Santa Bárbara o Tozal de Palo

El recorrido empieza en Palo, en su plaza mayor, salir hacia el norte, para descender un poco por una calle, llegando hasta el frontón del pueblo, allí, nos aparecerá un letrero del GR-1, hacia el Humo de Muro, y Ligüerre de Cinca, justo al lado, un letrero hacia el Tozal de Palo, o Ermita de Santa Bárbara, primeramente, faldea un promontorio, alejándonos del pueblo, la pista, va, siguiendo la dirección hacia el norte, para ir cambiando hacia el oeste, y acabar en otro cruce, el de la derecha, el que desciende, es el GR-1, que se dirige a El Humo del Muro, y al Congosto del Entremón, nuestra dirección es muy clara, a la izquierda, por la pista que asciende.

Esta pista, aprovechará toda la ladera norte del Tozal de Palo, o Santa Bárbara, ofreciendo algunas vistas hacia el Pantano de Mediano, tras dar un par de lazadas, se llegará a una zona despejada, donde veremos el cerro, y una de las antenas de la cima.

La pista, nos volverá a internar en el pinar, ascendiendo de forma tranquila, y siempre por la ladera norte de dicho Tozal, la pista, irá dando lazadas, hasta pasar un tendido eléctrico, y enseguida llegar a una curva.

A partir de aquí, la pista, se va a encontrar cementada, y sobretodo, puede que éste sea el tramo más duro de la excursión, se trata de hacer una diagonal por debajo del Tozal, para llegar a dos lazadas, que poco a poco iremos alcanzando, desde donde ya vemos alguna de sus antenas, seguimos en ascenso para ir llegando a otro desvío marcado con un mojón, puede que sea otra ruta de ascenso que parte desde la Ermita de San Climent, que no te hace seguir la pista, finalmente, dejaremos al lado un quejigo, para llegar enseguida al primer repetidor del Tozal de Palo, ir hasta la ermita de Santa Bárbara, donde una panorámica aérea hacia el Embalse de Grado, y la Sierra de la Carrodilla, Torón, que nos queda enfrente, al norte, todo el Pirineo, desde el Collarada, hasta el Pirineo Catalán , pasando por Turbón, Cotiella, Peña Montañesa, curioso vértice geodésico, encima del tejado, actuando de chimenea, a la misma ermita, vale la pena recrearse en este sitio, para reemprender el descenso.