, la aldea de Erbedeiro.
En el mirador de A Costa
Cañón del río Miño
Retrocedimos para incorporarnos a la ruta-travesía y continuamos hasta llegar a la aldea de Valboa (en castellano, Balboa) cuando eran las 11:47 horas, habíamos recorrido 8.41 km en un tiempo de 02:27 horas y con un promedio de 3.4 km/h. Desde un alto de la aldea pudimos ver los grandes viñedos de la Ribeira Sacra en bancales o socalcos, sobre las laderas y con fuertes desniveles, tanto en las riberas del río Sil como del río Miño. Esta disposición hace muy difícil trabajar en dichas viñas, por lo que se la conoce como “viticultura heroica”. Pasamos por su calle principal y encontramos a un señor del pueblo con el que hablamos un momento. Fue la única persona que encontramos a nuestro paso por todas las aldeas.
Pasando por Valboa
Los viñedos en bancales
Descendimos por un camino-sendero, teniendo ya a la vista A Míllara. Pronto vadeamos un regato con poca agua y salimos a una carretera local que nos llevaría a pasar sobre la aldea de A Míllara y de sus viñedos.
Aldea de A Míllara
Continuamos la marcha por caminos y senderos mientras íbamos encontrando algún mirador natural hacia el río Miño, aunque ofrecían una escasa visión debido al ramaje de los árboles. Seguidamente, encontramos un poste de dirección que anuncia el “miradoiro do Castelo das Maravillas” (mirador del Castillo de las Maravillas). Giramos a la derecha, desviándonos de la ruta-travesía un poco, para descender por un sendero y situarnos en dicho mirador, que es un espigón rocoso de pequeñas dimensiones sobre el Miño y que presenta unas vistas espectaculares ya que abarca buena parte del río, viñedos en bancales y, en la orilla opuesta, la aldea de Erbedeiro y la iglesia de Santo Estevo de Chouzán (s. XII). Hicimos las oportunas fotos y la del grupo.
Huellas en el mirador de las Maravillas
Vista del Miño desde el mirador
Retrocedimos hacia el enlace y proseguimos por el sendero. Vimos de nuevo la iglesia de Santo Estevo de Chouzán más cercana y, a continuación, entramos en la aldea de Marce. En cuanto pasamos las primeras casas, giramos a la derecha y tomamos un camino donde vimos dos postes de dirección que señalan la fervenza (cascada) de Augacaída y Sto. Estevo de Atán 4´1 km.
Iglesia de Santo Estevo de Chouzán (en la ladera opuesta)
En Marce
Cruzamos parte de la aldea y un sendero nos condujo a una pequeña cascada y otro poste que anunciaba la fervenza. El sendero se convirtió en camino y pasamos junto a una casa abandonada. Después de caminar un tramo llegamos a otros postes, uno de ellos invitaba a girar a la izquierda (hacia la cascada) y el otro recto (al castro de Marce), adonde decidimos no ir, por lo que giramos a la izquierda y dejamos el camino para tomar un sendero en descenso con marcas PR.
Siguiendo el sendero
Al finalizar el sendero, descendimos con fuerte pendiente por unos escalones de tierra y unas largas escaleras de madera con barandillas, para situarnos en el miradoiro da fervenza de Augacaída, una bella y espectacular cascada de 40 m de caída con abundante agua proporcionada por el regato de Aguianza. Dos compañeros bajaron hasta su base y el resto nos quedamos algo más arriba ya que el sendero estaba muy resbaladizo. El mirador es una plataforma de madera con barandillas, situado en un lateral y a media altura de la cascada. Hicimos las acostumbradas fotos y las del grupo.
En las escaleras de la cascada
En el mirador de la cascada de Augacaída
Fervenza de Augacaída
Retrocedimos sobre nuestros pasos hasta el enlace, donde hay un cartel de dirección que reza: “Continuación Ruta”. Le hacemos caso y giramos a la derecha. Proseguimos la marcha por un sendero y vimos en un árbol el símbolo orientativo “PR-G 162” que nos informó de que estábamos siguiendo la ruta-travesía correcta.
El enlace de la cascada
Así que continuamos pasando sobre las ruinas de lo que debió de ser una cabaña y, seguidamente, descendimos hasta la orilla del rego de Aguianza, donde existe una pasarela metálica estrecha de color verde. La usamos para cruzar a la orilla contraria y ascendimos hasta una bifurcación de caminos. En el ramal de la izquierda, abierto recientemente, hay un pino con una flecha morada que no hay que seguir (el camino está cortado, sin continuación). Por eso, hay que continuar por el ramal de la derecha, que es el correcto. Dicha bifurcación es la única no señalizada, pensamos que quizá sí que lo estaba pero que, la máquina al abrir el camino de la izquierda, lo tapó o derribó.
En la pasarela del rego Aguianza
Continuar por la derecha
Llegamos a un mirador natural desde el que vimos el río Miño y, en la vertiente contraria, la iglesia de Santo Estevo de Chouzán y la aldea de Pacios. A continuación, llegamos a un espacio o plaza de la aldea de Cabo de Vila, situada sobre la misma. La plaza cuenta con el típico hórreo gallego. En ese lugar decidimos detenernos para comer.
Comiendo en la plaza
Con el mismo menester
Finalizada la comida, Miguel nos informó de la siguiente ruta a realizar (que luego quedaría aplazada por la desgraciada pandemia del coronavirus). Una vez informados, reemprendimos la marcha pasando sobre la aldea cuando comenzaba a lucir el sol. Pasamos al lado de una fuente-lavadero y enlazamos con la calle que pasa por el centro de la aldea, donde hay un letrero con el nombre de la misma. Luego cruzamos la aldea de Seoane (prácticamente unida a Cabo de Vila) y transitamos por un camino de hierba verde hasta llegar a la aldea de Reiriz, de pocas viviendas.
Pasando por Seoane
Entrando en Reiriz
Dejamos atrás la aldea y seguimos por el camino de hierba, entre viñas y muros de piedra. Cuando llegamos a una parte alta, pudimos ver las aldeas de Prado, Albarde y Souto rodeadas de prados y arboleda, así como de nuevo el río Miño.
Las tres aldeas
Descendimos y ascendimos para situarnos en la igrexa (iglesia) románica de Santo Estevo de Atán, del siglo XII-XIII, bien conservada exteriormente (no entramos porque estaba cerrada) y con el cementerio a ambos lados. En su entrada hay un panel informativo de la iglesia y su situación; y un poste de dirección en sentido contrario a nuestra marcha, en el que se lee: “PR-G 162 Santo Estevo de Ribas de Miño 33´4 km” (donde habíamos comenzado el primer tramo o etapa de la ruta-travesía anterior). También hay una placa de matacrilato en la pared con la historia de la iglesia. Avanzamos por el lateral del edificio y pudimos ver su torre con doble campanario, que no es románica, ya que se cayó y fue reconstruida mucho después.
Iglesia de Santo Estevo de Atán
Continuamos la marcha pasando sobre la aldea de Prado y cruzando la de Albarde (prácticamente unidas) mientras veíamos el rego de Atán descendiendo por una torrentera estrecha. Luego seguimos por un camino carretero con fuerte ascenso (que se prolongaría hasta después de la aldea de Cima de Atán). Desde dicho camino pudimos ver las dos aldeas citadas anteriormente. Más adelante, el camino se ensanchó antes de pasar a ser un sendero. Poco después llegamos a la aldea de Cima de Atán, donde tuvimos que pasar una pequeña cancilla que cierra la calle para evitar que pase el ganado. Hicimos una parada de reagrupamiento y de recuperación del aliento tras el duro ascenso.
Las dos aldeas
Reagrupamiento en Cima de Atán
Emprendimos de nuevo la ruta-travesía a través de una corredoira o congostra profunda (camino carretero con paredes laterales que discurre por debajo del nivel del terreno circundante) y todavía en duro ascenso. Además corría el agua por ella, lo que nos obligaba a pisar sobre piedras o buscando el terreno menos embarrado. La corredoira finalizó cuando salimos a la carretera comarcal LU-P-4107, por la que caminamos unos 500 metros mientras pasábamos junto a alguna casa aislada y un túnel de la carretera N-120. Finalmente, llegamos a una caseta de la parada del autobús en la aldea de Segade, donde hay una bici estática y un columpio; lugar donde dimos por concluida esta ruta-travesía y el track.
Por corredoira
En la carretera
Aldea de Segade
Fin de la ruta-travesía en la parada del bus de Segade
En dicha parada del bus esperamos a que llegara el taxista D. Antonio, que vino a recoger a los conductores de los coches para llevarlos a San Martiño da Cova (inicio de la ruta-travesía). Mientras esperábamos, los demás subimos por la carretera unos pocos metros (fuera de la ruta-travesía y del track) para esperar la llegada de los coches en una zona de descanso con una estupenda fuente, donde algunos bebieron y otros nos lavamos un poco.
Zona de descanso de Segade con fuente
La fuente
Vista desde el otro extremo
Una vez que llegaron los compañeros con los coches, nos cambiamos de ropa y calzado y nos fuimos hasta el pueblo de Ferreira de Pantón, donde entramos en el mesón Os Castros. Tomamos unas consumiciones en su terraza para aliviar la sed y brindar por esta estupenda y feliz ruta-travesía. Nos despedimos de los compañeros/as de otras localidades hasta la próxima ocasión y regresamos a nuestros domicilios. Todavía desconocíamos que, en una semana, empezaríamos un confinamiento que se mantiene a fecha de hoy… ¡Ánimo, resistiremos!
Parking y mesón Os Castros
Brindando por la magnífica ruta-travesía
En la misma
Otra más de hidratación
La despedida
Magnífica ruta-travesía que recorre maravillosos parajes de la Ribeira Sacra a través de: aldeas desconocidas y despobladas, iglesias románicas, miradores estupendos, una cascada maravillosa, viñedos en bancales, bosques y, como protagonista principal, el caudaloso río Miño que encontrareis si transitáis por este ¡¡Buen camino!!
Saludos cordiales.
Datos del GPS:
Nombre de la salida: Aparcamiento de San Martiño da Cova
Fecha y Hora
Día
07-03-2020
Hora de salida
09:20:12
Hora de llegada:
16:17:19
Duración
06:57:07
Tiempo parado
01:59:02
Tiempo en movimiento
04:58:05
Distancias
Distancia con alturas
18.10 km (real 19.00 km)
Alturas
Altura Máxima
592 m
Altura Mínima:
220 m
Desnivel máximo
372 m
Ascen.acum.
890 m
Desc.acum.
704 m
Max Pendiente
26 %
Min Pendiente
-29 %
Velocidad
Velocidad media
2.7 km/h
Waypoints
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