SANTA OLAJA DE LA VARGA - OCEJO DE LA PEÑA - (PICO MORO)

He puesto entre paréntesis el Pico Moro porque no lo encumbré. Me quedé a escasos cincuenta metros de alcanzarlo. Justo cuando llegué al waypoint "COLLADA" empezó a chispear. De todas formas intenté alcanzar la cima. No hay ningún paso expuesto en mi trayectoria. Justo donde me quedé había que hacer una pequeña y fácil trepada. Decidí no intentarla por estar húmeda la roca. Hice lo correcto, pues al empezar a descender empezó a llover copiosamente. Si hubiera intentando culminar el riesgo al descender hubiese sido considerable. Dejo el track en su forma original para que veáis el paso fácil que hallé hasta casi la cima.

Comenzamos el itinerario en la plaza de Santa Olaja y muy pronto alcanzaremos la carretera que se dirige a Ocejo. Transitaremos sobre ella durante cinco kilómetros aproximados. Los parajes que observaremos desde ella son, a veces, magníficos y como, además, apenas hay tráfico, el paseo es muy agradable.

Atravesamos Ocejo y la carretera se transforma en carril terroso. Ahora encontramos marcas del PR 50.

Junto a una explotación ganadera el camino se bifurca y tomamos a la izquierda y en ascenso abandonando, a nuestra derecha y desde Santa Olaja, la vistosa compañía del Río de la Duerna.

Hasta las proximidades del Pico Cerroso y de los hermanos Pico del Moro y Peña Rionda el ascenso es gradual y entre hermosos parajes. Podéis ascender a los otros dos altos. No parece difícil su alcance. Mi objetivo, empero, era el Pico Moro.

Me aproximé a él por un carril que perdió algo de altura hasta tener un abrevadero cerca. Lo mejor es aproximarse ascendiendo progresivamente por su ladera gracias a pasos de animales.

Llegué a la collada que separa los dos hermanos y realicé lo que expresé arriba. Tras ello descendí a la collada, pasé entre una alambrada y continué el descenso bajo la intensa lluvia, al principio por un senderín (que recuperé más tarde) y luego monte a través atravesando algún terraplén de fácil paso con la tierra espesa, pero supongo que algo más complicado cuando seca. De todas formas se puede bajar por diferente sitio sin problemas.

Ya de vueltas al senderín me encontré con varios hitos que señalizaban su discurso. Éste desembocó en una suerte de carril. Sobre éste y más carriles arribé al pueblo mojado hasta las trancas, pero sano y salvo por correcta prudencia.

La ruta me reconfortó bastante. Espero que os pase igual.