Senda del Camino Olvidado a Santiago y al Monte Corcos

Entramos en el término municipal de Guardo por el camino que viene desde la localidad de Villanueva de Arriba y que va paralelo a la carretera comarcal CL-626. Esta senda nos llevará directamente hasta el pueblo de Muñeca. Su nombre puede ser de origen íbero, con clara referencia al lugar donde se ubica y que los especialistas traducen como "el pueblo de la colina". La mención más antigua de la que se tiene constancia aparece en el año 934, en el Tumbo Legionense, en que se la menciona como “illa Meneka”. Con posterioridad, en otros documentos aparece como “Monneka”, “Moneka”, “Monneca”, “Munneca” o “muni-eka”. En épocas, perteneció a Juan Rodríguez de Cisneros. Sin embargo, desde el año 1946 pertenece al Ayuntamiento de Guardo.

En una de las páginas de Internet que refleja su historia, recuerdan que a mediados del XVIII el lugar figuraba como realengo y cuenta con 35 vecinos "cabeza de casa" y 8 viudas, contadas cada dos como una. Su iglesia parroquial, dedicada a Santa Eulalia de Mérida, la sitúan en el XVII, aunque para los investigadores es evidente que la fábrica del templo reemplazó a otra más antigua. Cerca de ella, existió una torre de vigilancia que controlaba el tránsito por la zona, en una línea defensiva en la que se cita así mismo a Guardo, San Román de Entrepeñas, Castrejón de la Peña y Cervera de Pisuerga.

Dentro del casco urbano, se mantiene en pie todavía la ermita de Santa Agueda, hoy cerrada al culto y con una preciosa talla románica de la Virgen con el niño. Nace en Muñeca de la Peña en 1934, Claudio Prieto, genio de la música contemporánea, que estudió en el Conservatorio de Roma y se forjó también con las pinceladas que recibió de grandes autores, como Bruno Maderna en Italia.

En los primeros 300 metros, nos acompaña la imponente imagen de la iglesia de Santa Eulalia de Mérida, templo de origen románico que aún conserva buenas trazas de este estilo artístico. Llegamos al centro del pueblo. Una fuente, restaurada en el año 2006, nos da la bienvenida, es un buen punto de encuentro y momento para saciar nuestra sed. Enfrente de la fuente, en la misma plazoleta, encontramos la ermita de Santa Águeda, bien merece un suspiro.

Salimos del pueblo por la calle la Pedraja, aquí se encuentra una construcción tradicional que señala la importancia de la ganadería en el pueblo, el Potro de errar las vacas, y seguimos por el camino paralelo a la carretera comarcal CL-626. A nuestra vera nos acompaña en todo el recorrido, hasta llegar a Guardo, las montañas de la Sierra de la Peña, estribaciones de la Cordillera Cantábrica. A un par de kilómetros divisamos Guardo, al oeste, Peña Corada, una conjugación perfecta ya en tierras leonesas y perfecta panorámica para fotografiar.

Entramos en Guardo por el Barrio de la Tejera. Si estamos sedientos, en el propio barrio podemos saciarnos con las cristalinas aguas de su fuente. Nos incorporamos a la acera de la margen derecha de la CL-626, hasta llegar a la altura del cuartel de la Guardia Civil, donde cruzaremos para incorporarnos a la acera izquierda. Desde dicho lugar podemos divisar la Casa de la Juventud y los pináculos de la fachada del Palacio Barroco del Arzobispo Bullón, buen momento para acercarnos y hacer una visita a su fachada. Continuamos por la calle de la Iglesia, no sin antes pararnos a admirar el hermoso menhir que ofrece homenaje a la Montaña Palentina.

A nuestra vista, la Iglesia de San Juan, inicia un paseo peatonal con unas vistas excepcionales del flanco sureste del municipio. Excepcional templo gótico que guarda en su interior una impresionante pila románica y verdaderas joyas patrimoniales del mejor barroco de la Montaña Palentina. Por detrás de la iglesia, en su lado norte, la plaza del Otero, mirador desde donde obtendrás una fabulosas vistas de la otra parte del casco urbano de Guardo que no pudimos admirar desde el mirador de la calle la Iglesia.
Seguimos nuestra ruta por la calle la Iglesia y admirando el Palacio Gótico de los Cossío, antiguo Ayuntamiento. A continuación, acometeremos la bajada que se encuentra de frente y tomaremos las escaleras donde nos espera un Panel Informativo de la ruta del Camino Olvidado a Santiago bajando por las escaleras del Otero. Seguimos por la Avenida de Castilla y León hasta el puente de piedra, puente del siglo XVIII que salva el río Carrión. Una vez cruzado el puente, seguimos por la calle San Isidro. Llegaremos a la Oficina de Turismo. Allí nos espera un excelente mirador con unas impresionantes vistas del pico Espigüete y del casco urbano de Guardo.

El Espigüete ya no nos abandonará durante todo nuestro recorrido hasta la Ermita del Cristo. En la Oficina de Turismo nos dirigimos hasta la calle Cerojal, que finaliza en el albergue municipal, para continuar con una suave subida por la calle de la ermita hasta el mirador de la intersección con la carretera de la Magdalena. Una vez que cruzamos la carretera, justo en frente tomamos la senda que nos llevará hasta la Ermita del Cristo por la senda que finaliza a las puertas de la ermita. Una vez en la campa del Cristo, podemos disfrutar de unas excelentes vistas de la Montaña Palentina. Además, es una zona muy apropiada para descansar en los soportales de las instalaciones del Cristo o en la zona de merendero contiguo a la ermita.