Santa Espina-Castromonte por el embalse de río Bajoz

Esta es una ruta sencilla para realizar en familia en una de las zonas más llamativas de la provincia de Valladolid. Para los que estamos acostumbrados a la Tierra de Campos, la ribera del río Bajoz y el monasterio de la Santa Espina es como un oasis situado en los Montes Torozos, una de las pocas zonas montañosas de Valladolid.
Esta zona es un enclave histórico en el que se encuentra el monasterio de la Santa Espina, en sus inicios un zenobio cisterciense y actualmente una escuela agraria dependiente de la Junta de Castilla y León. A pocos kilómetros nos podemos desplazar hasta Urueña, conocido como el "pueblo del libro", famoso por tener más librerías que cafeterías y que conserva su encanto medieval.
La ruta discurre desde el monasterio hasta el pueblo de Castromonte por la ruta que lleva al pantano y después sigue el curso del río Bajoz hasta el pueblo. Atraviesa zonas boscosas y parte del páramo de Tierra de Campos. También es una buena zona para ver aves acuáticas como ánades, pollas de agua, puede que algún cormorán. La vegetación es variada, ya que en la zona cercana al monasterio hay vides y olivos, grandes extensiones de cerales y otros cultivos. En la zona de bosque hay quejigos, encinas, chopos y pinos.
La ruta la realizamos a finales de julio de 2020, con restricciones a causa del Covid-19. Por esta razón comenzamos la ruta en el aparcamiento del monasterio y seguimos la carretera en dirección al pantano. Esta carretera rodea la tapia y sigue hasta la que da acceso a la localidad de Santa Espina y Urueña. Un poco más adelante tomamos un camino hacia la izquierda que conduce hasta la pequeña presa de tierras que remansa el agua del río Bajoz. La zona es boscosa y el embalse pequeño por lo que la presa pasa desapercibida, a no ser porque aguas arriba ya vemos el estanque. Seguimos por el margen derecho en dirección contraria al curso del río dejándonos impresionar por las luces y las sombras del bosque y por algún que otro pato que salía de entre juncos y cañas. A lo largo del curso hay puestos de pesca de madera.
Seguimos hasta la cola del embalse en dirección a Castronuño para alargar un poco más la ruta. En la zona de la cola se puede cruzar por un pequeño puente de madera y volver al monasterio cerrando la ruta por el margen izquierdo. De esta forma se puede hacer la ruta más sencilla y familiar.
Nosotros seguimos dirección Castronuño y un poco más adelante tomamos un camino ascendente a la izquierda que sube hasta los páramos de Tierra de Campos. Llegamos hasta Castronuño y allí tomamos el camino de vuelta siguiendo, en este momento el curso del río. Un poco más adelante nos desviamos para visitar las ruinas de un antiguo edificio que parece un molino y con los espectaculares restos de un palomar con sus nichos para los nidos.
Seguimos el río aguas abajo hasta llegar de nuevo a la presa. Aquí, para no volver por el mismo camino, tomamos otro a la izquierda que sube hasta discurrir paralelo a la carretera por su lado derecho durante un tramo y más adelante la cruza, para desde su lado izquierdo acceder por la parte trasera de la escuela agraria al monasterio.
En este momento nos dimos un pequeño paseo por los jardines.
Es recomendable pedir cita para hacer una visita guiada al recinto histórico, aunque sea con mascarilla y grupos limitados por el Covid-19.