Senda del río Muniellos y laguna de la Isla (Reserva Integral de Muniellos)
near Moal, Asturias (España)
Viewed 4769 times, downloaded 210 times
Trail photos
Itinerary description
Punto de partida: Tablizas de Muniellos.
Espacio protegido: Reserva Natural Integral de Muniellos.
Época recomendada: Primavera y otoño.
Elementos de interés: Robledal y lagunas.
Tipo de camino: El camino se encuentra perfectamente marcado y señalizado.
Servicios: Los establecimientos más cercanos se encuentran en Moal.
Descripción del itinerario.
Hoy me acerco a una de las masas forestales más importantes de Europa, en el bosque más mítico de Asturias: Muniellos. Siguiendo el curso del río, tanto como para la ida como la vuelta, llegaremos a uno de sus lugares emblemáticos, la laguna de la Isla. El mayor bosque de árboles autóctonos te espera pero antes tiene que pedir cita en: https://sede.asturias.es/portal/site/Asturias/menuitem.46a76b28f520ecaaf18e90dbbb30a0a0/?vgnextoid=c8e6799a28d4f010VgnVCM100000b0030a0aRCRD
La ruta comienza en el Centro de Recepción de la Reserva Integral de Muniellos (figura 1), lugar donde debes estar a las 9 si quieres hacer la ruta con calma y entregar tu permiso. El centro se halla ubicado en lo que era la última empresa que explotó este bosque, Muniellos S. A.
Los primeros 650 metros serán por una senda accesible para personas inválidas de madera con paneles indicativos sobre la flora y fauna del bosque aunque algo carcomidos por la humedad (figuras 2, 3 y 4). Hace años, este bosque pertenecía a la familia de los Condes de Toreno; en el siglo XIX lo vendieron.
Tras recorrer 650 metros, la senda accesible finalizará cuando crucemos el primer puente de nuestro recorrido (figura 55) dando comienzo el barro, tierra, hojas y demás objetos que veamos en nuestro camino (figura 56). En el kilómetro 1,1 se puede observar en el río Muniellos los restos de una presa que debería tener alguna función específica para controlar el cauce del río especialmente en los meses de crecidas (figura 5).
Seguiremos caminando por la margen derecha del río por un camino en ligero ascenso y, por ahora, bastante amplio (figuras 6, 7, 8 y 9). Si nos fijamos, los árboles son más frondosos por el sur que por el norte, pero ojo, en el hemisferio norte jeje, que en el sur es al revés.
Muniellos si destaca por algo es por sus magníficos robles. Y es que éste es el lugar de bosque de roble albar más grande de España y uno de los más importantes de Europa (figuras 10, 11, 12, 13 y 14). La mayoría de árboles no han sido podados, hecho por el que Muniellos se salvó de una tala abusiva, y es que estos robles al ser tan silvestres, la calidad de su madera no era tan buena como se pensaba.
En el kilómetro 3 cruzaremos el segundo puente (figura 15) pues el primero era el que habíamos cruzado nada más acabar la senda accesible para minusválidos. 500 metros más adelante, el camino comienza a estrecharse y a subir cada vez más aunque sin ser nada del otro mundo (figuras 16, 17, 18 y 19).
Avanzando nos encontraremos con algún pedrero o canchal de rocas cuarcitas. Como se puede apreciar en las figuras 20 y 21, la parte baja cuenta con mucho musgo. En cambio, la parte de arriba apenas tiene. Esto se debe a que en la parte inferior se está estabilizando el canchal mientras que en la superior siguen cayendo materiales por lo que no puede proliferar el musgo.
El tercer y cuarto puente que salvan el arroyo de La Candanosa y no ya el río Muniellos, se encuentran a menos de 100 metros de distancia el uno del otro, a 800 metros de altitud (figuras 22, 23, 24 y 25).
Es frecuente ver muchos robles repletos de musgo, el cual aparece en la parte norte de los árboles. En Muniellos hay una gran diversidad de musgos y líquenes. Éstos últimos son un indicador perfecto de la buena salud que goza Muniellos debido a la calidad del aire, solo hay que ver las barbas de algunos robles (figuras 26, 27, 28 y 29).
Continuaremos asciendo sin despegaremos del arroyo en ningún sólo momento, será nuestro acompañante bien por la izquierda o derecha hasta las lagunas que se encuentran a algo más de 1300 metros de altitud.
Del kilómetro 5,6 al 6,4 aproximadamente será una de las ascensiones más pindias debido a la gran magnitud de rocas calizas que están sueltas con las que podemos resbalarnos. En este tramo se hallan el quinto, sexto y séptimo puente, prácticamente seguidos ya que cruzaremos de orilla derecha a izquierda y viceversa por donde se dirija el camino (figuras 30, 31, 32, 33 y 34).
El bosque de Muniellos estuvo a punto de desaparecer en una ocasión, en la que con toda la fiebre de los ferrocarriles, una empresa francesa diseñó un tren que venía desde San Esteban de Pravia a Muniellos para poder cortar toda la madera, bajarla hasta San Esteban y llevársela para Francia, pero era carísimo. Entonces, de nuevo, se salva Muniellos (figuras 35, 36, 37 y 38).
A medida que avanzamos, el sendero se vuelve más estrecho y pindio. En el kilómetro 7,1 superada la barrera de los mil metros de altura, se ubica el octavo y último puente de nuestro recorrido (figuras 39 y 40).
Ganando altura, entraremos en un precioso bosque de acebos (figuras 41 y 42). Como curiosidad, estos árboles tienen las hojas de abajo con espinas para que no se las puedan comer los herbívoros. En cambio, las de arriba como ya no llegan, no presentan bordes punzantes.
Cuando llevemos recorridos 8,4 kilómetros, habremos llegado al desvío de las tres señales (figura 43) donde confluyen el camino largo (figura 44) y la senda del río, por donde hemos venido. A partir de aquí solo nos quedará un kilómetro para llegar a la laguna de la Isla.
Recorriendo este último kilómetro, desaparecerá en cierta medida la cobertura arbórea para cobrar protagonismo el brezo (figura 46). En Muniellos hay multitud de vallinas, valles pequeños. Dicen que hay tantas vallinas como días tiene el año (figuras 45, 47, 48 y 49). Las lagunas están encaramadas en una terraza glaciar, por eso, el último kilómetro discurre por debajo de la terraza donde está excavada la laguna.
Finalmente, en el kilómetro 9,4 habremos llegado a nuestro objetivo: la laguna de la Isla (figuras 50, 51, 52 y 54). Desde la laguna se puede observar el recorrido encajonado del fondo de valle por el que hemos ascendido, remontando el curso del río Muniellos y más adelante el arroyo de La Candanosa (figura 53). También se puede observar, más dificultosamente, la ruta larga, que asciende a media ladera entre robles.
Impresiones.
Muniellos es uno de los pocos bosques que quedan en España primigenios. Después de estar en manos de unas cuantas empresas que se dedicaban a talar árboles, acabó en manos del Estado, siendo declarado Paisaje Pintoresco. En 1970 se prohibieron las talas y en el 73 se lo compró a Muniellos S. A. Más adelante, fue declarado Reserva de la Biosfera de Fuentes del Narcea e Ibias pero a su vez, es Reserva Integral, gozando de una protección máxima. Es misión de todos, protegerlo y conservarlo como ha llegado a nuestros días.
Espacio protegido: Reserva Natural Integral de Muniellos.
Época recomendada: Primavera y otoño.
Elementos de interés: Robledal y lagunas.
Tipo de camino: El camino se encuentra perfectamente marcado y señalizado.
Servicios: Los establecimientos más cercanos se encuentran en Moal.
Descripción del itinerario.
Hoy me acerco a una de las masas forestales más importantes de Europa, en el bosque más mítico de Asturias: Muniellos. Siguiendo el curso del río, tanto como para la ida como la vuelta, llegaremos a uno de sus lugares emblemáticos, la laguna de la Isla. El mayor bosque de árboles autóctonos te espera pero antes tiene que pedir cita en: https://sede.asturias.es/portal/site/Asturias/menuitem.46a76b28f520ecaaf18e90dbbb30a0a0/?vgnextoid=c8e6799a28d4f010VgnVCM100000b0030a0aRCRD
La ruta comienza en el Centro de Recepción de la Reserva Integral de Muniellos (figura 1), lugar donde debes estar a las 9 si quieres hacer la ruta con calma y entregar tu permiso. El centro se halla ubicado en lo que era la última empresa que explotó este bosque, Muniellos S. A.
Los primeros 650 metros serán por una senda accesible para personas inválidas de madera con paneles indicativos sobre la flora y fauna del bosque aunque algo carcomidos por la humedad (figuras 2, 3 y 4). Hace años, este bosque pertenecía a la familia de los Condes de Toreno; en el siglo XIX lo vendieron.
Tras recorrer 650 metros, la senda accesible finalizará cuando crucemos el primer puente de nuestro recorrido (figura 55) dando comienzo el barro, tierra, hojas y demás objetos que veamos en nuestro camino (figura 56). En el kilómetro 1,1 se puede observar en el río Muniellos los restos de una presa que debería tener alguna función específica para controlar el cauce del río especialmente en los meses de crecidas (figura 5).
Seguiremos caminando por la margen derecha del río por un camino en ligero ascenso y, por ahora, bastante amplio (figuras 6, 7, 8 y 9). Si nos fijamos, los árboles son más frondosos por el sur que por el norte, pero ojo, en el hemisferio norte jeje, que en el sur es al revés.
Muniellos si destaca por algo es por sus magníficos robles. Y es que éste es el lugar de bosque de roble albar más grande de España y uno de los más importantes de Europa (figuras 10, 11, 12, 13 y 14). La mayoría de árboles no han sido podados, hecho por el que Muniellos se salvó de una tala abusiva, y es que estos robles al ser tan silvestres, la calidad de su madera no era tan buena como se pensaba.
En el kilómetro 3 cruzaremos el segundo puente (figura 15) pues el primero era el que habíamos cruzado nada más acabar la senda accesible para minusválidos. 500 metros más adelante, el camino comienza a estrecharse y a subir cada vez más aunque sin ser nada del otro mundo (figuras 16, 17, 18 y 19).
Avanzando nos encontraremos con algún pedrero o canchal de rocas cuarcitas. Como se puede apreciar en las figuras 20 y 21, la parte baja cuenta con mucho musgo. En cambio, la parte de arriba apenas tiene. Esto se debe a que en la parte inferior se está estabilizando el canchal mientras que en la superior siguen cayendo materiales por lo que no puede proliferar el musgo.
El tercer y cuarto puente que salvan el arroyo de La Candanosa y no ya el río Muniellos, se encuentran a menos de 100 metros de distancia el uno del otro, a 800 metros de altitud (figuras 22, 23, 24 y 25).
Es frecuente ver muchos robles repletos de musgo, el cual aparece en la parte norte de los árboles. En Muniellos hay una gran diversidad de musgos y líquenes. Éstos últimos son un indicador perfecto de la buena salud que goza Muniellos debido a la calidad del aire, solo hay que ver las barbas de algunos robles (figuras 26, 27, 28 y 29).
Continuaremos asciendo sin despegaremos del arroyo en ningún sólo momento, será nuestro acompañante bien por la izquierda o derecha hasta las lagunas que se encuentran a algo más de 1300 metros de altitud.
Del kilómetro 5,6 al 6,4 aproximadamente será una de las ascensiones más pindias debido a la gran magnitud de rocas calizas que están sueltas con las que podemos resbalarnos. En este tramo se hallan el quinto, sexto y séptimo puente, prácticamente seguidos ya que cruzaremos de orilla derecha a izquierda y viceversa por donde se dirija el camino (figuras 30, 31, 32, 33 y 34).
El bosque de Muniellos estuvo a punto de desaparecer en una ocasión, en la que con toda la fiebre de los ferrocarriles, una empresa francesa diseñó un tren que venía desde San Esteban de Pravia a Muniellos para poder cortar toda la madera, bajarla hasta San Esteban y llevársela para Francia, pero era carísimo. Entonces, de nuevo, se salva Muniellos (figuras 35, 36, 37 y 38).
A medida que avanzamos, el sendero se vuelve más estrecho y pindio. En el kilómetro 7,1 superada la barrera de los mil metros de altura, se ubica el octavo y último puente de nuestro recorrido (figuras 39 y 40).
Ganando altura, entraremos en un precioso bosque de acebos (figuras 41 y 42). Como curiosidad, estos árboles tienen las hojas de abajo con espinas para que no se las puedan comer los herbívoros. En cambio, las de arriba como ya no llegan, no presentan bordes punzantes.
Cuando llevemos recorridos 8,4 kilómetros, habremos llegado al desvío de las tres señales (figura 43) donde confluyen el camino largo (figura 44) y la senda del río, por donde hemos venido. A partir de aquí solo nos quedará un kilómetro para llegar a la laguna de la Isla.
Recorriendo este último kilómetro, desaparecerá en cierta medida la cobertura arbórea para cobrar protagonismo el brezo (figura 46). En Muniellos hay multitud de vallinas, valles pequeños. Dicen que hay tantas vallinas como días tiene el año (figuras 45, 47, 48 y 49). Las lagunas están encaramadas en una terraza glaciar, por eso, el último kilómetro discurre por debajo de la terraza donde está excavada la laguna.
Finalmente, en el kilómetro 9,4 habremos llegado a nuestro objetivo: la laguna de la Isla (figuras 50, 51, 52 y 54). Desde la laguna se puede observar el recorrido encajonado del fondo de valle por el que hemos ascendido, remontando el curso del río Muniellos y más adelante el arroyo de La Candanosa (figura 53). También se puede observar, más dificultosamente, la ruta larga, que asciende a media ladera entre robles.
Impresiones.
Muniellos es uno de los pocos bosques que quedan en España primigenios. Después de estar en manos de unas cuantas empresas que se dedicaban a talar árboles, acabó en manos del Estado, siendo declarado Paisaje Pintoresco. En 1970 se prohibieron las talas y en el 73 se lo compró a Muniellos S. A. Más adelante, fue declarado Reserva de la Biosfera de Fuentes del Narcea e Ibias pero a su vez, es Reserva Integral, gozando de una protección máxima. Es misión de todos, protegerlo y conservarlo como ha llegado a nuestros días.
Waypoints
Information point
2,221 ft
Fin del sendero para personas minusválidas
Comments (4)
You can add a comment or review this trail
Una ruta muy interesante donde descubres los secretos ocultos de la laguna de la Isla y la senda del río Muniellos, muy recomendable.
I have followed this trail verified View more
Information
Easy to follow
Scenery
Difficult
Para disfrutarla hay que estar en buena forma. Hay piedras resbaladizas por la humedad. Ir con precaución. Para los que tengan vértigo, hay un paso malo.
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Ruta sin complicación técnica, imprescindible si eres de Asturias hacerla, aunque requiere la reserva dado que está acotado a 20 personas por día. Lo malo es que tienes un tiempo limitado para hacerla, por lo que aunque hagas la ruta corta hay que darse un poco de prisa, pero se hace bien. Un poco duro el tramo en el que se comienza a ascender para las lagunas pero se hace sin problema.
Gracias por la valoración Sergio. Personalmente no conozco bosque más espectacular. Y en otoño ahora tiene que ser tremendo.