SANTA EULALIA (260) (Cabranes)-PEÑA CABRERA (495)-SENDA FLUVIAL RÍO VIACABA (Circuito)

SANTA EULALIA (260) (Cabranes)-PEÑA CABRERA (495)-SENDA FLUVIAL RÍO VIACABA (Circuito).

DATOS TÉCNICOS:

RECORRIDO: 10,45 k.
ALTURA MÁXIMA: 495 m.
ALTURA MÍNIMA: 180 m.
ASCENSO TOTAL: 361 m.
TIEMPO EN MOVIMIENTO: 3,23 h.
FECHA DE REALIZACIÓN: Mayo de 2019.

SANTA EULALIA (260) es la capital del concejo de Cabranes, que limita al norte con Villaviciosa y al sur con los municipios de Nava más Piloña, formando parte de la Comarca de la Sidra. Se accede a la misma a través de la AS-255 (Villaviciosa-Infiesto). Contó en épocas pasadas con unas 135 viviendas, la mayoría de arquitectura tradicional y 13 hórreos en desigual estado de conservación. Llegó a tener en su día 400 habitantes pero, al igual que el resto del concejo, su historia se vio marcada en el siglo pasado por la emigración, primero a Sudamérica y desde los años sesenta a los núcleos del centro de la región. La iglesia parroquial, construida en el XV, está dedicada a Santa Eulalia de Mérida, habiendo sido restaurado su interior tras el deterioro sufrido durante la Guerra Civil.

La popular peña CABRERA (495) se encuentra al norte del municipio en los límites con el concejo de Villaviciosa. La cartografía al uso distingue entre la peña propiamente dicha, extensa plataforma plana con su vértice geodésico (495), y el área recreativa homónima (468), que se ubica a 700 metros de distancia, al oeste de ese punto, del que lo separa un pequeño collado (426). Es atalaya privilegiada desde la cual se contempla el cantábrico, más Picos de Europa y Cordillera entre otros accidentes geográficos.

La SENDA FLUVIAL RÍO VIACABA, inaugurada en el 2009, discurre por las orillas del arroyo Viacaba, en paralelo a la AS-255. Parte de la escombrera de la antigua mina de antracita en Vegapallía (112), continúa por Viñón (180) tras 500 metros de recorrido y termina en Santa Eulalia (260). Tiene una longitud de 6,67 metros entre ida y vuelta, con un desnivel de 106. Nos incorporaremos a la misma a la altura de Viñón, para finalizar en nuestro punto de partida.

Dejamos el vehículo en un aparcamiento lateral del ayuntamiento de Cabranes. También puede aparcarse en el entorno de la iglesia. Rumbo noreste se toma la primera calle en subida hacia la parte alta del pueblo. En seguida encontramos la señal del PR-AS 52, guía a lo largo de nuestro itinerario hasta la aldea de Viñón (180). Siguiendo esa referencia, abandonamos las últimas casas de Santa Eulalia y, continuando por pista de cemento, iniciamos la subida en zig-zag entre abundante arbolado hasta el caserío de SENDÍN (345) (K.0,8), con algún hórreo y edificaciones pletóricas de colorido por la flora primaveral que las circundan. En lejanía, al suroeste se divisa la sierra de PEÑAMAYOR (1.291) y cotas de la Cordillera Cantábrica.

Obviando una desviación a la izquierda, que se dirige hacia Casa del Monte con antena de TV en sus inmediaciones, continuamos ahora llaneando por pista asfaltada hacia el caserío de ARGAMIA (402) (K. 1,5), entorno de bosque encantado con alguna casa restaurada y decoración naif, más elementos exóticos de dimensiones casi liliputienses, cabras enanas y sus diminutas crías, que ornamentaban el conjunto vagando por la pradera.

A partir de aquí la ruta continúa en la misma dirección por pista de tierra en zona boscosa, atisbándose al norte la colina arbolada de COTOBELLERA (518), techo del cordal donde nos encontramos, y en medio un impresionante circo de exuberante vegetación y caseríos aislados en su centro, como el de Valbuena (320). Pasaremos a los pies del boscoso pico ABEDUL (504) (K. 2), siguiendo el cordal y virando al norte, pico que sólo se hará visible por su cara septentrional cuando hayamos sobrepasado la encrucijada (K. 2,4) en una vallina, conocida como cuatro caminos entre fincas valladas.

Continuamos de frente en ligero ascenso, siguiendo las referencias del PR, escorándose la ruta hacia el noroeste, rodeados de muros de piedra y alguna cabaña, sorteando Cotobellera (518) (K. 3,7) por su cara norte. Nueva perspectiva con el concejo de Colunga y Piloña en primeros planos, más la Sierra del Sueve (1.159) en el horizonte oriental. Llegamos a un pequeño collado, COTOVELLOSO (483), una vez más entre fincas valladas, donde la señal del PR nos indica la dirección a Peña Cabrera. Se trata del conocido como “paso de hombre” con estacas que permiten el paso de personas, pero no de animales.

Nos encontramos en el entorno de peña Cabrera, planicie de pradería y matorral bajo. Siguiendo un sendero levemente marcado avistamos al poniente el vértice geodésico (495) (K. 4,1), escoltado por algún fresno y espineras. Son visibles al sur y suroeste: el Cordal de Ponga y Caso, el Cordal del Retriñón, la Cordillera Cantábrica y Macizo Ubiñas, más Sierra del Aramo en el horizonte occidental.

Pero lo que más nos impacta es la espesa y exuberante alfombra de “asfódelos blancos” o “gamones”, popularmente “varillas de San José”, en plena floración, que colonizan la extensa meseta y sus laderas. Nos cautivan sus flores blancas en ramillete espiciforme insertas en pedúnculos más cortos que ellas; tépalos estrechos, aovados, blancos con nervio central de color pardo; raíces tuberosas y fruto en cápsula coriácea, globosa con costillas transversales.

Descendemos suavemente por la vertiente occidental, siguiendo alguna de las veredas que confluyen en una collada (483), donde hemos de franquear una portilla con nuevo “paso de hombre”. El sendero finaliza en un depósito de agua con fuente anexa, de donde unas escaleras en subida dan paso a la amplia área recreativa de Peña Cabrera (468) (K. 4,8), muy publicitada en el transcurso del descenso hasta el pueblo de Viñón, donde finaliza el PR-AS 52. Desde su cota más alta se pueden avistar al sureste los Picos de Europa.

Una pista de cemento, que parte de la zona occidental del área, desciende en zigzag pronunciado rumbo sur entre el espesor del bosque, y alguna pomarada a la sazón florida, hasta la población de NIAO (280) (K. 6), con algunos ejemplares de tejo. La ruta continúa en bajada por carretera –CB 3- entre la misma esplendorosa vegetación hasta la parroquia de VIÑÓN (180) (K. 7,5), a la altura del Museo de la Escuela Rural de Asturias, que fue escuela mixta hasta 1970, en el kilómetro 7,5 de la AS-255.

Cruzamos la carretera para encontrarnos con la iglesia parroquial de San Juan, datada en el siglo IX, mezcla de prerrománico asturiano y románico, declarada Monumento de Interés Cultural en 1985. Pasando por delante del templo enlazamos con la Senda Fluvial del Río Viacaba. Rumbo sureste continuamos por su pista con ancho de metro y medio, firme de tierra, en la que se instalaron siete pasarelas, que cruzan el cauce del río, y bancos de madera repartidos a lo largo del trayecto. Al cabo de aproximadamente dos kilómetros la pista se desvía al este para finalizar poco después en el polígono industrial de Cabranes. Continuamos unos metros por la acera para tomar seguidamente el conocido “Camín de Socueltu”, camino que en subida conduce hasta la iglesia de Santa Eulalia, evitando el acceso por carretera.

Ruta accesible para cualquier persona mínimamente entrenada; muy fácil al discurrir por pistas o senderos y con desniveles muy suaves. Todo el recorrido está jalonado por una densa y variada foresta, esplendorosa en el apogeo de la primavera y, como fondo, el trino cadencioso y acompasado de diferentes pajarillos marcando su territorio. Se añade el incentivo de contemplar en lejanía los más destacados macizos, cordales y sierras de la geografía asturiana. La cima como tal no es relevante, pero emana el sobrecogedor hechizo del “asfódelo blanco” que, según la mitología griega, tapizaba las praderas de los Campos Elíseos, lugar sagrado donde las “sombras” de los buenos y de los guerreros heroicos gozarían eternamente de una existencia dichosa y feliz. Nosotros lo vivimos como paraíso terrenal de nuestra Asturias querida.