Santa Lucía - Peña El Castro (1.242 m)

El entorno de Santa Lucía, pueblo minero por excelencia, no deja indiferente a nadie, y a pesar de su pasado y de la gran cantidad de explotación que se encuentra, el paisaje conserva zonas realmente bellas. Un lugar de pequeñas hoces y una pequeña atalaya desde la que podemos disfrutar de los alrededores del pueblo, Peña El Castro (1.242 m). Vamos a disfrutar de la montaña en familia y con amigos!

INICIO:

La ruta parte del cementerio de Santa Lucía, en la parte alta del pueblo. Aquí mismo, tendremos suficiente espacio para dejar nuestro coche. Ya desde aquí, podemos ser testigos de la belleza del lugar.

DESCRIPCIÓN:

Comenzamos a caminar cogiendo un estrecho sendero que parte desde el propio parking, en descenso hacia el Área recreativa de Faya. Debemos cruzar las vías por un pequeño túnel y desviarnos hacia la izquierda para llegar a este bonito lugar, donde seguro que se reúnen muchos lugareños en verano.

Seguimos avanzando, dejando el área recreativa a nuestra derecha. Nos desviamos para cruzar un puente sobre el Río Bernesga y encontramos una fuente, ideal para recargar agua, que a alguno se le ha olvidado coger! Aquí mismo tomaremos una pista forestal que nos llevará hacia Peña El Castro, nuestro objetivo del día.

La siguiente parte de la ruta nos guiará en ascenso hacia un collado, perfectamente visible desde aquí. La ruta no tiene pérdida ni dificultad, pero hay que mantener a los más pequeños entretenidos! Debemos desviarnos para continuar en ascenso!

Tras superar algo más de un kilómetro de ruta, llegamos al collado. La ruta circular continua por la derecha, en descenso. Sin embargo, aquí tendremos la opción de subir hasta Peña El Castro. Breve conversación con el resto del grupo y decisión tomada! Seguiremos hacia arriba! Las vistas ya son muy bonitas!

Yago sube como una moto, se nota que disfruta del paseo. Dafne va algo negativa, pero también va ganando metros! El terreno se pone pindio, aunque las vistas que vamos teniendo son perfectas para no desanimarse. Nos vamos encontrando encinas que nos regalan un poco de sombra, que el día es caluroso!

Completado el ascenso, llegamos a Peña El Castro (1.242 m), cumbre en la que encontramos varias antenas y alguna roca ideal para realizar la primera parada serie y comer. Alguno sólo piensa en eso! Vistas magníficas desde lo alto, con Santa Lucía a nuestros pies y todas las grandes montañas de la zona bien visibles, destacando el cercano Cueto San Mateo! Foto de grupo y pequeño secreto para Dafne y para Yago! Luego atravesaremos las paredes más verticales!

Continuamos el trazado desandando la cómoda pista hasta llegar al collado. Se nota que ahora vamos bajando, como van los más jóvenes! Una vez en el collado, continuamos la ruta en descenso hacia la mina, visible al fondo del valle.

Seguimos el bonito trazado descendiendo hacia la carretera que llega hasta la mina. La bajada no tiene ninguna complicación y vamos perdiendo altura sin demasiados problemas.

Completada la bajada, llegamos a la altura de una balsa, seguramente utilizada antiguamente para lavar el carbón. La pista nos dejará a la altura de la carretera que va desde Santa Lucía hasta la mina, donde debemos continuar unos metros hacia el pueblo para volvernos a desvíar hacia la derecha para coger una senda que avanza a media ladera. Esta senda no es visible desde aquí, pero sí desde el collado en el que iniciamos la bajada hacia el valle. Conviene fijarse, aunque tampoco existe mayor problema en llegar a ella!

Ya en la senda, sin pérdida, continuamos la ruta acercándonos a las agrestes paredes de Peña El Castro. La senda es muy sencilla de caminar y sólo algo de vegetación y alguna parte de rocas nos obligan a prestar más atención con los más pequeños.

Los pequeños van ilusionados por atravesar esas paredes que vieron desde lo más alto! Y estamos aquí! La senda se va estrechando, parece que no hay salida, pero aparece un túnel! A los más pequeños les invade la emoción! Hay que cruzarlo, y aunque se vea la salida, allá a lo lejos, será interesante acceder con frontal o linterna. El túnel no tiene ninguna complicación y lo vamos atravesando mientras disfrutamos de la oscuridad! Aquí sucederá uno de los momentos más angustiosos que hemos vivido en la montaña. Afortunadamente, con final feliz. La historia para luego!

Salimos del túnel y obtenemos una buena imagen de Santa Lucía! Pero aún hay más, tenemos que cruzar otro pequeño túnel, sin complicaciones y sin oscuridad, pues es mucho más pequeño! Seguimos disfrutando de la ruta, con muchos alicientes en este punto!

Nada más salir del segundo túnel, llega uno de los puntos más delicados, un pindio descenso hacia Santa Lucía, pueblo que vemos muy cerca pero para el que tendremos que sudar para llegar! De la mano de Dafne y Yago, vamos perdiendo altura muy despacito y sin prisa! La senda está señalizada con varios hitos.

Finalizada la bajada, llegamos a la altura de la carretera, donde nos desviamos hacia Santa Lucía, llegando en pocos minutos. Las mamis se quedarán con los más pequeños y los papis irán a por el coche, que está en la parte alta del pueblo.

A lo largo de Santa Lucía, podremos rellenar nuestras cantimploras de agua gracias a una fuente y a la Fuente La Tina, tendremos que atravesar un puente sobre el Río Bernesga, cruzar las vías para llegar a la parte alta del pueblo y desviarnos hacia el cementerio.

Finalmente, tras recorrer todo el pueblo de punta a punta, llegamos al cementerio, dando por concluida la ruta.

Os acordáis de ese momento angustioso a la altura del primer túnel? Pues bien, como siempre que salimos en familia a la montaña, con nosotros también venía Bianca, nuestra perra. Empezó el túnel junto a nosotros, pero su afán de olisquear cada rincón, le jugó una mala pasada. Nos perdió de vista y encontró en la entrada su salida. Obviamente, la luz que veía al principio del túnel no la veía al final, por lo que decidió retroceder y salir hacia la senda que nos llevó hasta aquí. El problema llegó con la emoción de ambos túneles, el estrés y el cuidado que había que tener en la bajada hacia Santa Lucía y la separación de los miembros del grupo para finalizar la ruta, momentos en los que ninguno de nosotros nos acordamos de la pobre Bianca. El momento de angustia llegó al acordarnos de ella un rato después. Había quedado en el inicio del túnel! Unos más pesimistas que otros, cogimos el coche rápidamente y accedimos por la carretera que se dirige hacia la mina. De nuevo en la senda que da acceso al túnel, un par de voces gritando su nombre y Bianca aparece! Sin duda, un momento de tranquilidad y respiro difícil de olvidar!

CONCLUSIÓN:

Preciosa y sencilla ruta para completar en familia. Buenos alicientes subiendo a Peña El Castro (1.242 m) y grandes momentos disfrutando de las vistas que se obtienen desde la parte más alta de la ruta. Cruzar los túneles es una experiencia única con los más pequeños, que disfrutaron como lo que son, niños! Un trazado con pasado minero y perfecto para pasar una jornada de las que hacen afición!

MÁS INFORMACIÓN:

Santa Lucía - Peña El Castro (1.242 m)

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Rubén Wanderlust (www.rubenwanderlust.com)