Sant Martí de la Mota i Palol de Revardit

Ruta que sigue en parte, la cuenca del Revardit, pequeño rio que nace en la Sierra de Pujarnol, Rocacorba, y desagua en el Terri, afluente del Ter, recorrido de poco mas de 20 km , por caminos y senderos que transcurren por terrenos húmedos, iniciamos la ruta en la Iglesia de Sant Martí de la Mota, de estilo románico, tiempo atrás, la puerta estaba adornada de herraduras, cada vez más escasas, seguimos el recorrido del BTT-3, por la carretera hasta una curva pronunciada, donde ascendemos por un sendero adornado de cruces, es el Vía Crucis del oratorio de Sant Dalmacio, a pocos metros de él está el vértice geodésico de la cima, 365 m, estas tierras estuvieron habitadas desde el neolítico, pues, a pocos metros encontramos el Dolmen de la Mota, construido en la edad del bronce, fue excavado en 1975, continuamos nuestra andadura hasta la Plaza de la Comellassa, en la Urbanización els Refugis de la Mota, y descendemos por un camino cruzando el Revardit, hasta la carretera de Palol, donde vemos el vecindario de magnificas masías de Can Pedrers, a poco más de un kilometro, está el conjunto arquitectónico de Palol de Rebardit, lo forman el castillo y la Iglesia de Sant Miquel, rodeados de una infranqueable muralla, una fortificación, este bastión medieval del siglo XII, muy bien cuidado y excavado no hace muchos años, salimos del barrio dirección norte, pasamos Can Quaranta para adentrarnos en un bosque, terminado este y sobre en el sendero de la Ruta Soldados de Salamina 1, podemos ver, en un campo anexo, los restos de la bobilla romana de Ermedas, descubierta por el profesor Erundino Sanz en 1963, varias ruinas de muros y multitud de trozos de cerámica por el suelo son los vestigios de aquel oficio del siglo I d C, nuestro próximo objetivo está junto al cementerio, sobre una colina visitamos el Pou de Glaç, reconstruido hace pocos años puede visitarse, junto a él, un panel informativo, explica como era el negocio del hielo y lo importante que fue para la conservación de alimentos, nuestra última visita es el vecindario de Riudellots de la Creu, desde detrás del cementerio, tomamos un camino y la primera senda a la izquierda dirección Mont-Rodon, encontraremos la carretera de Can Gelada, un poco mas de bajada y vemos su Iglesia de Sant Martí, es del 1058, parece románica con algunas mejoras posteriores, campanario en espadaña de dos ojos, terminamos la ruta subiendo a la carretera de la Mota, hemos andado juntos, Ricard, Alfonso, Antonio y Julián.