SANTA CRUZ del SIL-SIERRA de VALLELARGO-PICO VALLELARGO-SANTA CRUZ del SIL 05/04/14

A pesar de que el pronóstico del tiempo no era todo lo bueno que deseábamos, 17 senderistas decidimos hacer esta ruta, organizada para el día 05/04/14 por el Club Huellas de Cabrera. Además, nos acompañaron los perros Barry y Alex. Como ya dije, tuvimos mal tiempo, con llovizna y zonas de niebla, lo que redujo las vistas de la Sierra de Vallelargo, los valles y el Pico del mismo nombre. No obstante, disfrutamos de esta ruta en la que, aparte de conocer el cuidado pueblo de Santa Cruz del Sil: visitamos y vimos molinos, atravesamos hermosos bosques de roble y pino con encantadores senderos, encontramos dos refugios, vimos pequeñas cascadas, vadeamos arroyos y pisamos la blanca nieve en nuestra subida a Pico Vallelargo.

Creo que esta ruta es inédita en Wikiloc hasta la fecha (por lo que he podido comprobar), ya que sacamos la misma del libro “El Bierzo, 50 rutas a pie” de Alberto Álvarez Ruiz. Por encargo del Club, desarrollé dicha ruta sobre un mapa de Google tal cual está en el libro. De todas formas, Miguel López siempre lleva un ejemplar del mismo por si surge alguna duda.

Aparcamos los coches y partimos de la coqueta, bonita y adoquinada plaza del pueblo de Santa Cruz del Sil. Destaca en la misma: un agradable contraste entre las paredes construidas con bloques de pizarra y los arcos de piedra caliza, su reloj, una fuente, los faroles y un pedestal con busto de bronce en recuerdo del profesor D. Juan Álvarez Álvarez (1920-1946) dedicado por sus alumnos en agosto de 1982. Un detalle bonito y nostálgico que, en estos tiempos y por desgracia, no suele ocurrir.

Pues bien, como digo, partimos por la derecha, calle arriba con algo de niebla y a través de un sendero. En primer lugar, cruzamos el Arroyo de las Pontigas sobre un improvisado puente de troncos reforzado con tablas para encaminarnos hacia el reconstruido Molino de Perdigones, al que llegamos pronto. Después de fotografiarlo por fuera y dentro (a través de una pequeña ventana) junto a su pequeña cascada, volvimos unos escasos 200 metros sobre nuestros pasos para tomar un camino por el que continuaríamos definitivamente la marcha.

No tardaríamos en tener que cruzar repetidas veces el Arroyo de las Pontigas, teniendo que vadearlo (cruzarlo por el lugar más adecuado, normalmente sobre piedras o troncos). El primer vadeo lo hicimos sobre el tronco de un árbol caído. El segundo fue el más complicado ya que, al realizarlo sobre otro tronco, nos obligó a desviarnos ligeramente del sendero que iba paralelo al río. Así que tuvimos que ascender un pequeño tramo para pasar al lado de un colmenar (si el arroyo lleva un caudal bajo no es necesario). Desde allí retomamos el sendero nuevamente y continuamos a través de bonitos senderos entre bosques de robles, viendo a nuestro paso pequeñas y bonitas cascadas (como en el caso de una retención del arroyo). Aún tuvimos que afrontar más vadeos (5 en total), colocando piedras en el arroyo. Sin embargo, éstos resultaron más fáciles porque eran más estrechos.

A partir del quinto vadeo nos fuimos alejando del arroyo (aunque seguimos paralelo al mismo) para comenzar una prolongada y respetable pendiente. Eso sí, siempre cruzando el bosque de robles por caminos y senderos tan hermosos que hicieron que las cuestas fueran menos duras. La mente se relaja y ensimisma ante en la contemplación de tal belleza.

Y caminando, caminando, llegamos a una pista, donde girando a la derecha y en unos 300 metros, encontramos el primer refugio, La Collada, que presenta en primer término un estanque con agua. El refugio está en buen estado y limpio, construido con bloques de hormigón y piedra, y con varias ventanas que dan mucha claridad. También cuenta con chimenea francesa, parrillas para asados, una robusta mesa sobre pilares y dos bancos igualmente robustos y grandes, una percha de forja, varias sillas apiladas de PVC verde y una despensa en donde había varios tarros, botellas y especias. Como resultaba agradable y confortable, aprovechamos para comer fruta, frutos secos y chocolate (que siempre llevamos para reponer fuerzas).

Terminado el sustento y dejando igualmente limpio el refugio, reemprendimos la ruta retrocediendo los 300 metros anteriores para continuar subiendo por un camino escoltado por brezo. Llegamos a un collado y giramos a la izquierda –con la visión cada vez más reducida a causa de la niebla– para llegar a un punto alto con nieve a la orilla del camino y niebla más espesa. A partir de dicho punto el camino llaneaba, lo que no dio un respiro. En este tramo no pudimos apreciar el bosque de robles que atraviesa el camino ni ver el profundo valle o las montañas más cercanas. A nuestro paso encontramos algunos piornos, que estuvieron presentes hasta cerca del Alto de Primout, al que llegamos después de pasar un pequeño paso canadiense construido con barras de acero para encofrados.

Situados en el Alto de Primout o Collada del Cancerbeiro, hay una pequeña planicie con un pinar y un cruce de varios caminos. Seguimos el de la izquierda, que nos condujo hacia un cortafuego con abundante nieve y espesa niebla. Luego seguimos muy directos y verticales hasta alcanzar el Pico Vallelargo. En su cima, a una altura de 1562 metros, tenemos un vértice geodésico con su placa identificativa, rodeado de brezo y matorral. Eran las 13:50 horas y habíamos caminado 11.2 km durante 04:17 horas. La temperatura era de 12.9oC pero la vista panorámica era nula a causa de la niebla. Como anécdota, comentar que las fotos que hice en color sepia desde este punto –foto del grupo– y hasta pasar el refugio Cabano de Usiles han sido fruto de un despiste fortuito por mi parte. Manipulé mi cámara de fotos de forma inadvertida. A pesar del despiste, las fotos no están tan mal, ya que son acordes con el ambiente climático del momento y del día.

Desde allí, no tomamos el cortafuego que sigue el cordal, sino el que está ligeramente a su derecha, que es por el que hay que seguir. El descenso por el cortafuego limpio de matorral y con excelente piso fue suave. Pasamos por la Campa de la Leñada y luego, llegando a la zona de El Sesteadero, giramos a la derecha para enlazar con un camino que desciende entre pinares. A lo largo del recorrido vimos un torrente y una pequeña cascada; así mismo divisamos, desde lo alto, el refugio Cabano de Usiles en una campa verde rodeado de pinares y una pista que pasa por su parte posterior. A la entrada de la campa hay poste con un letrero en el que reza: “Cabano de Usiles Refugio, PR-LE 43, Altitud: 1170 M” y, cercano al refugio, un estanque con agua. Este refugio, de paredes de piedra, está en peores condiciones y más sucio que el anterior. Tiene una sola ventana, una mesa de cemento sobre columnas de bloques con dos bancos de pizarra, chimenea francesa y parrilla para asar.

Como ya había desaparecido la niebla y lucía el sol, comimos sin prisa en la campa al lado del pilón o estanque. Terminado el postre, partimos de nuevo por un camino que recorre el lateral de un largo pinar en la zona de la Solana de Usiles. Llevábamos, a nuestra izquierda y profundo, el Arroyo de Usiles pero no tuvimos que vadearlo en ningún momento. Recorrimos un largo trecho el camino hasta llegar a los dos molinos de Usiles, que están muy próximos el uno del otro y situados al borde del Arroyo de Usiles. Se notaba que ambos habían sido restaurados recientemente. Cruzamos dicho arroyo por un puente construido con tablones de madera que hay entre ambos molinos.

Proseguimos la marcha. Pronto llegaríamos a una cancilla que corta el paso al ganado y que cerramos al pasar. Después alcanzamos la entrada a Santa Cruz del Sil por su parte alta, pasando al lado de una pista polideportiva, un parque infantil, unos aparatos para que se ejerciten las personas mayores y una fuente. Cruzamos el pueblo de Norte a Sur, comprobando que está bien conservado y, finalmente, llegamos a la plaza desde donde habíamos partido.

Como es habitual en nosotros, nos cambiamos de ropa y calzado y nos dirigimos al bar Changuíta (que está situado por encima de la plaza) para tomar unas consumiciones. El propietario del mismo fue muy generoso, regalándonos a cada uno de nosotros una pequeña linterna-encendedor. Le agradecimos tal detalle.

Estupenda ruta (a pesar de la niebla en algunas zonas) por sus bosques de roble y pinos. Además, cuenta con grandes ejemplares de abedul y encina, arroyos con sus pequeñas cascadas, solitarios molinos y sendos refugios, distribuidos durante el recorrido, en los que cobijarse (si fuese necesario). Por todo ello, esta ruta resulta bien distribuida y variada.

Deseo que vuestros ojos puedan contemplar mejor que los nuestros esta estimulante y atractiva ruta circular por la que transitar. ¡¡Buen camino!!

Un cordial saludo y hasta pronto.



DATOS GPS:

General
Nombre Archivo Track: SANTA CRUZ del SIL-SIERRRA de VALLELARGO-PICO VALLELARGO- SANTA CRUZ del SIL 05-04-14.

Nombre de la salida: PLAZA de SANTA CRUZ del SIL
Comentarios del Track:
Fecha y Hora
Día 05-04-2014
Hora de salida 09:34:48
Hora de llegada: 16:32:29
Duración 06:57:41
Tiempo parado 02:11:59
Tiempo en movimiento 04:45:42

Distancias
Distancia proyectada 18.89 km
Distancia con alturas 19.10 km (real 19.6 km)

Alturas
Track con alturas (3D): Sí
Altura Máxima 1562 m
Altura Mínima: 913 m
Altura de la salida: 927 m
Altura de la llegada: 938 m
Ganancia desde la salida 634 m
Desnivel salida-llegada 11 m
Desnivel máximo 649 m
Ascen.acum. 728 m
Desc.acum. 697 m
Max. Velocidad Vertical: 2640 m/h
Min. Velocidad Vertical: -3870 m/h
Max Pendiente 25.5 %
Min Pendiente -23.1 %

Velocidades
Velocidad media 2.7 km/h
Velocidad máxima 8.2 km/h

Puntos de Track
Número de puntos 1748
Intervalo de grabación 14